ocho

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VALENTINA VIAMONTE

Abro la puerta de mi casa, recién llegaba de la facultad, tenía mucha hambre y sueño, ayer me quedé hasta tarde haciendo una maqueta para hoy y no dormí casi nada.
Estos días estuve un poco bajón por todo lo que pasó pero entendí que ya es un problema de el que tenga un mal trato conmigo, es un adulto y se comporta como un niño, yo no tengo que darle pelota, algún día va a hablar conmigo y disculparse por sus actitudes.

Hoy a la noche agus me invito a cenar a un lugar, por lo que se es muy formal el restaurante así que me tengo que vestir bien. Descanse un poco durmiendo la siesta y después empecé a preparar la cena, agus me pasaba a buscar a las ocho y media.

Termino de ponerme el perfume y escucho la notificación del celular, veo y es Agustín que me dice que esta en la puerta. Guardo todo rápido en mi carterita y voy corriendo hacia la puerta de casa.

- Hola gordo - le doy un beso.

- Hola mi amor, estas muy linda - me mira y me sonríe.

- Vos estas hermoso - le agarro los cachetes y lo beso devuelta - sos un bombón.

- Te amo - habla riéndose

Arranca el auto y prendemos camino al restaurante, quedaba a veinte minutos de acá, asi que me adueñe de la música del auto y puse feid, como debe de ser.

- Sin whisky me siento prendio' , chingamos pero somos amigos ¿Como le digo que yo quiero que ella solo chingue conmigo ? - Canta agus mirándome de reojo.

- Amigos no somos - me río mientras paso mis uñas por su nuca, amo verlo manejar, me calienta y no es algo sexual.

- Tu ere' real ella son China, China, el culito rebota y no canta guayna - pone una mano en mi pierna y la apreta.

- Flaco córtala de estar tan bueno - le digo y me roba un beso ya que el semáforo esta en rojo.

Llegamos al restaurante y no podía creer lo hermoso que era, era muy top, demasiado. Estaba vestida más o menos pera lo que es este lugar, agus se puso una camisa blanca y un jean negro, esta hermoso.
Nos sentamos y cuando me trajeron la carta abrí los ojos al notar los precios de acá, pero para pagar esto tengo que vender tres riñones.

- Agus vos viste esto - levanto la carta.

El se me ríe y contesta - Yo pago amor, pedite lo que vos quieras - Claro, el señorito es jugador de futbol y puede pagarlo.

Yo pedí unas pastas con una salsa rara que había, porque a ver, milanesas con papas fritas no hay acá y agus se pidió unos pescados que le gustan a él.

- No sabes, ¿viste meli? El otro día me llamó y me contó que andan necesitando una profe de danza para nenas de trece, doce - Le digo. Yo hice desde que soy muy chiquita danza clásica y contemporánea, meli fue una de mis profes.

- ¿En serio? Re lindo gorda, ¿vas a decir que si? - le pregunta con una sonrisa.

- Creo que si, estuve pensando y los horarios que me paso me van perfecto y la idea de dar clases me encanta - Digo contenta - Además capaz podría empezar a entrenar yo también, hace tiempo que no voy a danza.

- Creo que no vas hacer como un año, esta re lindo, además de que es algo que te gusta - me dice.

- Si creo que voy a decirle que si - tomo un poco del vino que pedimos, si llegábamos a pedir una gaseosa acá te la tiran por la cabeza.

Cuando terminamos de comer agus quiso ir a caminar por el laguito que esta acá cerca asi que fuimos. La noche estaba re linda, hacía calor pero no era ese insoportable, estaba hermoso.

amor guardado | agus giayDonde viven las historias. Descúbrelo ahora