Ven aquí, y ámame [LISKOOK] ✔️

Extra 02

—¿Estás lista?

La voz de el alfa suena a sus espaldas. Es gruesa y siente su olor intensificarse con cada segundo que pasa. Lisa tiembla con solo oírla. Voltea a verle y está sin camiseta,  con el torso marcado al aire.

—Y-yo —Jungkook alza una ceja, totalmente impaciente—. S-sí, está bien.

Con los ojos vidriosos, el coreano se le acerca y los latidos de Lisa se aceleran. Le quita la camisa con mucho cuidado, besando su hombro desnudo.

—Tienes que estar segura.

—Lo estoy —aclara con voz quebrada.

—Puedo hacerlo sólo si no estas segura.

—Te dije que sí.

Rondando los ojos, el alfa la recuesta en la pequeña cama de su habitación. Lisa gime al sentir el calor del castaño cubrirle, se siente segura ahora.

—Jungkook —chilla al momento de que el nombrado pasa sus labios por su estómago plano.

Los besos que le da por todo el cuerpo, hace que se pierda, fijándose unicamente en lo bien que se siente.

—J-jungkook —vuelve a decir su nombre, en un gemido ahogado.

Jungkook ha comenzado a prepararla con los dedos, evitando gemir cuando toda la húmeda entrada de la omega. Muerde su cuello suavemente, tratando de no romper la piel, por más que quiere. —¿Lista? —Lisa asiente—. ¿Segura?

Traga saliva, pero vuelve a asentir. Jungkook sisea, entrando en Lisa, y ella quiere gritar de tan bien que se siente. La omega sólo abre los labios en grande, nada saliendo de ellos.

(...)

Rosé seca las lágrimas de su amiga, sonriendo triste.

—Tienes que decirle, Lis.

La omega niega, repetidas veces.

—Me da miedo.

—No debería. Es su hijo. Es un alfa, no sabes como se va a poner cuando se entere de que no le dijiste.

—Pero...

—Mira, ahí está —apunta con la cabeza, hacia donde el castaño estaba con su propio alfa (Jimin) —, Tú dile, y si él no te quiere escuchar, entonces ese ya es problema suyo.

—Rosé, no...

—Ve, Lisa —le empuja, tirándole un beso a Jimin, el alfa azabache camina con una sonrisa hacía su omega, viendo a la de ojos grandes pasar a su lado. Lisa camina a Jungkook y esté, sin darse cuenta de
la tailandesa, avanza hacía la cafetería. A Lisa no le queda más que seguirle. Lo observa sentarse en una mesa, solo, ve a Taehyung acercarse pero él niega con la cabeza, el chico tuerce la boca y se aleja, sin insistir más.

—Ehh —se sienta en la silla del frente, el  alfa ni siquiera se molesta a alzar la mirada, con el aroma sabe perfectamente quién es.

—  H-hola — con nerviosismo, la omega dice. No sabe como empezar. Jungkook prosigue comiendo la fruta con yogurt de su plato, el que trajo de casa—. Jungkook... yo... —otra vez, parece no hacer caso, pero, lo que no sabe, es que toda su atención esta sobre ella, desde que la olió, entrando a la cafetería—. Quiero hablar contigo.

—¿Y qué estás haciendo? —con una ceja alzada, bebe de su botella de agua.

—Es... importante.