6. Mierda

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Butters apartó de inmediato a Kenny para luego levantarse de la cama de un salto, mientras el otro rubio se quedó estático en su posición, mirando al castaño con una sonrisa ladina y ojos indiferentes.

—¡E—Eric! ¡Puedo explicártelo! —apenas pudo decir el chico tartamudeando

—Hazlo entonces —miró el computador que seguía reproduciendo el vídeo y los gemidos se escuchaban cada vez más fuertes.

— Es sólo que... —hizo una pausa tratando de ordenar las palabras en su mente para decir una excusa lo suficientemente no patética— quería saber cómo se hace, y creí que esto sería una buena idea...

—¿En serio? ¿Viendo porno con Kenny? Es la peor idea que pudiste tener ¿Quieres contraer sífilis Butters? —Eric desvió la mirada, como si no soportara ver al pequeño rubio.

Decepción, era lo que Kenny pudo notar en sus ojos. Y él no estaba conforme con eso, deseaba más. Tenía que terminar el caos que había iniciado.

—Oh vamos, tranquilízate ¿Quieres? —Llamando la atención, Kenny se levantó del otro lado de la cama para luego pasearse con cierto descaro en la habitación— Solo queríamos divertirnos un poco.

Cerró el portátil con un golpe suave.

Entonces volvió a sonreír cuando detectó cierto fuego en los ojos de Eric Cartman, quizás éste era un buen momento para sacar toda la mierda que llevaba dentro.

—¿Crees que soy idiota?

—¿Quieres la verdad? —respondió Kenny aún burlón, quién no notó como Butters lo miraba tratando de reconocer a su amigo.

De pronto Cartman tomó al chico por el cuello de la camiseta y lo sostuvo contra la pared. Butters soltó un grito ahogado mientras miraba la escena asustado.

—¡No soy un pendejo! Sé que quieres a Butters solo para ti —el nombrado miró confundido—. ¡Dile que has estado jodiendo todas nuestras citas solo porque eres un egoísta de mierda, dile que quieres controlar su vida, dile todo lo que has estado planeando con Tammy solo para jodernos! ¡Dícelo!

—¿Qué carajo dices Cartman? —Masculló aún relajado— Todos sabemos la clase de persona de mierda que eres. No soy un egoísta por querer protegerlo de ti. ¡No entiendo por qué está tan enamorado de ti, pero está tan ciego que no ve cuánto le vas a joder la vida!

—¡Mierda, basta! —gritó Butters con la voz entrecortada. Sin embargo, ambos chicos lo miraron — Dejen de hablar como si no estuviera aquí.

Los tres guardaron silencio y se calmaron unos segundos. Sin embargo, el silencio era tenso, Eric y Kenny parecían un par de animales listos para lanzar la primera mordida.

— ¿Es cierto Kenny? —Habló de nuevo el más pequeño— Nunca harías eso, tú mismo dijiste que no dejara que nadie controlara mi vida. Tú no harías eso...

Kenny observó la decepción en los ojos de Butters ¿Debería ser la misma clase de mierda que Cartman y mentir?

A estas alturas, dónde el gordo ya lo había exhibido, tal vez era lo correcto.

—Yo no quise controlar tu vida Butters. Hice todo esto porque te quiero, porque no quiero que nadie te haga daño. Es solo que no te das cuenta de que Cartman...

— ¡Deja de decir eso! — Las orejas y cara de Butters se tornaron de un color rojizo mientras sus ojos se veían vidriosos a causa de las lágrimas —No soy un niño ¿Entienden?

Ambos lo miraron impresionados, rara vez Butters dejaba ver su enojo, normalmente cualquiera pensaría que es un chico inofensivo y siempre risueño, pero cuando comenzaba a enojarse y gritar era tenebrosamente extraño.

Sólo ♡ mátame amor [Kenny x Butters x Cartman]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora