Sólo ♡ mátame amor [Kenny x Butters x Cartman]

2.Tarde o temprano

En la enfermería Kenny era como un cliente frecuente debido a las heridas que solía hacerse, aunque la enfermera agradecía que, aunque el chico apareciera muy seguido por ahí, los accidentes que solía tener eran menos graves a diferencia de cuando era un niño. Al menos ya no eran mortales.

—Listo, recuerda que tienes que volver para que te quite las puntadas— explicó la enfermera al terminar el nudo de la sutura en la mano del chico— Por cierto ¿Puedo preguntar cómo te hiciste esto? O me darás la misma respuesta de siempre.

Kenny bajó de la camilla de un salto mientras evitaba mirar a la señorita.

—Solo me distraje—masculló intentando terminar la conversación lo más rápido posible.

La enfermera solo hizo una mueca y sacó una paleta de su bolsillo.

—Eres un niño muy distraído — dijo ofreciéndole la paleta. Kenny la tomó un poco molesto por haberle dicho "niño", cuando, a su parecer, él ya era un hombre. —Por cierto, allá afuera están esperándote.

Kenny le dirigió una mirada a sus senos antes de meterse la paleta en la boca y salir por la puerta hacia el pasillo. Butters estaba sentado en el suelo mirando a la gente pasar, cuando lo vió salir se levantó de un salto.

—¿Cómo está tu mano? —Preguntó inmediatamente. Kenny le mostró la herida como si fuera algo normal.

—Fueron 27 puntadas de ambos lados. Suerte que no me atravesé la mano —Contestó sonriendo.

—Estás loco —habló Butters sorprendido de que el chico lo tomara tan a la ligera.

Kenny solo rió ante el comentario. De pronto recordó cómo se hizo esa herida, recordó la manera en la que Eric había tocado los labios de Butters para quitarle el queso de la comida chatarra ¿Cómo es que, por fijarse en aquella escena, ni siquiera sintió que estaba clavando con tal fuerza un cuchillo de plástico en su propia mano?

Sintió una mano en su hombro que lo saco de sus pensamientos, Butters le estaba dedicando una sonrisa cálida.

—Podemos saltarnos las clases ahora que estas herido ¿Quieres ir a mi casa a jugar videojuegos?

Kenny le devolvió una sonrisa cómplice, nada le gustaba mas que ir en contra de las reglas de los adultos, más aún cuando Butters las rompía.

×∆×

—Aja! Casi te gano — exclamó Butters cuando Kenny hizo el último combo para dejar al personaje de Butters en el suelo en medio de un charco de sangre.

Kenny solo le sonrió descaradamente, conteniendo las ganas de humillarlo. De pronto Butters miró su celular y en su cara se dibujó una preocupación tal que tuvo que levantarse inmediatamente para luego ponerse los zapatos.

—¿Pasa algo? —preguntó Kenny curioso.

—Lo siento Kenny, es solo que olvidé que había quedado con Eric para vernos esta tarde — contestó Butters para después buscar su abrigo rápidamente.

—Ya veo, me invitaste a jugar aun así...

Butters interrumpió su búsqueda para voltear a verlo. Kenny no sabía fingir tristeza en su cara, pero fue lo suficientemente real para que Butters se volviera a disculpar.

—No es eso, es solo que te veías tan desanimado que quería hacer algo por ti, eso es lo que hacen los amigos.

Al ver su preocupación, Kenny paró de actuar inmediatamente para acercarse a el y tocarle el hombro.

—Esta bien, no te preocupes, iré a casa de Kyle. Estaré bien.

Butters notó la cicatriz en la mano de Kenny antes de que el mismo la apartara para caminar hacia la puerta de su habitación. No podía evitar sentir un poco de lastima por él, pero antes de poder pensar en cómo compensarlo, Kenny abrió la puerta para después caminar por el pasillo y bajar las escaleras, haciendo que el otro se apresurara para alcanzarlo