⁠෴⁠° Porque te fuiste° ⁠෴⁠

◍un juego◍

El sol se oculta las nubes me abrazan,mi corazón llora,y la luna me acompaña ante tu ausencia🥀.

Sabía que Mito tenía razón, ante la ausencia de su esposa, su hijo ya no hacía más rabietas ahora era un niño amable y sonriente.

Pero sabía que eso solo era un capricho de su hijo, que se negaba en aceptar la realidad y no contemplara dicho capricho.

Dos semanas desdé que la uzumaki dejo el apartamento del alfa. Dos semanas de alivio para el cachorro quien ahora sonreía, gritaba de diversión y corría de un lado a otro. El alfa dispuso a pasar unos días de esa semana con el, ya que le contrato una niñera y tenía que trabajar, este menor se portaba bien con ella, cosa que molesto al alfa porque si ella no era familiar.

Para óbito ese día que la omega dejo el hogar, dio un suspiro de alivio, no quería a esa mujer menos en su casa, en la cama de su madre, en la cama donde contaban historias de terror, donde compartían sus penas, donde lo veía a su madre llorará en cilencio, donde el se ocultaba cuando su madre "jugaba con su abuelo a quien grita más". No quería ver a esa mujer en la casa donde su madre le dio tanto amor a pesar que su madre estaba roto por dentro. Usaba a menudo sus gafas donde el olor a menta de madara lo relajaba y le daba seguridad, algo donde el se sentía cómodo ya que el olor a rosas de la uzumaki le fastidiaba en ciertas palabras.

Era de noche y una tormenta eléctrica, fuerte se hizo presente asustando al menor quien grito cuando cayó un relámpago en alguna parte de la ciudad, el menor corrió como nunca gritando..

-Mami!!..Mami!!!MAMITAAA!!!TENGO MIEDO-dijo golpeando la puerta de la habitación de su padre sin obtener respuesta siguió golpeando-Mami*nif*
mamita ábreme *nif*tengo miedo *nif*papi no está mami.........MAMA!!!!- grito con fuerza sintió como su garganta estaba siendo raspada por dicho y feroz grito,tanto como el llanto y el miedo se apoderaba de el esa noche tormentosa.

-niño que pasó estás bien ven aqui-aprecio su niñera con la pijama puesta y una mirada aterrada viendo al menor acurrucado en la puerta de la habitación Cerrada.

El niño al ver a dicha mayor corrió hacia ella, la beta lo acurrucó en sus brazos al cachorro dándole seguridad.

Las horas pasaron y la beta estaba sumamente enojada con el alfa que la contrato, se suponía que el llegaría antes de anochecer pero este no cumplió su cumplido. Ver a un niño en ese estado le partia el alma, este cachorro necesitaba a su madre el olor a menta se estaba deshaciendo y eso hacia llorará al menor, cosa que ella no sabía cómo atender.

-no llores pequeño....apuesto que tu mami también está llorando por estar lejos de ti-dijo la beta abrazando al menor para trasmitirle seguridad y cariño para tranquilizarlo.

-mi mami está llorando-dijo el pequeño viéndola con los ojos abiertos y lágrimas saliendo de ellos.

-si...y si no dejas de llorará apuesto el tampoco lo hará....deja de llorar cachorrito hermoso, sabes apuesto que tú mami te extraña muchísimo-dijo en un todo suave y amable para que el menor dejaste de llorar.

-el......me extraña?!-dijo el menor limpiándose los mocos que salían de su nariz.

-claro-dijo divertida viendo la cara del menor con ternura.

-yeii mami todavía piensa en Tobi yeii-dijo abrazando ala beta-tobi está feliz-dijo casi en susurro y durmiéndose después de llorar sin parar.

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En la hora del desayuno estaba una incomodidad muy notable, dicho alfa aprecio alas dos de la mañana y su olor estaba mezclado con la uzumaki, el menor al sentir el olor de dicha mencionada se enfureció más con su padre.