INFIDÈLE.

Capítulo dos

Chanyeol hizo girar el bolígrafo entre sus dedos, mientras veía con una sonrisa, las fotos de la última colección de su marca de ropa en la computadora. El modelo que posaba con las diferentes prendas se veía impresionante, tal y como Chanyeol se había imaginado cuando hizo los bocetos.

Soltó un suspiro suave y tiró su cuerpo contra el respaldo de su gran silla giratoria. No veía la hora de que su amante volviera de sus actividades programadas en el extranjero para poder tenerlo de nuevo en sus brazos. Haberle comprado el mismo perfume que usaba él a su prometido, muy pronto ex, lo hacía extrañar aún más.

Sabía que estaba mal lo que hacía, amaba a su pareja por supuesto, habían estado juntos desde la universidad y el hombre estuvo a su lado en el proceso de la creación de su propia marca, pero una semana después de la maravillosa propuesta de matrimonio que le hizo, lo conoció a él y por primera vez dudó de lo que sentía hacia su compañero de vida.

Su corazón había latido cómo nunca antes lo hizo con solo mirarlo y sus mejillas se tiñeron de rojo como una colegiala cuando el otro le regaló una pequeña sonrisa. Trató de luchar contra todos esos nuevos sentimientos que crecían dentro suyo, incluso quiso ignorarlos. Sin embargo, se dio cuenta que no podía hacerlo porque el pequeño hombre se volvió una constante en su vida cuando lo anunciaron como la cara de su marca y aunque intentó persuadir de buscar a otro modelo, terminó aceptando que no podía hacer eso. El joven había encajado perfectamente con el concepto de sus prendas y el aura que transmitía era realmente encantadora que cautivaba a cualquiera que lo mirara.

Habían pasado tres años del primer encuentro y dos años en los cuáles Chanyeol dejó de resistirse, dejando que sus instintos fueran los que dieran un paso hacia lo que es ahora un secreto a voces dentro de su compañía.

Sabía que sus empleados conocían su relación con el modelo, además de cómo no iban a hacerlo, si Chanyeol se aparecía en cada sesión de fotos que hubiera o de la obvia devoción con la que hablaba sobre el más joven cuando mencionaba que cada prenda fue pensada y creada para él.

Podía decir que parte del éxito de su marca era gracias al joven, que aunque trabajaba con otros grandes patrocinadores, mayormente usaba su ropa. Ni siquiera su pareja que comparte casi el mismo estilo y talla lo hacía, a pesar de que era tan famoso como el modelo.

Chanyeol chasqueó la lengua y arrojó la lapicera sobre el escritorio.

— ¿Debería ir a Japón? — Murmuró para sí mismo, mientras se volvía a acomodar en la silla y pensaba si era buena idea viajar hasta donde se encontraba su amante. — Podría decir que es un viaje de negocios de última hora... Ah, no... — Soltó un suspiro cansado. — Cierto que tengo una cena con mis padres y no puedo faltar.

El hombre alto tomó su celular y abrió los mensajes que su prometido le había enviado hace un par de horas, pero que no había respondido por estar ocupado viendo una y otra vez las fotografías de su modelo estrella y amor de su vida.

De: BAE

Channie, no te olvides la cena de esta noche.

Yo iré directamente desde la empresa, surgió algo con mi próximo comeback y tengo que arreglarlo, pero estaré allí a tiempo.

Te amo.

Chanyeol hizo una mueca ante lo último que decía. Aquellas dos palabras provenientes de su pareja ya no le hacían sentir nada y él desde hace rato que había dejado de decirlas, sin embargo, el otro no parecía notarlo, o quizás sí, pero no había momento adecuado para hablarlo.

Cuando iba a responderle, una nueva notificación le llegó y frunció el ceño al ver el nombre, pero sin dudarlo abrió el mensaje y varios más llegaron después de ese.

De: Kim Jongin

Park, quería avisarte que mi hombre se desmayó en una de las sesiones y tuvimos que traerlo a una clínica porque se veía realmente mal. Ahora está llorando y quiere verte, le dije que te hiciera una videollamada pero él quiere que estés aquí...

Realmente está siendo un dolor en el culo.

[Audio enviado]

¿Lo escuchas? Es un mocoso caprichoso.

De todas formas, no es necesario que vengas, mañana viajaremos de nuevo y de seguro que esto se le va a pasar después de que descanse.

El director inmediatamente llamó preocupado a Jongin. ¿Cómo que su pequeño amante estaba internado?

La charla que tuvieron fue breve, aunque disipó un poco la preocupación de Chanyeol sobre la situación. El modelo había estado trabajando demasiado en el último tiempo que su cuerpo le estaba pasando factura, pero aún así, Jongin le prometió que cuando volvieran irían a hacerse un chequeo completo y empezar a rechazar algunas ofertas para cuidar el bienestar del joven que desde su primer trabajo no ha parado.

— Cuídalo, Kim, es mi mayor estrella. — Chanyeol le pidió sinceramente, pasándose una mano por el cabello.

— Obvio que voy a cuidarlo, es mi hombre después de todo. — Jongin respondió con un deje de diversión en su voz. — Voy a colgar, el doctor está aquí para darle el alta.

— Bien, lo llamaré más tarde, gracias. — El alto se despidió luego de eso.