"My Little Sunshine..." Parte II (Bible & Build)

Capítulo 25 (+18 consentido)

Si no te gusta este tipo de fanfic eres libre de no leer...  bla, bla, y bla jajajajaj...

La bella y la Bestia...

Build no recordaba cuánto tiempo pasó frente a la ventana abrazado a su fiel compañero de cola rayada, sólo era vagamente consciente de que en algún punto el cansancio había podido más que él y lo había llevado a arrancar la sábana del sillón para acurrucarse ahí hecho un ovillo.

Durmió sin descanso temblando a ratos por el frío del ambiente y doblando más sus rodillas hasta pegarlas contra su barbilla. Su mente entraba y salía de sueños sin sentido producto de una mezcla de los sonidos de la calle y sus propios pensamientos.

La imagen de la mansión que había dejado atrás se esfumó justo cuando escuchó el sonido de unas llaves abriendo una cerradura; Build se vio dentro del viejo Mulsanne que su nong conducía para él, sin embargo el estruendo de un golpe desdibujó la imagen en su cabeza dejando un mar de colores y capturas viejas de la gloriosa temporada de Bible siendo su guardaespaldas. Hubo un tamborileo lejano antes de que un susurro dulce penetrara en sus oídos.

—Build...

Esa cadencia en la voz de barítono, la ternura en los dedos tibios y rasposos que rozaban sus mejillas, un suspiro golpeó la piel de su cuello, y Build podía jurar que de verdad tenía a su nong a su lado. Se removió sonriendo en el sillón, de pronto ya no hacía tanto frío.

—Build...—repitió la voz esta vez más fuerte, el muchacho soltó una risita espabilándose un poco. Soñar con su novio era algo que siempre lo hacía sentir endemoniadamente feliz, y más en aquellos en los que se sentían tan reales. Un toque efímero como el de una pluma pero ligeramente húmedo y cálido llegó a su frente y bajó por su entrecejo hasta llegar a la punta de su nariz, dejando un caminillo que le cosquilleó a Build haciéndolo inflar las mejillas.

Giró su cabeza hacia ese vaho caliente que parecía llamarlo con insistencia y finalmente abrió uno de sus ojos con la lentitud de la pereza. Una forma desigual apareció ante él, Build no podía describir el color aunque lo conocía... como la palma de su mano. Era el color de la piel quemada.

Su corazón dio un vuelco contra su pecho y se incorporó de golpe. Sentía sus ojos ardiendo y la cabeza le daba vueltas, sin embargo aun así había podido verlo, tan sólo por un instante, sus ojos negros como pozos acompañados de sus labios delgados curveados en una sonrisa radiante, antes de impactarse contra los suyos.

Bible estaba ahí, devorándole la boca como un miserable que ha encontrado un oasis en el desierto. Lo besó exigente, fuerte y posesivo, lo besó grabándole en su piel jugosa la forma de sus labios. Lo besó hasta derretirlo contra el viejo tapizado del sillón.

Build no supo en qué momento terminó debajo del cuerpo de su nong, separados únicamente por el pequeño cuerpecito de Manzanilla que no había soltado en todo el rato. Sonrió como si no hubiera mañana, encantado de tener a ese magnifico hombre tan grande sobre él, el mayor le devolvió el gesto antes de mirar hacia el tierno gato y arquear una ceja significativamente.

—Los extrañamos—murmuró contra sus labios rozándolos provocativamente sin llegar a consumar el beso que el chiquillo tanto anhelaba y por el que un mohín se formó en sus labios. Bible se río sin embargo, demasiado satisfecho seguramente por causar en él semejante estado de necesidad y al mismo tiempo bajó una mano para sacar a la rosada y visceral pareja de Manzanilla.

Build soltó un aullido de felicidad y los abrazó a ambos con cariño, tanto que seguramente ya los abría asfixiado sí fueran de carne y hueso.

—También yo quiero uno así...—musitó el Pelinegro acariciándole las mejillas sin dejar de sonreírle. Se inclinó una vez más hacia él y el menor pudo sentir el calor de su cuerpo ardiente aplastando el suyo desde la cintura hacia abajo, una corriente eléctrica le cruzó por la espina dorsal y tuvo que morderse el labio para no soltar un gemido.