PERRO AMOR / VHOPE

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Jungkook se perdió en el perfil del castaño, su piel blanca no poseia rastros de imperfección, su boca era pequeña y sus labios tienen una peculiar forma de corazón, marcando extrañamente el rosa natural de la carne, el lunar en el labio superior le daba un toque de inocencia y sensualidad.

Su estatura es la de un doncel promedio no va más allá del 1.60, no puede negar que su cuerpo esta bien proporcionado en los lugares correctos, con curvas muy marcadas en su cintura y cadera, además de un culo gordo, piernas largas y tonificadas.

Hoseok tiene todos los requisitos que Taehyung busca en sus conquistas, y lo más importante, demostró ser un doncel de buenos principios y buena moral, que no cae facilmente en sus encantos o insinuaciones, por esa razón se había vuelto más que un reto para Taehyung, uno muy difícil y complicado pero no imposible.

Una llama de celos avivó en su interior, Jungkook continúo buscando algún defecto en el doncel, extrañamente, entre más buscaba menos encontraba y aquello lo llena de frustración, porque no existe nadie perfecto y el no era la excepción, el sonido del móvil lo saco de sus pensamientos, Jungkook contestó la llamada sin detenerse a leer el nombre.

"¿Qué? ¿Pensastes que ibas a salir de Hoseok tan fácilmente?".

Taehyung se dejó caer sobre la silla mientras bebía un sorbo del vaso con whisky, confiaba en el juicio de su padre y el amor incondicional que sentía por la empresa, así que, no debia preocuparse por nada más que no sea la absurda guerra, que Jungkook le habia declarado a Hoseok.

"Acuérdate de mi, ¡Eso no va a pasar!".

_ Espera que me desocupe aquí y hablamos. Porque me parece que le hemos dado largas a este asunto y debemos ponerle un término serio.

Barbulló, tragandose toda esa molestia que lo carcome por dentro, Jungkook estaba cansado de esperar y de las evasivas de Taehyung, le estaba dando muchas largas al asunto asi que debia poner un limite de tiempo, finalmente, colgó la llamada y guardo el móvil en su bolso mientras espera con impaciencia a su esposo.

Por su parte, Hoseok aprovechó la situación para contarle lo sucedido en la obra al señor Kim, sin omitir ningún detalle por minimo que parezca, Namjoon seguia escuchando con atención al bonito castaño, con cada palabra que salia de su boca se enfurecia un poco más, no le gusto para nada las acciones de Yoongi y Jungkook.

Sin embargo, el ligero movimiento de la pequeña boca del doncel lo tenía embobado, sentía que moria de ternura cada vez que sus labios formaban de manera insconciente aquel bello puchero, finalmente, después de esperar por largos minutos al pálido, Yoongi hizo acto de presencia en la oficina.

_ ¡¿Ibas a echar a este Señorito solo porqué paró la construcción de unas puertas caras e inútiles?!-Siseó, Namjoon siempre considero al menor como alguien inteligente y ecuánime, pero, al parecer, lo habia juzgado mal, Hoseok se encogió en su sitio debido al tono empleado del mayor, era consiente que aquella reprimienda le traeria un nuevo enemigo- ¡¿Será que con este mismo criterio estamos manejando toda la empresa?!.

_ ¡No! ¡Claro que no, Namjoon! ¡Déjame explicarte...

_ ¡Pero que rayos vas a explicarme, Yoongi! ¡Además le mandaste hacer un trabajo que estaba hecho hace más de unas semanas! ¡Esto es inaudito! ¡Aquí el que se debería ir es otro!.

Yoongi jadeó incrédulo, lanzó una mirada de soslayo a su esposo, buscando una ayuda que nunca llegó y no sabia como manejar las cosas, su corazón no paraba de latir y sus manos sudaban a horrores a causa de los nervios, se maldijo así mismo por ser el pequeño titere de su esposo, aún asi, Namjoon no podía despedirlo porqué es el arquitecto encargado de muchos proyectos.