05. Efectos secundarios

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Se sentía horrible, tomar aquella pastilla parecía no haber sido buena idea puesto que sentía unas náuseas terribles, su cuerpo dolía, en especial sus pechos, definitivamente no volvería a tomarse una pastillas del día después jamás, cuidarse era muchísimo mejor, Jo había estado regañandola todo el día en casa, y a la hora de llegar al trabajo, Hikari no había hecho más que burlarse de ella, y lo ni siquiera se atrevía a quejarse porque ella misma lo había provocado con su calentura por aquél chico de brillantes ojos y sonrisa encantadora.

Había estado ensayando junto a Hikari, pero debido a su malestar, cada movimiento brusco o rápido que hacía terminaban mareandola y provocando fuertes punzadas en su cabeza, debido a esto había terminado en el suelo, con Hikari junto a ella mientras acariciaba su cabello, mientras ella esperaba a que los malestares pasaran, pero no era así y apenas era Lunes.

—Aquí dice que no puedes hacer fuerza ni movimientos bruscos... —Comentó la azabache mientras leía en su celular—. Kaede-chan estás haciendo todo lo contrario a lo que debes hacer, deberías estar descansando.

—No puedo, tengo trabajar —Murmuró ella mientras incorporaba su cuerpo, abrazándose a si misma de manera que sus brazos quedaron sobre sus pechos, provocando que una mueca se formara en sus labios—. Siento que me explotarán los pechos en cualquier momento...

—Asakura-chan, Yuta dijo que estabas mal ¿Qué sucede? —La voz de su jefa se escucho junto a ellas haciendo que ambas voltearan para verla subir al escenario.

—No es nada...

—Si lo es, resulta que su cuerpo no esta bien en este momento y no puede presentarse, acaba de desvanecerse por el esfuerzo —Explicó Hikari mientras observaba a la jefa.

—¿Puedo saber por qué? —Quiso saber Aoi mientras se colocaba de cuclillas frente a la joven.

—... Sufrí una caída en el edificio esta mañana, el pasillo estaba húmedo y no tenían señalizado, creo que me apresuré demasiado —Mintió ella mientras se levantaba con cuidado, siendo ayudada por su amiga y su jefa.

—Bien, entonces no te presentaras hoy ¿Quieres ayudar en el bar o quieres ir a casa? —Preguntó Aoi mientras pasaba su mano por el cabello de la joven.

—No puedo ir a casa, necesito trabajar —Comentó Kaede mientras bajaba del escenario.

—Bien, entonces ayuda a Yuta en el bar, no te esfuerces demasiado, así puedes reponerte.

La castaña asintió levemente, tomando su bolso para luego dirigirse al bar, sonriendo levemente cuando el chico le dedicó una pequeña sonrisa, acercándose a ella para sobar su espalda; ambos se dispusieron a preparar todo antes de que el club abriera, viendo a Hikari desaparecer del escenario, para luego verla aparecer en el aro de acrobacia que bajaba desde el techo, ensayando la presentación mientras ella sonreía ampliamente al verla siendo acompañada por algunas de sus compañeras desde atrás.

—Kari se lucirá sola esta noche —Se burló Yuta mientras la observaba con diversión.

—Pues me alegro por ella, se luce todas las noches, que lo haga sola esta vez no me preocupa en lo absoluto —Dijo ella sin darle importancia al comentario burlón del chico.

—Lo qué es yo, tendré que soportar a los hombres amontonados aquí cuando vean que hay una chica sexy en la barra —Comentó el pelirrojo mientras se cruzaba de brazos.

—Bueno, créeme que no estoy de humor para soportar a ningún tipo asqueroso —Comentó ella mientras dirigía su mirada hacia el escenario.

La castaña sonrió levemente al escuchar al chico reír mientras volvía a su trabajo, mientras ella observaba los ensayos, preparando algunos sumos para tener listos para los cócteles; una hora después el bar abrió y los clientes poco a poco fueron llegando, dando inició a las presentaciones mientras ella se encargaba de preparar algunos tragos, guiándose por las recetas que se encontraban en la parte inferior del mostrador.

Lovers Hurricane •Koga Yudai• #3Donde viven las historias. Descúbrelo ahora