𝐂𝐇𝐄𝐋𝐒𝐄𝐀 | 𝐷𝑖𝑐𝑘 𝐺𝑟𝑎𝑦𝑠𝑜𝑛

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HOLA, Garvirus -se burla Tim cuando este y Dick vuelven a la sala-
Casi de tamaño humano otra vez -añade Jinx-
Hola, Gar, ¿todo bien, amor? -le pregunto abrazando sus hombros-
¿Cómo está Conner? -pregunta Dick-
No sé, no deja de llamarme “colega de la vega” -le dice Tim tras abrazar a Gar-
A mí me ha dicho que estoy de toma pan y moja, creo que está bien -añade Jinx-
¿Seguro que se ha librado de la maldición? -pregunta Dick-
Eso parece -respondo pasando uno de mis brazos por su espalda-
Está limpio. Lo he revisado por un lado y por el otro -me da la razón la de pelo rosa-
Hay menores aquí -Dick tapa los oídos de nuestra hija, la cual estaba colocada en mi arnés, sacándole una inocente sonrisa a la menor-
Hola, chicas -saludo al verlas llegar- ¿y Sebastian?

SE sacrificó para salvarnos. Ahora lo tiene ella -explica Kory-
Por lo que sabemos, el templo puede estar en la cima del Everest -nos recuerda Tim-
Si lo encontramos, ¿cómo lo sacamos de allí? -pregunta Rachel-
Podríamos teletransportarnos. ¿O no se puede? -sugiere Gar comienzo un plátano-
Eso suponiendo que no hayan realizado el ritual -les dice Kory- si ya hubiesen...
Estamos jodidos. Y el mundo entero -finaliza Jinx-
Tenemos que tener fe en que podemos salvarlo -les pido dejando de jugar con los muñecos de mi hija para mirarlos-
Bueno, ¿y que hacemos? -pregunta la de pelo rosa pero siendo interrumpida por alguien entrando-
Te pasa algo en la cabeza -señala Gar al ver que Conner está rapado-
¿Llevas colonia? -añade Kory tosiendo-
Es Drakkar Noir. De nada -responde Conner mirando a Jinx- si ya habéis disfrutado las vistas, tomad asiento. Hay un demonio que detener
Baja los pies de ahí -quito sus pies de la mesa con una mueca. Conner estaba muy raro-

LA Luna de Sangre se pone en dos horas y seis minutos -nos recuerda Dick- ¿cuál es tu gran idea?
Es un plan de tres pasos: los encontramos, los matamos y nos tomamos una cerveza -enumera Conner-
Suena bien -le da la razón Jinx-
No vamos a hacer eso -niega Rachel-
Estoy harto del jueguecito de rescatar y rehabilitar demonios -explica Conner- esa zorra mató a mi padre y me metió una serpiente. Es hora de que ella y su nene se despidan
Está en alerta máxima -responde Dick- hay que traer a Sebastian sin enfrentarnos directamente
Hay un viejo dicho, Richard -le dice él- “quien no aprende de la historia es un...” ¿Cómo era? Sí. “un puto imbécil”
¡Conner! -le regaño aún dándole de comer a la menor. Dick solo acaricia mi espalda y niega con la cabeza en respuesta-
Si lo hubiéramos matado cuando pudimos, ya estaríamos camino de Frisco -continua Conner-
No lo llames Frisco -le pide Gar-
Nosotros no matamos, Conner -le responde Dick-
No somos asesinos -añade Rachel-
Ya. Excepto por toda la gente que habéis matado. Cómo los que quemasteis vivos en el manicomio provocando así este lío -recuerda Conner- yo no digo nada. Son cosas que pasan. A veces, la gente muere. No siempre es malo
No mataremos a Sebatian -niega Rachel-
Hasta Bruce lo entendió al final. ¿Sabéis cuánta gente ha matado el Joker desde que le reventó la cabeza? -pregunta Conner para luego señalar a Tim-
Cero -responde él-
Cero. El número que me gusta -celebra Conner-
Necesitamos calmarnos... -pido en voz baja viendo a la gente comenzar a separarse- Dick, ¿estás bien? ¿Quieres que hable con Conner o algo...?
No te preocupes -niega él limpiando la mejilla de Cora- algo le pasa a Conner, más tarde lo averiguaré
Eres guapísimo -rompo el silencio sacándole una pequeña risa. Beso sus labios y le abrazo-
¿Tú crees? -me pregunta abrazando mis hombros- ¿Incluso con estas ojeras y el vómito de Cora en la camisa?
Incluso así -respondo con una media sonrisa. Dick acaricia mis mejillas con delicadeza y planta un beso en mis labios-

¿RECUERDAS lo que dijo Gar del teletransporte? -pregunta Jinx caminando delante de nosotros- bueno, esa es la idea.
Recuerdo que dijo que aún no se había inventado -responde Dick-
Si me hubieras preguntado a mi, te habría dicho que si por unos magos, hace más de 10000 años -contesta ella-
Deberían haber dicho algo -dice Dick-
Si, no digo que lo perfeccionaran. ¿Cómo os lo explico? -pregunta Jinx para luego girarse hacia un portátil. Cambia de opinión y dibuja en una pizarra- bueno, los antiguos magos acertaron con la primera parte. Siempre ha existido un hechizo para desorganizar a una persona.
¿Desorganizar? -repite Tim-
Sí. Ya sabes, hacerla pedacitos -explica Jinx- esa era la parte fácil. La difícil era volver a armarla. Ahí se torció el asunto. Algún pobre siempre acababa con un pie saliéndole por la boca o en forma de gelatina gigante con un solo ojo
Esto empieza a sonar muy poco prometedor -contesta Kory-
El otro problema era que nadie podía predecir donde estaría exactamente la persona cuando se reorganizara -continua la de pelo rosa- no sabían que la Tierra se movía por el espacio, así que alguien podía reaparecer a un kilómetro del suelo o justo en el fondo del océano
Ojalá tuviéramos un ordenador que pudiera predecir exactamente dónde se reorganizaría la persona -comienza Dick-
Y tuviera la capacidad de controlarlo -añade Gar-
Hasta el último átomo -finaliza Jinx- esperad. Lo tenemos. De nada
Eres un genio -felicito con una media sonrisa-
Alguien que sabe apreciarlo -agradece ella haciendo una reverencia teatral-

TRAS llegar a una de las salas de informática y ver a Conner dándole órdenes a los demás para un plan extraño sobre mover satélites.
Qué locura -niega Dick-
¿Comparado con que? Hace dos horas estaba en un estómago matando a una serpiente -le recuerda Gar con la menor entre sus brazos. Es incluso más mimosa que su madre-
Y dos horas antes, estábamos matando zombis -añade Kory-
Y yo besé a Bernard -confiesa Tim en voz baja-
Ese es mi chico -celebro chocando una de sus manos para luego abrazarle-
Gran noche para todos -responde Dick sin saber muy bien que decir-
Lo ha conseguido -señalo la pantalla mostrando la luna blanca de nuevo-

HABÍAMOS conseguido averiguar dónde se encontraba Sebastian gracias a Rachel pero resulta que habían capturado a Conner y con eso el plan tuvo que cambiar.
Estábamos luchando contra el grupo raro del culto hasta que Sebastian pronunció en alto las palabras, bebió la sangre y echó unas ondas expansivas que nos dejo aturdidos por unos segundos.
Poco después nos fuimos esfumando hacia la oscuridad.
No había absolutamente nadie a mi lado
¿DICK? -grito entre asustada y preocupada. Al no recibir respuesta comienzo a girar sobre mi eje para tener visión de todos lados. Lo único que conseguí es escuchar la tenue voz de Gar- ¿Gar? ¿Eres tú? Dime algo. ¡Por favor!