VI

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Los labios ajenos se encontraban sobre los suyos,las manos suaves y cálidas recorrían su cuerpo caliente que con cada beso aumentaba su temperatura

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Los labios ajenos se encontraban sobre los suyos,las manos suaves y cálidas recorrían su cuerpo caliente que con cada beso aumentaba su temperatura.

Caliente,se sentía caliente.
La lengua del otro hombre entrelazada con la suya en un baile pasional y desenfrenado, soltó un pequeño gemido al sentir los labios ajenos descender a su cuello y las dulces manos acariciar su cabello.

— Te amo,Ryu.

Su mente voló cuando los ojos azules lo miraron con amor y lujuria.

De repente salió de su ensoñación cuando su rival lo golpeó en la frente.

— ¡Oye,que carajos te pasa,Jinko! — acarició su frente.

— Yo me preguntó lo mismo,te quedaste pensando un rato largo, empecé a preocuparme cuando te llamaba y no contestabas — se explicó Atsushi algo nervioso de que el Pelinegro le devolviera el golpe.


Akutagawa miró al albino un rato largo hasta que recordó algo.
Hace minutos antes Atsushi,el hombre tigre,su rival,la persona que más detesta en la vida,le pidió que fuera su novio.


— No

— ¿No,que?

— No acepto salir contigo,no eres mi tipo y lo digo con todo el afán de ofender — contesto Akutagawa a lo que Atsushi lo fulminó con la mirada.

— Tú tampoco eres mi tipo para que lo sepas...pero en serio necesito que seas mi novio,te lo juro,si no fuera importante nunca te lo pediría.

— ¿Y para que?,¿por qué piensas que te ayudaré?

— Por qué si no lo haces le diré a Dazai-san que fuiste tú quién vómito sobre él la otra vez — chantajeó el albino.

Contexto,una noche,su mentor lo había llevado a un bar para beber algo (obvio se había negado pero ya saben cómo es el castaño,nadie se puede negar a él y menos Atsushi) entonces fueron a ese bar y se encontraron por casualidad con el Pelinegro acompañando a su superior de sombrero.
Quién al ver a Dazai automáticamente se pusieron a discutir y a tener una competencia de quién aguantaba más el alcohol,competencia en dónde se vio obligado a participar Ryunosuke.
Quien al estar tan borracho vómito sobre Osamu pero por suerte este estaba tan ebrio que hasta el día de hoy no se acuerda de ese suceso.

Quien si recuerda eso,es Atsushi quien había podido librarse de la competencia de milagro y había presenciado todo.
Akutagawa estaba tan horrorizado y avergonzado por lo que pasó,que no tuvo más remedio que aceptar a regañadientes la "oferta" del ojibicolor.

— Está bien, fingiré ser tu novio

Atsushi no tendría que verse tan feliz por ese hecho,pero lo hizo.
Ahora Dazai-san no sospecharía de sus sentimientos por él y no saldría humillado (y lastimado)
Su plan era perfecto,al menos en su mente.

𝑷𝒆𝒓𝒔𝒊𝒈𝒖𝒊𝒆𝒏𝒅𝒐 𝑨𝒕𝒂𝒓𝒅𝒆𝒄𝒆𝒓𝒆𝒔 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora