★ Viernes ✩

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Saihara había decidido que tenía que ir a ver a Kaito. También había decidido que le demostraría que no había nada que temer, que podrían seguir siendo amigos a pesar del enamoramiento de uno hacia el otro.

Si Kaito no quiere tener un noviazgo, Shuichi respetará eso, sin embargo, quiere conservar la amistad; que nadie cambie entre ellos.

¿Pueden volver a la normalidad después de todo lo dicho en la cafetería?

Tras lo sucedido en la cafetería, Shuichi y Kaito fueron a sus respectivas casas, con miles de docenas en su cabeza, preguntando si haberse declarado era justo lo que necesitaba su próspera amistad.

El atardecer ya había llegado, Shuichi estaba en su cuarto, terminando de escribir el poema. Pensativo, mientras no pensaba en nada más que plasmar las ideas en su cabeza. Y una vez finalizado, suspiró y observó el trabajo finalizado.

—(Ahora tengo que ver a Kaito)—Piensa Saihara mientras se pone de pie y busca una chaqueta para abrigarse del frío—(¿O debería esperar hasta mañana?)

—¿Shuichi?—Pregunta su tío, quien se había acercado a la puerta—Kaito vino a verte, te está esperando en la sala.

—¿Kaito?—Shuichi cierra el cuaderno para devolverlo a su mochila—Dile que suba por favor, (no me esperaba que viniera hasta aquí).

El tío de Shuichi baja para invitar al pelimorado. Shuichi aprovecha el momento para arreglar lo máximo que puede su habitación, cerrando los cajones y cubriendo su cama con una inmensa cobija para que no se note que está desarreglada.

—Bien chicos, los dejo solos—Comenta el tío de Shuichi, ahora acompañado de Kaito Momota—Aunque prohibido cerrar la puerta.

—O-Oye—Expresa Shuichi mientras empuja suavemente a su tío fuera de su habitación.

—Si, si, lo sé, es por precaución—Responde el tío mientras levanta los hombros—Pero ya eres un adolescente y luego no quiero...

—¡Bye, plis!—Expresa Shuichi avergonzado, sacando a su tío, obligándolo a irse y medio-cerrando la puerta.

—Jaja, tu tío es genial—Dice Kaito.

—Más o menos—Dice Shuichi antes de soltar un largo suspiro—Amm, hola.

—Hola—No es la primera vez que Kaito visita la habitación de Shuichi, aunque es la primera vez en la que se percibe una atmósfera tediosa y asfixiante—Siento no haber llamado antes de venir.

—Eres bienvenido aquí—Shuichi no puede evitar analizar el aspecto sombrío del astronauta—A mí tío le caes bien, así que no le molesta que vengas.

—Es bueno oír eso—Aunque Kaito sonría como siempre, Shuichi sabe que es una mueca falsa, ninguno está feliz como normalmente lo están cuando conviven—Yo...necesitaba hablar contigo.

—Justamente estaba a punto de ir a visitarte—Responde Shuichi con una media sonrisa.

Kaito intenta devolverle el gesto, pero en su lugar su mueca falsa desaparece, siendo reemplazada por un gesto entristecido.

Kaito se sienta en la cama de Shuichi, y este, preocupado, se sienta a su lado.

—¿Estás molesto?—Pregunta Kaito mientras mira al pelinegro.

—Estoy confundido, te fuiste y ahora estás aquí.

—Sí que soy indeciso.

—No importa—Shuichi coloca su mano en la espalda del astronauta—Hay que hablarlo, ¿de acuerdo?

—Bien...—Kaito estira los brazos, intentando que su actitud natural y despreocupada se haga cargo de todo—Respecto a lo que pasó...mira, me gustas Shuichi, desde hace meses, pero nunca me lo terminé de creer, no porque estuviera mal, sino porque no quería que nuestra relación cambiara.

✩ Las Estrellas en tu Mirada ★ [MomoSai]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora