El Señor del Mar 🧜‍♂️❤👨🏼‍🤝‍👨🏻 (Erasermic)

Cap 12

Al fin llegó la hora de dormir y sinceramente el rubio se sentía aliviado; nadar desde una larga distancia por un largo tiempo era agotador.

En los pasillos del segundo piso se encontraba caminando el ex tritón, sumergido en sus pensamientos quejándose de lo sucedido abajo, sintiéndose humillado por suplicarle al humano para poder quedarse. Se supone que es un rey, nadie debería darle órdenes ni tampoco implorar, los que debían pedirle clemencia eran sus súbditos o cualquiera que fuera menor que él.

Pero aún así tuvo que hacerlo, ese humano no lo hubiera aceptado por lástima, era duro y perspicaz, y eso le interesaba mucho. Aún así debía mantener una actitud humilde a ojos del peli negro sin importar su disgusto, porque si no lo hacía, él lo votaría a la calle y su plan quedaría arruinado.

Llego donde el más bajo dispuesto a preguntar dónde dormiría.

HY: disculpa Shota, una pregunta ¿dónde voy a dormir? *pregunto con un tono tranquilo en su voz*

El moreno volteo a verlo, tenía su cara seria, disgustado por el uso de su nombre.

SA: llámame Aizawa *comento de manera seca mientras el rubio arrugada un poco el rostro disimuladamente* hay dos cuartos de invitados abajo, escoge uno, los dos están preparados para las visitas *explico para luego entrar al suyo*

Sin ninguna otra información Hizashi bajo las escaleras, cambio su rostro tranquilo por uno más molesto. Le hubiera avisado abajo para no perder tiempo en subir las escaleras pero ya no podía quejarse.

Al llegar se dirigió al pasillo por donde entro, recordando que habían dos puertas, sospechaba que esas eran las habitaciones de invitados, debido a que suelen estar alejadas de la habitación principal.

Aunque las que estaban en los pisos bajos solían ser para el personal que trabajaba en la casa, se molestó un poco al pensar que su anfitrión lo consideraba un empleado en vez de un invitado.

Escogió la que estaba más cerca de la sala y al abrirla pudo apreciar su contenido. La habitación era un poco blanca pero destacaba más los colores marrones por la madera, había un gran armario en la pared al lado de la puerta, la cama parecía cómoda y tenía un borde de madera al rededor de esta, del otro lado había una pequeña mesa de madera, no tenía baño y era un poquito pequeña pero muy cómoda. Sin olvidar que detrás de la cama habían cortinas de color gris.

Al entrar se percató que el piso era de alfombra, sintiendo la suavidad en sus pies camino en dirección al armario encontrándose una toalla blanca y una pijama.

Se quitó su ropa y se colocó la pijama, era de tela ligera pero suave y cómoda, caminó hacia las cortinas y las abrió un poco, logrando notar la playa oscura, se podía escuchar el sonido de las olas por lo lejos, esto alivio al ex tritón, sintiendo su hogar cerca a pesar que ahora no era parte de ella, pero sabia que esto no tomaría mucho.

HY: no te preocupes Hitoshi, regresaré pronto, te lo prometo *dijo en voz baja con una sonrisa nostálgica*

Con ese pensamiento en mente se dirigió a la cama para acostarse, al hacerlo se sorprendió lo cómoda que era, podría acostumbrarse a eso durante el tiempo que este. Se acomodó entre las sábanas y cerró los ojos, cayendo por fin en un sueño profundo.

Mientras que el ojis verde se quedaba dormido, Aizawa se quedo mirando la ventana, teniendo como objeto de vista la playa, tratando de entender cómo llegó ese misterioso hombre a su morada. No veía un bote ni pedazos de uno, así que no era posible que sea un náufrago, pero aún así descarto también la idea de que camino por la carretera, si no hubiera tocado la puerta principal y no la de la playa.

Esto llenaba de dudas e incógnitas al ojis negro y eso que ya estaba lidiando con mucho.

Cansado, decidió acostarse a dormir y dejar de pensar en eso, total tenia un asunto muy importante que lidiar y no podía perder el tiempo enfocándose en el extraño.

A la mañana siguiente Hizashi despertó por unos sonidos que venían de la cocina, se levantó y estiró un poco sus brazos mientras que un bostezo escapaba de su boca. Se paró disgustado por el ruido, pero no negaba que durmió toda la noche como un bebé.

HY: buenos días *dijo mientras salía de su cuarto tallando uno de sus ojos con la mano*

Se fijó desde lejos que la niña estaba desayunando en el comedor, se acercó al lugar mirando a la pequeña comer.

HY: vaya si que madrugan aquí *comenta un poco sorprendido*

SA: mi trabajo comienza temprano y Eri tiene que estudiar *dice desde la cocina mientras lavaba los platos*

Hizashi volteó en dirección a la voz y vio a Aizawa ya vestido. Llevaba un traje negro con corbata y el cabello para atrás amarrado en una cola, se veía bien a los ojos del rubio.

HY: la pequeña no tiene que ir a la escuela *dijo mientras señalaba a la menor*

SA: Eri estudia en casa, así que tendrás que estar pendiente de su educación *dijo mientras agitaba sus manos y se las secaba con una toalla* también asegúrate de preparar el almuerzo, todo esta en la nevera *señala el electrodoméstico mientras veía con indiferencia al rubio*

HY: E-espera ¿no lo harás tú? *pregunta sorprendido por la petición del contrario*

SA: mi horario finaliza a las 5 de la tarde, así que suelo regresar tarde *explica mientras revisaba su teléfono* bueno ya debo irme *se dirige a la mesa para despedirse de Eri* adiós Eri, pórtate bien *le da un beso en la frente*

EA: adiós papi *sonríe con ternura*

Aizawa se alejó de ella y le lanza a Yamada una mirada amenazante.

SA: si me llego a enterar que le pasó algo, lo pagarás bien caro *dijo con voz muy grave y se dirige a la puerta principal*

El rubio se quedó callado y tragó saliva, no se imaginaba que ese humano daba tanto miedo, al escuchar la puerta cerrarse pudo respirar tranquilo, vio a la pequeña y se acercó.

HY: hola pequeña *se sienta en la mesa* no te preocupes por ese gruñón, tu y yo nos vamos a divertir mucho *le regala una linda sonrisa*

La pequeña desvía la mirada con desconfianza y el rubio se decepciona 'esto va ha ser más difícil de lo que creí' pensaba el mayor desviando la mirada.

A Hizashi le esperaba un día muy complicado, pero... no era el único que tendría que lidiar con problemas. En la empresa se encontraba Aizawa sentado en su oficina, revisando unos documentos; el silencio era lo único que reinaba en esa habitación, no fue hasta que su asistente tocó la puerta.

SA: pase *dijo sin importarle quien era*

YT: Eh Aizawa... ¿tienes un momento? *dice asomado en la puerta*

SA: ¿es importante Yagi? *pregunto mientras levantaba la cabeza, causando un escalofrío en el mayor*

YT: es que.... él llegó *señala por fuera de la puerta*

SA: ¿quién llego? *levanta una ceja con duda*

#×: oh vamos jovencito, deberías estar feliz por verme *dice con una sonrisa ladeada*

La voz se escucho desde el pasillo hasta la oficina del peli negro, alarmándolo causando que se parara con un pequeño temblor mientras que un adulto mayor con traje negro y el cabello corto y negro con algunas rayas blancas por los lados se adentraba en la habitación.

#×: hola Shota, cuánto tiempo no? *pregunta con una sonrisa*

~continuara~