Pasaron dos días... Natalia seguía evitándome, aún mejor ¿Cierto? Yo soy la que debería estar haciendo eso.
Después de todo, fui yo quién perdió la memoria, descubrí que estoy casada con alguien que nunca soporté, tengo un hijo que engendré y que no recuerdo, estoy en una casa extraña, todas las personas que conocía están casadas y completamente diferentes.
¿Por qué no se pone en mi lugar al menos un poco? ¿Por qué la gente no puede entender que tengo miedo de esto? Estoy viviendo mi vida como si se tratara de otra persona.
Soy una adolescente que ya no es una adolescente.
Lo único bueno de todo esto, sin duda es Santi, este pequeño es increíble. Él es tan inteligente, atractivo, un amor de niño. Un hijo ejemplar, nunca responde y siempre obedece cuando se le dice hacer algo. Por no mencionar que nos hemos divertido lo suficiente. Cuando regresa de la escuela me pego a él como si mi vida dependiera de eso, sólo con él me siento cómoda en esta casa.
Natalia solo nos mira desde la distancia, siento sus ojos, veo sus sonrisas. Incluso sin querer demostrar que es evidente lo feliz que la hace vernos interactuar a Santi y a mí. Creo que a ella le gusta, la única vez que la veo sonreír son aquellas horas o cuando está con Santi.
Incluso sin darse cuenta de que la he estado observando también. Ella se ve cansada, sus ojeras antes invisibles, ahora son claramente visibles, bolsas enormes y oscuras bajo sus ojos. Natalia, exhausta, yo diría que no ha dormido bien por la noche. Pero no tengo ni idea de si esto es mi culpa o toda esta situación o los dos motivos combinados.
A veces pienso que sería mejor para ella que vaya a quedarme con mis padres sólo una vez, la próxima semana voy a hacer pruebas para averiguar que me ha ocurrido y si hay alguna solución. ¿Pero si no la hay? ¿Cómo vamos a vivir así?
Ella parece estar sufriendo mientras continúo odiándola internamente, sólo que un poco menos. No puedo despertar otros sentimientos por ella.
Nadie puede vivir así por mucho tiempo, creo que en algún momento ella se cansará de mi frialdad y se irá, ¿Y si ella decide quedarse con Santi? No podría soportar vivir sin él, no más, he aprendido a amar a este niño.
Mi hijo.
Mío.
Rezo todos los días que si decide dejarme, que me deje por lo menos con él.
Es tan confuso y extraño pensar en ello, un niño, tengo un hijo, yo estoy casada, con ella, la persona que odiaba hace mucho tiempo. ¿Es una especie de broma de la vida? Broma muy sosa.
-¡Mami!
Vuelvo a la realidad cuando oigo la llamada de Santi y tirando frenéticamente de la enorme camisa blanca de Chicago Bulls de baloncesto que traigo, Natalia también lleva una color negra, así como Santi que también está utilizando una negra. Natalia me dijo que era una especie de ritual que solemos hacer los días de partido, me contó que Damion envició a Santi con el baloncesto, y desde entonces intenta hacer que nos guste. Ahora entiendo por qué tiene varias cosas de los Bulls de Chicago aquí esparcidas por toda la casa. En serio, el cuarto de Santi, tiene varios accesorios de los Bulls, como él los llama. Sin contar las muchas camisetas dispersas alrededor.
- Hola, San. Me distraje un poco aquí. - Sonrío torpemente por él y acaricio su cabello. Sus ojos grises son más brillantes ahora. - ¿El partido comenzó?
- Todavía no. - Él responde entusiasmado, rebotando me tira de la mano hacia el sofá. Santi se pone hiperactivo con los juegos de los Bulls, anoto mentalmente. - Mamá fue a buscar nuestros nachos.
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Stupid Wife - Albalia adaptación
Fanfiction¿Te has imaginado casada con alguien que nunca soportaste en la vida? Alba también nunca lo había imaginado, si no todo lo contrario. Se suponía que iba a ser solo una mañana normal, Alba despertaría, desayunaría con su familia, iría al colegio y ga...