THE BABYSITTER CLICHE -Sunghoon enhypen

CAPITULO UNO

Bye Karaoke

—¡Todo el mundo callados, ya viene la mejor parte! —Lea Moon pronunció lo suficientemente alto como para que su familia la cual se encontraba conversando animadamente en el comedor se callaran.

La hija mayor de los Moon, Lea se encontraba restregada comodante por todo su sillón de la sala el cual quedaba frente del televisor, en este se proyectaba un video versión karaoke de la canción You belong with me de taylor swift.

—¡Oh, I remember you driving to my house, In the middle of the night! —Lea canto con mucha pasión cada una de las palabras mostradas en el televisor.

—Ya van tres veces en el día mamá —Hana la hermana menor de Lea hablo desde su asiento y pasó a colocar su cabeza entre sus manos con un notable sentimiento de fastidio.

Y es que si, ya había ocurrido la misma situación tres veces en el día, más bien como unas veinte en toda la semana. Lea haciendo karaoke de dos horas o mas se había vuelto el pan de todos los días para la familia Moon.

La familia Moon estaba conformada por el señor Moon Kwan, un hombre coreano de unos cuarenta y seis años, el cual era jefe de un taller mecánico, el señor Kwan era alto y de una tes apiñonada, era un hombre muy carismático y bueno. Su esposa la señora Lily Moon, tenía cuarenta y cínico, ella era canadiense, había conocido al señor Moon en un viaje que ella hizo a Corea a sus veinte. Lily era una mujer muy guapa, de pelo largo y pelirrojo con ojos café claro, de complexión delgada, piel blanca y era de una estatura promedio. Era una señora muy dulce y comprensiva, aunque no le gustaba que sus hijas fueran holgazanas.
La hija mayor de los Moon, Lea tenía dieciocho años, era una bonita chica de un pelo pelirrojo oscuro y largo hasta el pecho, sus ojos eran más rasgados que los de su madre pero se podía notar que no era del todo coreana, su cara era adornada por pecas y sus ojos también eran de un café claro, su complexión era delgada y su estatura era de un metro con sesenta y ocho. Lea tenía una personalidad audaz, era respetuosa claro está, pero cuando la ofendían no dudaba en defenderse, era algo sentimental y bastante soñadora, nunca fue penosa para hacer amistades, pero si para entablar conversación con los chicos que le gustaban.
Por último la menor de la familia, Hana Moon, era una dulce chica de trece años, bastante trabajadora y toda una cerebrito, era muy dedicada y apasionada, aveces hasta más madura que Lea. Su pelo era corto hasta los hombros y sus ojos eran los más grandes de las dos hermanas pero eran oscuros como los de su padre, además de que ella también tenía el pelo negro y no pelirrojo como su madre y hermana.

—Ya se Hana —Su mamá sobo suavemente la cabeza de su hija menor— Kwan de verdad que tenemos que buscarle una trabajo o algo que hacer a Lea. Aquí en casa no hace nada mas que cantar y dormir y ver películas, no hace nada de provecho y todavía faltan dos meses para que entre a la escuela.

—¡I'm the one who makes you laugh
When you know you're 'bout to cry! —Lea cantaba con un falso dolor la canción.

—Si... —El señor Kwan vio a su hija mayor que bailaba de una forma bastante cómica la canción de la cantante rubia— Voy a ver si alguno de mis clientes tiene un trabajo por ahí.

—Deberías...

Hace medio mes aproximadamente que Lea había terminado la mitad de su último año el la preparatoria y desde que sus estudios terminaron ella no hacía más que holgazanear a diferencia de Hana que era una niña exploradora, su mamá que trabaja y también su papá. El horario de Lea se basaba en levantarse a las doce del día, comer, hacer un maratón de películas o series, cantar, pero no de una manera profesional si no claramente más a broma, dormir a las tres de la madrugada, y de vez en cuando salía con su grupo de amigos.