The diary of Adrien Agreste 《A.A y tú》©

3. Torpeza.

Pov ____________:

—En sí... —inicio—, el trabajo será fácil, digo, Marinette, tú y yo seremos un gran equipo —desafortunadamente Evie quedo en el equipo de Chloe y Sabrina. Aunque mi amiga y la hija del alcalde parecían simpatizar—. ¿Te has preguntado quiénes están bajo la máscara?

Mire al cielo igual como Alya lo hacía. Míster Bug pasaba por los aires columpiándose con ayuda de su yo-yo. Me encogí de hombros con indiferencia.

—Me da igu...¡hey! —me quejé cuando sentí un golpe en mi cabeza, uno con algo metálico.

Me sobe dicha parte para mirar al suelo, el bastón de Lady Noire.

Abrí mis ojos sorprendida, Alya ahogo un chillido, tome el bastón del suelo y lo analice.

—Debería tener más cuidado —gruñí sin dejar de masajear la parte golpeada de mi cabeza—, ¿y ahora?

—Sosténlo —la morena sacó su celular—, le tomaré un par de fotos.

Hice caso a su orden, claramente yo no salía en esa foto.

Después de un par de fotos, ambas intentamos analizar el arma, Alya presiono el botón que tenía la huella de gato y se desplegó la mini-pantalla.

—Manual —señaló el icono. Yo analice el menú que traía el bastón.

—Características, súper poderes, cataclismo —leí aquel menú en voz alta—, mira, dice que el miraculous mejora las habilidades físicas.

—Es obvio niña —la mire—, te hace ágil y... —se quedó callada, alce una ceja.

—¿Cómo sabes? —inquirí para dejar de husmear en el menú del bastón y ver el contacto de Míster Bug—. Vamos a llamarlo.

—¡Si, hagamos eso! —soltó con una risa nerviosa.

Negué burlona, presione el contacto del héroe rubio e inmediatamente conecto la llamada. El héroe al verme abrió sus ojos sorprendido.

—¡Hey, Míster Bug! —saludó Alya con ilusión—, no puedo creer que este en la línea directa contigo.

—Alya —reproche y ella sonrió avergonzada—, lo sentimos, pero a tu compañera se le cayó esto por correr por los techos —reclamé un poco indignada.

—Lo dice porque le cayó el bastón en la cabeza —aclaró mi acompañante y la mire mal—, eh, ¿Lady Noire está contigo?

—No, está en su área de patrullaje, ahora veo porque se fue casi corriendo —negó con desaprobación—, ya tengo su ubicación, no se muevan de...

Mire el reflejo de la pantalla, antes de que aquel chico nos quitará el bastón empuje a Alya y ambas caímos al suelo. Busque a tientas el arma y la vi a unos pasos de mi.

Aquel akumizado miro lo mismo que yo, nos miramos y corrí por el bastón aunque él también voló por el arma. La tome antes que él y me enderece con una sonrisa.

—¿Lo quieres? —meneé el bastón—. Ven por el.

Extendí un poco más aquel bastón, el akumizado sonrió.

—Oh, gatita —ronroneó y yo rodé los ojos.

Corrió a mi dispuesto a atacarme con su rara katana, persuadí su ataque y contraataqué.

Iniciamos una batalla que me daba la ventaja y todo gracias a mis clases de esgrima.

Como aquí no había reglas tome mi propio turno y cuando intento esquivar mi ataque, le propine una patada en el abdomen haciéndolo caer de espalda. Reduje el bastón y sonreí.