𝘖𝘊𝘌𝘈𝘕. 𝘌𝘳𝘶𝘳𝘪.

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Y ahí estaba Erwin quien al no verlo por tanto tiempo se empezaba desilusionarse talvez ya no verlo, pero, el agua empezaba a moverse en aquel manantial y como estaba esperando hace tiempo ahí salió, de nuevo aquel tritón de ojos azules y cabello azabache.

—¡Hola! — Saludo Erwin con la mano y se acercó más al agua.

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—Conde Zeke, la hora de partida se programó para las 8:30 de la noche, lo anunció el Duque — Explicaba un mayordomo mientras Zeke caminaba hacia su oficina rodeado de más servidumbre.

—¿Qué?, Dile que ya habíamos hablado del tema de los horarios así que no. — Contestó caminando más deprisa para llegar más rápido a su oficina.

—Señor Zeke, las mucamas preguntan si su habitación quiere que las sábanas sean blancas u otro color. — Dijo una sirvienta que mostraba una muestra de la sábana blanca y otros colores.

—Que sea azul rey y que todas las mañanas las cambien por unas limpias. — Contestó el rubio.

—Mi señor, necesito que firme unos documentos sobre... — Fue interrumpido.

—Toda la información en documentos puede dársela a Colt, bueno con su permiso. — Cerro la puerta en la cara a todas las personas que aun tenían preguntas para él.

—¡Dios!, Que fastidio. — Fastidiado se dejó caer en su silla.

Con molestia veía toda la papelería que descansaba sobre una parte de su escritorio, sobre proyectos futuros, financiamientos y sobre todo un viaje muy importante.

Su tierra aún era joven y necesitaba crecer, necesitaba socios comerciales influyentes para que su tierra y el Reyno crecieran exponencialmente.

Y solo se llevaría a cabo si el representante del Reyno fuera, conociendo en persona a esos socios, presidentes, etc... Para crear lazos comerciales con las demás naciones y necesariamente tenía que ir el, Erwin era joven y eh inexperto. Podría echarlo todo a perder con tan solo una palabra, no podría estropearlo.

Y Zeke era la persona más cercana a la corona, si tan solo Erwin no existiera el Reyno seria suyo.

Toc... Toc...

Levanto su mirada y volvió a retomar la compostura.

—Adelante. — Anunció Zeke.

—Conde Zeke, se le solicito en el comedor principal, la cena que solicito con el joven amo ya está lista. — Era Colt detrás de la puerta.

—Si está bien, en un momento iré. — Se levantó de su lugar.

—Me retiro. — Este quiso cerrar la puerta, pero.

—Espera Colt, tengo una tarea que asignarte. —Zeke lo miraba fijamente.

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—Joven amo, no es usual que llegue tan tarde. — El mayordomo le ayudaba a quitar el saco.

—Oh bueno disculpe los inconvenientes, es solo que la clase se tuvo que alargar. — Mintió.

—De todas maneras, el Conde Zeke lo espera en el comedor, tiene un tema importante por hablarle. — El mayordomo acompaño a Erwin hacia el lugar.

Al llegar Zeke ya estaba sentado esperándolo, la relación entre Erwin y Zeke al principio fue algo extraña al pasar los años Erwin se sentía mejor con la compañía de Zeke, solía contarle cosas de su vida, preguntarle también, le gustaba su forma de pensar en ciertas cosas y era como un padre para él.