💢Crazy💢(2won)

💢Capítulo 10💢

Capítulo 10

Todo fue en vano porque su primogénito se encerró en su habitación impidiendo el paso a quien sea, prefirió eso antes de ver esos ojos que seguramente expresarían algún tipo de emoción. Lo que más aniquiló a los dos fue oír los llantos desgarradores de su cachorrito en brazos de uno de sus abuelos lanzando patadas al aire violentamente tratando de liberarse de ese agarre e ir con sus padres usando sus manos para desenvolver el nudo de esos dedos que se esforzaban por mantener la presión en el abdomen.

Hyungwon sufrió una lesión psíquica que sanaría el día que pudiera desprenderse de esa vida, quería dar la vuelta quedarse en su casa con sus dos hijos, quería divertirse con Minhyuk jugando a cualquier cosa que su bebé eligiera, ver sus películas favoritas, comer sus postres favoritos, quería ayudar a vestirlo aunque él le dijera que pude hacerlo solo porque es un niño grande, quería estar a su lado cuando este se durmiera y al despertar, quería ser ese padre que estuviera en todo sentido. Quería discutir con Jooheon con tal de solo estar en la misma habitación, quería observarlo detalladamente para descubrir sus gestos, sus sonrisas, quería poder conversar o que lo busque cuando necesitara un consejo. Quería entrometerse en su vida. Quería desvivirse por y para sus hijos.

Pequeñas gotas se posaron en las esquinas de sus ojos, su vista se plantó en la ventanilla del coche no deseaba la pena de los tres individuos restantes tampoco ser la victima tan solo apetecía estar con la dos luces de sus ojos. Nada obtenía con llorar pero haciendo eso disminuía un poco ese vacío esa locura que lo hostigaba para su desgracia prefería recibir todo castigo insultándose a si mismo. El alfa que conducía con un opresión en su pecho por la abundante recarga de reacciones del omega, esas reacciones emocionales que le atravesaba desde el lazo para colarse en su piel, su mano se apoyo encima de la contraria, Hyungwon cambio las posiciones y entrelazó estas acomodándolas en su muslo calmando las quietudes, ideas negativas que los debilitaban, acogiendo todo el buen afecto que ambos anhelaban.

Los Son no pronunciaban ningún ruido al contemplar la cálida imágen que estimulaba todas sus emociones. El moreno fue quien presenció todo el desastre de palabras que abiertamente en solitario le contó todo a su omega con lujo de detalle, el más bajo estaba preocupado por su hermano tanto como el omega de éste pero tampoco sabia como ayudarlos más que por ese momento mantener el silencio luego se fijaría que hacer.

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(Me quedó bonita ¿Verdad?❣️😍)

Minhyuk educadamente avisó que iría al bosque y que no se adentraría mucho en el para no preocupar a sus abuelos, sin oír la advertencia de los mayores se dirigió hasta el bosque como si estuviera participando en una maratón, lo que nadie sabia era que se encontraría con su mejor amigo ese niño de cabello negro con apenas unas ondas en esas hebras con una sonrisa de ensueño y unos hoyuelos que le gustaba picar todo el tiempo. No lo diría en voz alta pero ese niño le daba calma sobre todo cuando sus dos manos se contactaban en una caricia.

–MINNIE.

Esa voz atrayente le dio un subidón de adrenalina transportando su cuerpo en una corrida donde se tropezó con sus pies por la necesidad de aprisionarse en los bracitos ajenos, los dos emprendieron la carrera hacia el otro con las sonrisas dibujadas en sus rostros brillantes pintados con un leve sonrojo, cuando sus cuerpecitos colisionaron entre si, el de hebras castañas terminó debajo siendo encarcelado por el pelinegro, sus ojos fueron como imanes que se encontraron con la intensidad infantil sin pensar en nada más que la felicidad que golpeteaba en sus pechitos. Sus mundos eran de todos los colores vivos con mariposas rodeando las praderas llenas de todas las flores existentes con las aves y las melodías provenientes de su órgano especial la siringe, el fenómeno óptico multicolor decoraba el cielo con las nubes como compañeras. Sus ojos seguían estrellados con las galaxias, tan bonito para su mundo de infantes. Todo en ellos les era cómodo como si estuvieran hechos el uno para el otro.
La voz del menor los trajo a la realidad por lo que se levantaron para corretear, esconderse detrás de los árboles, buscar florcitas que emanaban deliciosos aromas porque ellos descubrieron un sitio oculto donde florecían unas margaritas y otras que no tenían conocimiento.
Sus mundos pertenecían el uno al otro.

Pero había un problemas más grande. Un problema que pronto atravesarían...