10.Nada será como antes

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Gavi

Mañana jugamos contra Suecia y no podía estar más nervioso. 

¿Podría afectar que llevaba sin hablar con Pedro desde hace tres días? Si.

Desde la conversación en el patio no había podido hablar con él, tampoco sabía si quería hacerlo, no sabía muy bien qué decir, pero él tampoco tenía muchas ganas de hablar.

Al día siguiente de la discusión, tenemos entrenamiento normal, es decir el horario de siempre para todos.

A la hora del desayuno Pedro se sentó en una mesa de cuatro con Ferran, Ansu y Unai, en ningún momento me dirigió la mirada y mucho menos la palabra.

El entrenamiento fue una mierda, nos habían puesto juntos por que solíamos tener una buena conexión en el campo, pero ese día esa conexión brilló por su ausencia, fallábamos pases simples, no nos comunicamos e incluso nos chocamos entre nosotros. Por supuesto Luis Enrique nos regañó un millón de veces, y después de la charla final Pedro se fue sin siquiera despedirse.

No localice a Pedro hasta la hora de la comida, lo había buscado en todas partes pero no lo encontré, después le vi en el comedor y cuando me iba a acercar a el Ansu y Ferran bloquearon mi paso mientras sentía una mano familiar en mi cintura.

Era Dani, por supuesto me pidió que comiera con él, y yo no me podía negar a algo que me pidiera con esa carita.

En el descanso de antes del entrenamiento de la tarde me fui con Dani, ya que no tenía nada que hacer y sabía que no encontraría a Pedro.

El entrenamiento de la tarde fue tan mal como el de la mañana, no había comunicación, y no solo con Pedro, sino que en el equipo se notaba tensión, obviamente Luis Enrique nos volvió a regañar.

Esa fue básicamente la rutina de los últimos días, ni una palabra con Pedro.

Ahora estaba en la cama sin poder dormir.

–Gavi tío, se te escucha pensar–dijo Eric medio dormido.

–Es que estoy muy nervioso y los últimos entrenamientos han sido raros, ¿me entiendes?

–Si, pero siguen siendo la una de la mañana–espero a que dijera algo, pero yo me quedé callado–Es verdad que el equipo no parecía muy unido en los últimos entrenamientos.

–¿Por qué crees que sea?

–A ver, es que hay mucha tensión sabes, desde que Pedro y tú estáis de mal rollo parece que todo el equipo está igual, es que erais como la pareja de oro.

–Pedro y yo no tenemos mal rollo–dije excusándome de algo que sabia que era verdad.

–Claro, se ha notado en las grandes conversaciones que tenéis y en el buen humor de los dos–dijo sarcásticamente.

–Tu sabes si yo he hablado con él en otros momentos–intente defenderme.

–Venga ya Gavi, no hay que ser tonto para ver que ahora pasas mucho más tiempo con tu nuevo amigo, ese del staff.

–Dani–respondí.

–Si, ese, estabas con él cuando Pedri estaba mal–al decir eso me sentí un poco culpable.

–Pero si después intente hablar con él y se negó–note como ya me estaba poniendo a la defensiva.

–Pues deberías haber insistido, por que eso es lo que hacías tú, porque eres su mejor amigo.

–Puedo tener otros amigos a parte de Pedro y que además también me necesiten.

Si claro, que te necesiten con la lengua en su boca, ¿no?, dijo mi conciencia, como la odiaba a veces.

Que pasaría si...-Pedri y GaviDonde viven las historias. Descúbrelo ahora