Tiroteo (1)

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Álvaro Morata

Primer partido de la jornada 23-24, contra el Granada.
En el 11 titular estabamos: delanteros; yo y Antoine, centrocampistas; De Paul, Koke y Llorente, defensas; Javi Galán, Hermoso, Giménez, Savic y Nahuel Molina.

No me extrañaba que João comenzara a chupar banquillo, después de todas las indirectas que le a lanzado al Cholo y al equipo se merece chupar banquillo.

Me preocupe también por Pablo, la temporada pasada tuvo un buen rendimiento y en los últimos partidos estuvo siendo titular.
Quedaban 15 minutos para que comenzará el partido, yo me acerque a Llorente y a Pablo que estaban hablando. Me coloque al lado de Pablo y salude.

- Vaya, veo que nadie se puede resistir a ti Marcos, incluso atraes al menor del equipo - Dije y Llorente sonrió, él que no sonrió fue Pablo,

- ¿Que-que? ¿Yo atraído por Llorente? No-no - Respondió nervioso, yo solo me mordi el labio inferior ante su nerviosismo

- Yo también te quiero Pablo - Respondió Marcos robándole una sonrisa a Pablo, que desagradable.

Yo carraspee mi garganta y Pablo fue el primero en fijarse, yo le mire y él me sonrió, yo solo pude devolverle el gesto.

Tenía ganas de cojerle de la mano y de hacerle gemir mi nombre una y otra vez...

- Bueno, ¿cuanto queda para que empiece el partido?

- 10 min, ¿hacemos algo? - Pregunta Pablo animado.

- ¿En 10 minutos? No nos va a dar tiempo a nada - Responde Llorente y Pablo agacha su cabeza triste.

- Yo si que quiero hacer algo - Le digo mirando a Pablo y este sonrie.

No sabíamos el tiempo que quedará para que empezara el partido, pero yo quería aprovecharlo con Pablo.
Él me agarro de la mano y nos metimos en los vestuarios.

- ¿Que hacemos aquí Pablo? - Me río y le miro.

- Quería estar contigo...a solas... - Me dice tiernamente y yo sonrió.

Yo me acerco a él y tocó su mejilla cálidamente, él cierra los ojos y disfruta de mi roce.

- Eres muy tierno Pablo Barrios - Le digo observando cada facción de su cara y confirmaba que era precioso.

Él abrió los ojos y me miro, comenzamos a acercar nuestras caras hasta estar a centímetros de que nuestros labios se uniesen.

Yo acorte distancias lo que pude y estuve más cerca de los labios de Pablo, yo oía su respiración y estaba entrecortada.

Oímos voces afuera del vestuario y nos separamos rápidamente.

- Ya van a empezar - Decimos los dos a la vez y al darnos cuenta reimos.

Ambos salimos del vestuario y yo me pongo detrás de los jugadores del equipo, le coji la mano al niño a mi lado y salimos al campo

Ambos salimos del vestuario y yo me pongo detrás de los jugadores del equipo, le coji la mano al niño a mi lado y salimos al campo

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Pablo Barrios

Ya había empezado el partido, habíamos empezado demasiado fuerte intentando llegar a la portería del equipo contrario, lo cuál fue posible porque con un pase de Griezmann hacia adelante del medio campo Morata corrió detrás del balón controlando los y cuando estuvo mano a mano con el portero le metió el balón entre las piernas y este entró en la porteria.

El público estallo gritando "Gooooool", el banquillo igual. Nos habíamos conseguido adelantar en el minuto 44 antes del descanso.

Cuando el árbitro pito el final de la primera parte, nos metimos en los vestuarios.

Yo me senté al lado de Morata y apoye mi cabeza en su hombro y suspire sin prestar mucha atención a lo que decía Simeone.

- Gracias - Le susurro cerrando mis ojos.

- ¿Gracias por que? - Dice este también susurrando y mirando al suelo.

- Por darnos de momento los 3 puntos - Le respondo susurrando y él asiente.

- Te dedicaré uno la próxima vez que marque - Me dice y yo ríe

- Eres lo mejor Morata - Le digo y noto como sus mejillas toman un color rojo.

El segundo tiempo comienza y yo no puedo despegar mis ojos de Morata, por alguna razón siempre que se acercaba a beber agua me quedaba mirándole los labios

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El segundo tiempo comienza y yo no puedo despegar mis ojos de Morata, por alguna razón siempre que se acercaba a beber agua me quedaba mirándole los labios.

- Pablo, ¿ocurre algo? - Me pregunta Nahuel y yo niego.

Él no me pregunta más y yo sigo prestando mi atención a Morata.

40 minutos después el partido finalizó con un 1-0 para el Atlético de Madrid, nos pusimos los primeros en la tabla por delante del Madrid y de las Palmas.

Cuando entramos todos al vestuario comenzamos a celebrar, no era una victoria que nos hubiese gustado con el 1-0 pero eran 3 puntos muy importantes para coronar nos líderes de momento.

Los que se la estaban pasando en grande eran Antoine, Llorente, De Paul y Savic.

Me fijé también en que João estaba recostado en la pared mirando su móvil, a su lado estaba Nahuel.

Mi vista se dirigió a una persona en particular: Morata. Estaba apoyado en la pared junto a Javi Galán. Su vista se encontró con la mia y yo la desvíe rápidamente.

Que calor hacia de repente, ¿verdad?

Que calor hacia de repente, ¿verdad?

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