Siento la tardanza y haberlos tenido abandonados, espero que este capítulo sea suficiente para compensarlo.
Stolas comenzó a prepararse para la cita con Dantalion en Ozzie's. Primero con un baño relajante donde se esforzó en usar champús con afrodisiacos y le echó pétalos al agua, esta mezcla podía hacer que para cualquiera que pasara por su lado se le hiciera irresistible el príncipe. Posteriormente, se vistió con sus mejores prendas y para rematar, aparte del maquillaje también se echó un perfume con aroma a gardenias.
Acompañado de su mayordomo personal bajó hasta el vestíbulo, donde frente a las puertas del palacio le esperaba su cita en un lujoso coche negro. Las plumas negras se asomaron por la puerta del conductor y Dantalion se asomó, vestido elegantemente.
—Buenas noches Stolas —saludó con su usual tono armonioso. Sus ojos turquesas analizaron las despampanantes vestiduras del búho real—. Déjame decirte que te ves muy bello.
Las mejillas de Stolas se tiñeron de un adorable tono rosado, y abanicándose con su mano apartó la mirada cohibido.
—Bueno… gracias por el halago… Dantalion —lo miró fugazmente—. También te ves bien.
El de plumaje negro sonrió y se acercó a la puerta del copiloto, se la abrió con eduación y lo invitó a entrar. Al sentarse, Stolas sintió el terciopelo rojo del mullido asiento, bastante cómodo en comparación con la furgoneta de Blitzø. La puerta del lado izquierdo se cerró y Dantalion puso en marcha el vehículo, al instante una suave sonata comenzó a sonar. Stolas analizó el interior del coche, descubriendo un ambientador que emanaba un agradable aroma a pino.
Después de un cómodo y rápido trayecto aparcaron en el estacionamiento privado del establecimiento de Ozzie's. Como anteriormente, antes de que Stolas pudiera poner un pie fuera del coche Dantalion ya estaba en su puerta sosteniéndola. Se bajó y después de que el coche se cerrara Dantalion le ofreció su brazo para que los entrelazaran, el príncipe Goetia lo aceptó con gusto y caminaron con gracia hasta la larga fila de imps y demonios que esperaban para poder ingresar. Obviamente se saltaron la cola y pasaron junto a los demonios con aires de superioridad. En la entrada un imp fornido de pelo blanco los detuvo.
—¿Tienen reserva? Deberán esperar a la cola —dijo con sequedad y mirando mal a Stolas.
—¿Perdone? ¿No sabe quién soy? —preguntó irónicamente el príncipe goetia claramente ofendido.
—Si, y la última vez que estuvo aquí, príncipe…
—Disculpe a mi acompañante pero independientemente de como fuera su comportamiento la última vez que estuvo aquí —intervino Dantalion—. Nosotros hemos pagado una reserva en primera clase, y se nos tratará como se deba. —Afiló su mirada y añadió amenazador—: A no ser que quiera que le hable a su jefe sobre su poco profesionalismo.
El imp se quedó pétreo y su cola se estiró ante la amenaza, resopló y dijo con desgana.
—Permítanme disculparme… pueden pasar, disfruten de la velada.
Ambos lo miraron con desdén y entraron juntos en el restaurante. Una camarera los guió hasta una mesa bastante apartada de las demás, estaba en una esquina y tenía una cortina que los separaba del resto de demonios. Por el camino, muchos se giraban para mirar a la inusual pareja, aunque toda la atención se la llevaba Stolas, no solo por su presencia en el lugar, sino también por su seductor y cautivador aroma.
—Vayan acomodándose señores, en unos minutos un compañero vendrá para apuntar sus comandas —dijo con un acento ligón.
Ambos se sentaron y Stolas leyó la carta mientras pensaba en qué pedir. Sintió las plumas negras de Dantalion rozar las suyas cuando este se movió para acercarse más.
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BLUE FEATHERS <●> STOLITZ
Fiksi PenggemarDespués del último ataque de Striker, Stolas quedó hospitalizado y poco a poco sus sentimientos hacia Blitzø se van marchitando a la par que su alma. Atraviesa un periodo de depresión y cuando cree que está todo perdido, encuentra en su biblioteca u...