Girasol ; Muichiro Tokito

Capitulo 9; "Chico nuevo"

Tiempo después.

—¡Señor Iguro! ¡Ya volvi!

—¿Estas herida?

—¡Nop! Descubrí que tengo un gran sentido de intuición. No me hizo ni un rasguño.

—Que bien..

Después de aquella misión contra un demonios de rango inferior, volvi a la finca, pero... Me acordé de algo.

—Eso si... Cuando estaba yendo un chico se me cruzó corriendo y me tumbó. Me caí y me hice un pequeño rasguño. Era medio raro...

—¿Por que?

—Porque me pidió casamiento... —Estalló de risa.

—Ve a la enfermería... Esta Kocho, dile que te cure ese raspon.

—Si.

Me di la vuelta y sali para ir a enfermería de la chica. La verdad es que la admiraba mucho... Después de la muerte de Kanae ella se convirtió en la pilar. Era muy fuerte.

Mientras me dirigía vi al señor Uzui caminar con Makio y Suma, dos de sus esposas.

—¡Aiko! —Saludó Makio.

—¡Makio! ¡Suma! —Las abrace.

—¿Como has estado? —Preguntó Uzui.

—Bien —Sonreí —Acabo de volver de una misión.

—Supongo que te fue bien ¿Estas herida?

—¡No! Solo tengo un pequeño raspon en la rodilla. Pero nada grave.

—Me alegro.

—¡Aiko-chan! ¡No sabes lo que me enteré!

—¿Que pasó? —Se acercó a mi odio y me susurró algo.

—Escuche que hoy vino un ch-

—¡Suma! ¡Maiko! ¡Tengen! ¡Miren esto! —Apareció Hinatsuru.

—¡Oh! Bueno, despues te cuento —Me guiño el ojo.

—¡Vamos Suma! —Gritó Makio.

—¡Ya voy! —Empezó a correr —¡Adios Aiko-chan!

—¡Adiós!

Y se fueron doblando la esquina.

Seguí mi camino y me puse a pensar en lo que había dicho Suma.

¿Quien vino hoy?

Bueno, le preguntaría a Shinobu, ella siempre sabe todo.

Como venía contando antes de este encuentro en los últimos años entro una nueva pilar, Mitsuri. Es una chica realmente amable, conectamos enseguida.

También tenía una respiración muy curiosa, la del amor. Me contó que era especialmente hecha para ella, ya que se usa mucho la flexibilidad. ¡Me encantó su técnica!

Llegando a la finca mariposa me encontré con dicha chica.

—¡Aiko! —Me saludó muy amablemente.

—¡Mitsuri!

—¿A donde te diriges?

—Yo voy a la finca de Shinobu ¿Y tú?

—¡Yo también! ¡Vamos juntas!

—Esta bien.

Y empezamos a caminar rumbo a dicha casa.

Mientras nos acercabamos la peligrosa me hablaba de su familia y gatos. Mayormente de lo segundo.

—Llegamos.