𝗳𝗶𝗻gir ── warren x layla

O1 : ¿qué está pasando?

layla estaba jugando con los dedos de warren, estaba nerviosa, y no sabía si eso se debía a que estaba jugando con la mano del chico del cual gustaba, o porque tendría un examen importante a la primera hora.

lo que sea que fuera, ya la tenía harta.

los dedos de warren eran más entretenidos que su alrededor, quizás era la suavidad que había, o el pequeño callo alrededor debajo de ellos. no lo sabía, solo le gustaba ese sentimiento de seguridad que había en eso.

— calma, hippie, no es para tanto.

ella sonrió bajito, quería ignorar el golpeteo de su corazón a base de ese apodo con el cual fingía que no le gustaba, pero a decir verdad, le parecía tierno.

ella suspiró, y se recargó en el hombro de su compañero mientras cerraba sus ojos. — lo siento. — soltó su mano, dándole paso al sentimiento de soledad que quiso cubrir limpiando la palma de las suyas en su falda de mezclilla. pero esa soledad no duró mucho, porque fue warren quien ahora la sujetó, entrelazando sus dedos en el proceso.

— está bien que te sientas así, lo que no entiendo es por qué recurres a mí cuando es obvio que no soy de ayuda.

mordió su labio con suavidad, sintiendo los dedos de warren limpiar su cabello de su mejilla. la respiración de layla se cortó, y suspiró con fuerza tratando de fingir que todo era mísera preocupación por el examen.

aún así, warren deslizó sus dedos por el borde de su pómulo, a veces layla creía que lo hacía porque la encontraba bonita, pero después veía a su alrededor y notaba a will a lo lejos sonriéndole, y es ahí, donde todo caía, porque warren estaba haciendo todo eso por su estúpida suplica semanas atrás.

« ayúdame a ponerlo celoso, y te juro que después, no volveré a molestarte »

y aunque algo dentro de ella decidía creer que no era así, que el pelinegro con mechas rojizas la encontraba atractiva, su realidad le golpeaba. warren lo estaba haciendo porque ella prometió irse después, no porque él la quisiera ahí.

aún así, los dedos de warren siguieron un trayecto hasta tener el mentón de layla entre sus dedos. este lo alzó, haciendo que con esto ella lo estuviera viendo, sus miradas rozándose sin siquiera decir demasiado.

warren después sonrió, soltó su mano y se alejó.

layla revisó y will ya no se encontraba a su alrededor.

y aunque los ojos de layla se llenaron de lágrimas, no quería dejar que estas rodaran.