Estado: En curso.
Inicio: 18/01/2023
Fin:
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Otto espera la muerte de Viserys Targaryen , buscando desesperadamente que coronen a Aegon II Targaryen , su nieto, el destino tiene otros planes y sus deseos se desmoronan, la confianza se trastorna y rom...
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—FLARES—
Anica observó al omega que dormía, solamente despertaba a medias cuando debía alimentar a los cachorros, solo se centraba en ellos antes de sumirse a un sueño, estuvo así por diez noches, los cachorros eran silenciosos y adoraban a Arlys. No era correcto que una pequeña alfa se acercara tanto a los cachorros recién nacidos de un omega que no despertaba y además era un príncipe, pero no sabía qué más hacer, así que se dijo a sí misma; los tres son solo cachorros.
Pasaron quince lunas hasta que el omega despertó, sobresaltado, abriendo los ojos y levantando el cuerpo, el dolor no lo había golpeado tan fuerte desde hace tiempo, gruño bajo por los nuevos aromas, dulces y eran dos pequeños.
Su mirada chocó contra Anica quien tenía en sus manos un cuenco con agua, rápidamente ella se acercó a darle de beber el agua.
—Mis cachorros, ¿Dónde están mis cachorros?
—Están con Arlys, aquí al lado, los traeré para ti
—Anica, ¿Cuánto tiempo pasó?
—Este es el día quince
Aegon trago saliva, observando a su alrededor, viendo de lejos lo que había preparado para sus cachorros desde que habían llegado a aquella isla, había permanecido escondido a vista de todos, nadie lo cuestionó, ¿por qué hacerlo? Todos tenían sus propias cosas.
—Ayúdame a levantarme —Anica asintió, sin discutir cuando el omega se incorporó.
Aegon camino con su ayuda, su cuerpo se sentía ligero, y aunque eso dolió un poco, tenía algo importante que hacer, tomo la manta que cubría aquella esquina y cuando tiró de ella, Anica abrió los ojos en grande, allí habían dos huevos de dragón, uno se movió ligeramente.
—Trae a mis cachorros, es hora
Impresionada decide seguir el pedido, alejándose de Aegon tras asegurarse de que permanece de pie, al ir a la otra habitación noto a ambos cachorros y Arlys inquietos, se acercó y tomó a la pequeña niña.
—Hay que llevarlos con su madre —la alfa asintió y levantó al cachorro varón, los llevaron a la habitación en donde Aegon los recibió.
Sus lágrimas cayeron al verlos, tomó a quien Anica presentó como su hija mayor, una bebe de mechones rubios, soltó beso su mejilla y la apretó suavemente contra él, soltó un ligero sollozo cuando ella abrió los ojos, marrones.
Idénticos a los de Jace.
—Daenyra Velaryon-Targaryen
Dejó a su cachorra sobre la cuna y vio uno de los huevos moverse con más fuerza, rodando ligero en su dirección, sonrió y tomó a su cachorro, un varón. Se veía más pequeño que su hermana, su cabello era marrón, como el de su padre alfa, su mayor sorpresa fue cuando abrió los ojos, eran púrpura.
