"Saw you there and I thought
'Oh my god, look at that face
You look like my next mistake
Love's a game, wanna play?'
(...)"———————-
Estaba saliendo de la discoteca junto a mi amigo, este fin de semana habíamos decidido ir de fiesta junto Ferran y su novia pero nos abandonaron a mitad de la noche. Nuestros demás compañeros dijeron que "debían descansar" asi que nisiquiera de presentaron. Pero Pedri y yo teníamos otros planes.
Al ser casi los más jovenes de la plantilla, éramos inseparables. Teníamos las mismas ideas y planes por lo cual vivíamos organizando salidas. Casi todos los fines de semana salíamos de fiesta para no terminar la noche abrazados entre nosotros y mejor con otra compañía y así funcionaba.
Esta noche no había sido la excepción; nos dirigimos a la discoteca de confianza y luego de que quede casi vacía, nos retiramos y ahí nos encontrábamos; caminando por las calles de Barcelona hasta el auto comentando lo que había sucedido durante la noche.
- No ha pasado nada interesante tio. - Dijo para mirarme. - ¿No te ha gustado ninguna?
Negué con la cabeza.
- ¿Y la que te ha dado un papel con su número en el VIP? - Volví a negar.
- Hoy prefiero dormir solo. - El rio y alzo las cejas. - Venga que a veces me agarra lo romántico. - Nos reímos juntos.
- Pensé que nunca iba a escucharte decir eso. - Se rio y yo le golpee el hombro jugando. - Es broma, me parece bien tio.
No había mentido y mi amigo tampoco se había equivocado; no me había gustado ninguna tia pero tampoco me interesaba encontrar alguna esta noche. Por fin habían comenzado mis vacaciones y no tenia intención de pasar mi primera noche acompañado, prefería descansar.
Aunque no me gustaba nada la idea de llegar a mi casa un sábado por la noche y estar completamente solo; no se si esa era la manera en la que quería comenzar mis vacaciones tampoco. Hace mucho no me encontraba así, sin compañía. Eso para mi significaba que iba a tener mucho tiempo para pensar, y lo odiaba.
Ser un jugador tan joven y de un club tan importante como lo es el Barcelona tenia sus ventajas y desventajas en el sentido de la vida nocturna; no siempre podía salir de fiesta debido a partidos, entrenamientos u otros eventos y al ser un adolescente eso me pesaba. Pero cuando podía salir, la pasaba bien con mis colegas y la mayoría de las veces terminaba las noches acompañado por alguna mujer que nunca iba a volver a ver.
Cuando me di cuenta, seguía caminando junto a Pedri con mis manos en el bolsillo.
- Hubiéramos aceptado que nos alcancen Sira y Ferran hasta el auto joder. - Bufé sin ganas de caminar, las calles de Barcelona estaban heladas.
- Anda, solo son dos cuadras. - Contestó mi amigo con el mismo tono de voz.
Di unos pasos mas hasta que vi a un hombre apoyado en un poste en la parada del bus. Fruncí el ceño desconfiado, era muy tarde en la madrugada como para no desconfiar.
- Nos va a robar. - Le dije a mi amigo que no había parado de caminar y se dio la vuelta a mirarme. Le indique con un movimiento de cabeza lo que quise decirle señalando al hombre y él negó con la cabeza.
- Sigue caminando Pablo.
Le hice caso pero me mantuve detrás de el por si pasaba algo, de esa forma el hombre no me veía y podía darle una buena hostia si intentaba robarnos.
- ¿Qué haces ahí? - Mi amigo giró su cabeza para verme cuando nos íbamos acercando al señor.
- Que nos va a robar te digo. - Yo seguí fiel a mi instinto.
- Que te he dicho que no Pablo. - El "hombre", quien en realidad era una hermosa mujer, se dio vuelta apenas escucho lo que me había contestado mi amigo. Aunque volvió a girarse rápido a su lugar, llegamos a verla. - No te digo yo.
No le contesté y seguimos con nuestro camino al coche que ya estaba a una cuadra. Había tenido razón. Era imposible que esa chica nos fuera a robar.
Una vez dentro del auto mi amigo volvió a hablar.
- Venga que esa tía te ha robado el corazón al parecer. - Se rio y yo fruncí el ceño mirándolo. - O la lengua, que no has hablado desde que la vimos.
- No digas gilipolleces. - Mi amigo rio y levanto sus manos como diciendo "culpable". - Solo me pareció conocida y ya. - En realidad, no la había visto nunca en mi vida. No se que fue que me dejo tan pensativo.
- Creo que yo también la he visto en la discoteca, esta en la barra o algo así. - Alzo los hombros y encendió el auto.
- ¿Trabaja allí entonces? - Pregunté luego de unos minutos.
Mi amigo río mientras negaba con la cabeza. - ¿Acaso ya tienes el próximo objetivo?
- Es que esta buenísima. - Alce los hombros restándole importancia a lo fuerte que me habia latido el pecho cuando nuestras miradas conectaron unos mini segundos en el medio de la calle. Que esas mierdas del amor a primera vista no existían.
Una vez que me dejo en mi casa , fui directo a mi habitación para poder acostarme. Como todos los días, agarre mi celular y entre a instagram para ver algunas historias.
Me saltó una de la discoteca a la que habíamos ido. Y a la que frecuentábamos casi todos los sábados, Recordé las palabras de Pedri y me metí al perfil sin dudarlo. Quizás por aquí estaba el instagram de la chica.
Llegue a una publicación en la que se veía una foto de la barra en plena noche; dos barmans atendiendo gente lo mas rápido que podían. Y allí estaba, ella era una; con el pelo recogido y una pollera con una camisa que le quedaban excelentes.
Me fije en los etiquetados y una "vicky" se hizo presente en la pantalla, me decidí a apretar su perfil para verla un poco mas.
¿Qué se suponía que estaba haciendo? Negué con la cabeza apartando esa idea y salí del perfil. No me interesaba quien era.
Me dedique a mirar el techo para pasar el rato hasta dormirme con el silencio de la casa inundándome de fondo. Estaba solo, siempre estaba solo. Bufé sin querer pensar en eso ni en los ojos de la chica que estaba en la parada del bus.
Nunca me había enamorado y no tenía planeado hacerlo, no iba a desaprovechar mi soltería siendo uno de los jovenes más codiciados de España en ese momento. Pero no iba a negar que nunca había visto unos ojos tan brillantes como aquellos.
La chica estaba buena y si Pedri tenia razón, probablemente la vea el sábado que viene y vería si puede pasar algo. Era solo un polvo. Como siempre lo era, ninguno tenia nada especial. Porque en ninguno había sentimientos de por medio.
La invitaría un trago o le pediría que me muestre donde esta el baño y luego no la vería nunca mas. Estaba acostumbrado a eso, podía hacerlo. ¿Qué podía salir mal?
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style - gavi
RandomVictoria tenía tres requisitos cuando se trataba de un rollo de una noche; no famosos, no encariñarse y no volver a verlos nunca más. Pero parecía que Pablo tenía planes muy distintos y disfrutaba aparecerse todos los sábados en su trabajo para mole...