El pelirrojo estaba exhausto.
Tan solo por el hecho de sentirse nervioso; tanto que, sin querer, casi provoca un corto circuito en todo el barrio.
Virgo dejó que este apoyara su cabeza sobre su regazo, pero aún estaba sorprendido.
— ¿No has considerado que tienes un oído un poco agudo? Creo que fuiste el único en escucharlo.
— ¿Escuchar qué? ¿Por qué tuvimos que salir corriendo de la tienda? —preguntó Aries, también cansado. Tenía mucha energía, pero no era el atleta más experimentado.
— ¿Nunca te diste cuenta, Ari? —preguntó, Piscis, apoyándose en el hombro del nombrado. Habría sido más fácil desaparecer volando.
— ¿Darnos cuenta de qué...? Yo tampoco entendí —habló Acuario.
— Había una bomba, metida en alguna parte de la tienda —explicó Sagitario.
— Pero se escuchó muy agudo... Por nervios, apagué las luces de toda la tienda sin querer, y con las luces todavía apagadas, salimos corriendo, mientras trataba de agarrar a Sagitario —explicó también Libra, llevando sus manos hasta su rostro.
— ¿Sabes que es lo bueno de todo esto? Usaste tu poder justo a tiempo. La bomba estaba apunto de estallar.
Por un lado, felicitaron a Libra por haber hecho eso. Por otro, le recomendaron que se tranquilice un poco antes de usar su poder.
— Si estás lo suficientemente cansado, puedo dejarte dormir aquí, o acompañarte hasta tu casa.
— Creo que me vendría bien descansar en mi casa.
Con esto, Virgo acompañó a sus amigos hasta la puerta, despidiéndose.
Caminaron unas cuantas cuadras, dirigiéndose hasta la casa del pelirrojo.
— No sé como explicarlo... Es como si la electricidad fuera parte de mi energía, no puedo evitar sentirme cansado...
— Debe ser una desgraciada desventaja —se encogió de hombros Piscis.
— ¿Te estás reprochando a tí mismo por una acción inconsciente? —interrogó Acuario. El pelirrojo negó levemente.
— Es que ya debería de haber aprendido a controlarlo. No sé que sucede.
— No va a salirte de primeras, Lib. Mientras vayas aprendiendo a tu propio ritmo, todo seguirá bien —aseguró Aries.
Libra asintió, no tan convencido.
— Si no hubiera sabido hacer un corto circuito para desactivar la bomba, no sé cómo seguiríamos vivos...
— Llegamos. Quiero suponer que esta es tu casa, ¿no?
— Sí. Gracias chicos.
— No hay de qué. Nos vemos después, hormiga colorada —se despidieron los chicos.
Frunciendo el entrecejo por el apodo, cerró la puerta de golpe. Se arrepintió al instante, puesto a que había golpeado su pie en el proceso.
Y en cuanto trató de sobar su pie, tropezó por la falta de equilibrio.Sí, sin dudas la torpeza era su poder extra.
Ingresó, sobando su frente y rengueando, más el cansancio de haber usado su poder.
Pasó totalmente desapercibido por su madre, quien estaba al teléfono; y para su hermana, quien miraba la televisión.
Bufó, ni así llamó la atención.Se encaminó directamente a su habitación, indignado. Era una costumbre ignorar su llegada y presencia.
Pero estaba demasiado agotado como para pensar en eso, solo quería acostarse en el colchón de su cama y dormir hasta el otro día...
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Two choices: Villains or Heroes (Zodiac)
Fiksi IlmiahDoce chicos, divididos en dos bandos. En un mundo donde la sociedad se divide en tres grupos: Héroes Villanos U Ordinarios Grupos que tienen imposible conectarse o vincularse entre sí. ¿Qué sucederá con estos chicos relativamente curiosos y rebeldes...