8 - Confesión

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Escucha, yo también he intentado ayudar al amo Kai - le susurró Davis a un lado para que los demás no pudieran escucharlos.

Davis? Pero que tú no estás aquí todo el tiempo? Como dejaste que pasara? - Adam estaba enojado.

No, desde que me enteré que Kai estaba saliendo con aquel hombre, nunca me pareció su relación ya que literalmente se llevan como 10 años - paro un poco, le dolía recordar todo lo que había pasado antes- Kai dijo que todo estaba bien... - el hombre quería llorar pero siguió- hasta que una noche cuando olvidé mi abrigo y regresé por él, mientras subía las escaleras escuche gritos provenientes de la habitación y subí al instante solo para encontrar una escena terrible- miro a Adam - Jayce estaba sobre Kai mientras le gritaba muchas groserías y lo embestía con fuerza, tanto que le sacó demasiada sangre. Lo empezó a golpear y a morder dejándole marcas - el mayor soltó una lágrima - yo golpeé al chico y lo saqué fuera mientras me aproximaba a ayudar al amo Kai quien estaba muy herido- se cayó un poco ya que escuchó como los amigos de Jayce salían del cuarto mientras se reían. Davis estaba dolido. Más allá de ser el mayordomo de Kai, era su amigo su compañía, una imagen paterna y a la vez materna para él, lo cuidó y lo conoció desde que estaba en el vientre de su madre. Él fue la primera persona que lo cargo después de las enfermeras cuando nació, fue quien lo educó, lo crió. Davis nunca tuvo familia, Kai significaba todo para él, por eso siempre aguanto los malos tratos de sus padres hacia él.

Estaba herido, se sentía tan mal de no poderlo proteger o hacer algo para ayudarlo. Había intentado ir a la policía pero siempre antes de llegar aparecían unos matones amigos de Jayce y lo obligaban a irse.

Cuando por fin se fueron todos los chicos se acercaron más a la puerta pero no tanto ya que podría verlos Jayce. En eso escucharon como le decía.

Kai, ¿sabes que te amo verdad? Perdóname por lo de esta noche, no debes de provocarme para no volver a hacerte lo mismo- Kai ya no creía nada de lo que decía, lo amaba pero lo odiaba, quería irse pero nunca soportaría el dolor de dejarlo.

Jayce ya no quiero...- le dijo débilmente

Kai, ey ey tranquilo, está fue la última vez, fue tu culpa pero espero que aprendas a no provocarme más- lo tomo entre sus brazos y le dio un tierno beso en la frente mientras lo acariciaba para calmarlo.

Tú no me amas, me lastimas, no me puedo mover, estoy sangrando internamente y estoy destruido... - Kai estaba perdiendo la fuerza, era horrible su estado.

Agh! Ya intente todo pero solo molestas! - lo arrojó contra la cama y se fue.

Ahí fue cuando entraron Davis y Adam.
La escena que vieron los dejó paralizados a ambos, sangre en la cama, la ropa de varios chicos tendida en el suelo, Kai acostado en la cama con la ropa destruida y manchada de semrn de aquellos chicos.

Kai apenas pudo divisar quiénes eran, pero al verlo se asustó y con la poca fuerza que le quedaba echó un grito que se escuchó en toda la habitación.

Kai, tranquilo, no vamos a lastimarte- le dijo Adam mientras intentaba acercarse mas lentamente para no asustarlo.

Eso ya me lo han...dicho - le respondió Kai

Todo estará bien, te alejaremos de él para que no pueda hacerte mas daño- le dijo Davis quien por fin logró sentarse a su lado y empezó a acariciar su cabello.

Kai sollozo un poco - pero, yo lo amo... - kea dijo y Adam no pudo evitar llorar un poco que se dio la vuelta, pero en ese momento llegó Jayce quien había visto todo.

Vaya vaya, volviste miserable mayordomo..- cerro la puerta con llave.
Lo peor venía.

...

He was just a child... Donde viven las historias. Descúbrelo ahora