𝐿𝑜𝓈𝓉 𝒾𝓃 𝓉𝒽𝑒 𝓃𝒾𝑔𝒽𝓉 (𝕷𝖎𝖓𝖐 𝖝 𝕷𝖊𝖈𝖙𝖔𝖗𝖆) [Totk]

░▒▓█►─═ 02: Recuerdo 1

(Aviso: Los capítulos de recuerdos serán muy cortos, pues contienen lo justo y necesario para la historia.)

Hacía calor, ¿pero qué podía hacer el joven contra eso? Nada. Por fin llegó, aunque ya fuera de noche, al montón de césped enfrente de una posta. Le llamó la atención por una simple razón; creaba una forma parecida a un zonnan con su luz. Era de noche y la luna era lo único que iluminaba la zona de alrededor, aparte de las luces de la posta. Al llegar, vio un una silueta morada brillante montada en un lobo. Link sacó su espada y se acercó, pero se sorprendió al ver más de cerca aquella luz.

Era un o una zonnan, por sus orejas y pelo largo, con una máscara de lobo mientras montaba en el mismo animal. Estaban mirándose fijamente, hasta que el lobo se sacudió y su jinete sacó una lanza, haciendo que el rubio, que ahora portaba el pelo suelto, se acercara más con su espada oxidada. El animal retrocedió y la persona señaló un lugar con la lanza, corriendo con su lobo hacia el mismo punto. El de ojos azules no se lo pensó dos veces y siguió a aquel interesante ser.

Al llegar después de correr bastante, ambos seres de color morado se habían desvanecido y solo quedaba un charco de agua, el cual examinó el aventurero. El centro de su mano zonnan, donde tenía el poder de retroceso, emitió un destello y comenzó a brillar. después de eso, el charco comenzó también a brillar del mismo amarillo que el centro de su mano y después de dejar el brillo de lado, el agua se hizo una gota, volviendo a relucir, pero esta vez de un color blanco, cegando por completo al héroe.

Un pequeño destello amarillo se hizo notar en mitad de un poco de césped, formando así a Zelda en la misma posición en la que cayó al vacío cuando encontraron a la momia. Terminó descendiendo una poca distancia lentamente y terminó desmayada con la lagrima que agarró en la mano izquierda. Todo parecía perdido, hasta que tres pares de pisadas se escucharon cerca.

—¡Vaya!

Los tres seres desconocidos se acercaron a la princesa con sumo cuidado y la misma voz femenina volvió a hablar.

—¡Ay! ¡Pobrecita!

Se vio una mano zonnan tocar el hombro de la rubia de pelo corto, despertándola con delicadeza. Al abrir por completo los ojos, pudo ver a dos zonnan y una hyliana frente a ella, observándola fijamente con preocupación. Al ver que abrió los ojos, las dos chicas sonrieron, tanto la zonnan como la hyliana, pero Zelda se alejó completamente por el miedo, dejando confundidos a los otros tres.

—¿Dónde estoy?

—Parece que te hemos sobresaltado. Lo lamento. Soy Sonnia. ¿Cómo te llamas?

—Sí, dinos... ¿Cuál es tu nombre?

La otra zonnan permanecía callada, mirándola fijamente, como si tratara de analizarla.

—Yo s-soy la hija de Rhoam, rey de Hyrule. Zelda.

La de pelo corto se puso en posición defensiva, mientras que los dos zonnan se extrañaron por completo.

—Qué situación más peculiar. Somos los fundadores del reino de Hyrule, así que no debería existir ningún otro monarca.

—Pero no es posible... ¿Vos sois... los reyes?

—Yo me llamo Rauru y gobierno este reino. Y ella se llama Neoma, es mi hermana menor.

—El rey Rauru y la reina Sonnia... ¡Imposible!

Zelda puso un rostro de sorpresa y todo comenzó a verse borroso, hasta terminar lo que parecía ser la escena.

La luz dejó de cegar a Link y lo que era la gota que emitía el recuerdo cayó al mismo hueco, pero esta vez  desvaneciéndose por completo. La misma figura volvió a hacerse presente, llevándose la atención del chico y apuntando con su lanza a otra dirección; una zona nevada no tan alejada de los orni, comenzando su lobo a correr y a desaparecer en el horizonte, mientras una anciana aparecía a las espaldas de Link.

—Vaya, qué sorpresa encontrarte precisamente aquí tras tanto tiempo, Link.