21. epílogo

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n/t: welcome to the final show:(

Seis semanas después, Harry y Louis estaban delante del gran espejo del vestidor de Harry. Harry se había puesto unos pantalones de vestir verde oscuro y Louis se esforzaba por anudarse la corbata porque no podía apartar la mirada cuando Harry se abotonaba la camisa blanca. En el momento en que Harry lo sorprendió mirándolo en el espejo su sonrisa se transformó en una mueca.

"¿Puedo ayudarle, señor Tomlinson?". Bromeó.

"¿Parece que necesito ayuda?". Louis puso los ojos en blanco juguetonamente. Harry negó con la cabeza, se abrochó el último botón y se acercó a Louis. Le desató la corbata sin decir palabra y se la volvió a poner con una sonrisa en los labios. Louis lo miró y esperó a que Harry terminara antes de inclinarse y presionar un cariñoso beso en sus labios.

"¡Gracias, bebé!" murmuró Louis y Harry sonrió.

Se prepararon para el acto benéfico al que Harry había sido invitado. Sabían que la probabilidad de que hubiera reporteros en directo era muy alta y eso era exactamente lo que querían. Salir a la luz de la forma más ruidosa que se les ocurriera. Harry parecía tan tranquilo al respecto y eso sólo hizo que Louis se sintiera más ansioso por todo. Quería estar guapo para su novio, al lado de su novio, pero era en momentos así cuando sus inseguridades sacaban lo mejor de él y Harry había aprendido a ver las señales.

"¡Te ves tan bien, Lou!" dijo Harry, mirándolo con ojos hambrientos.

"¡Tú sí que sabes hablar!" replicó Louis, inclinándose para agarrar a Harry por el cuello y tirar de él hacia abajo para darle un beso contundente. Sintió que los nervios le punzaban la piel, pero esta vez no fue desagradable.

Media hora después, Harry se sentó junto a Louis en un taxi, le puso la mano en el regazo y acarició distraídamente la piel sensible de Louis. Miraba por la ventanilla del coche pero se volvía de vez en cuando para sonreír a Louis, percibiendo el ambiente de ansiedad pero sin saber cómo aliviarlo. Louis intentó calmar los nervios y respiró hondo unas cuantas veces antes de que el coche se detuviera frente al gran edificio, donde los paparazzis y los periodistas ya esperaban en fila.

Una mujer bajó del taxi delante de ellos y Louis la reconoció como Perrie Edwards de Little Mix. Se agolpó entre los periodistas y los flashes de las cámaras eran más brillantes que nada que Louis hubiera visto antes. Perrie llevaba un vestido rojo brillante con una larga cola y el pelo recogido en una coleta alta. Un guardia de seguridad la protegió de los periodistas y subió con ella las escaleras del edificio, donde se detuvo y posó para unas cuantas fotos antes de desaparecer en el interior.

El taxi que les precedía se alejó y su propio conductor volvió a arrancar el motor, para detenerse a los cinco metros. El conductor bajó del coche y abrió la puerta del lado de Harry, que salió del coche con elegancia, sonrió a las cámaras durante un segundo antes de inclinarse hacia atrás en el coche, cogió la mano de Louis y le ayudó a salir del coche. Louis oyó los gritos y los vítores a su alrededor, pero no pudo concentrarse en ellos. En su lugar, se centró en Harry, en la forma en que entrelazaba sus dedos, en cómo le dedicaba una sonrisa privada y en cómo se le iluminaban los ojos cuando Louis le devolvía la sonrisa.

El guardaespaldas de Harry hizo un buen trabajo protegiéndolos de los periodistas aunque a ellos les daba igual. Estaban listos para responder a las preguntas que les ardían en la lengua, pero ambos sabían que no debían entretenerse porque ya había otro coche, otra celebridad, esperando su gran aparición pública detrás de ellos y habría tiempo suficiente para hablar con ciertos periodistas más tarde esa noche.

Harry y Louis se detuvieron en lo alto de las escaleras, justo delante de la gran puerta de entrada. Harry rodeó la cintura de Louis con la mano y éste, sin saber qué hacer, levantó la vista hacia los ojos verdes de Harry y se encontró con que el más joven ya le estaba mirando. No pudo evitar sonreír y Harry también. No les importaba mirar directamente a las cámaras y si después los tabloides los pintaban como completamente enamorados no se equivocaban, ¿verdad?

Dirty little secret - l.s || TRADUCCIÓN Donde viven las historias. Descúbrelo ahora