El agente del FBI, Park Jimin, persigue a los criminales con implacable determinación, convencido de que deben enfrentar justicia. Pero bajo su fachada de rectitud se esconde un secreto devastador.
Su linaje pertenece a una de las familias más peli...
Me encontraba en mi escritorio resolviendo algunos asuntos que en cinco meses nadie había podido solucionar cuando Yongui vino y se paró a mi lado
Algo así es el lugar pero pueden imaginarlo como prefieran, esto solo es una idea del lugar
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– Vienes a traerme un cafecito?
- No te levantes a ver si vas a tomar café
– Ahora que sucede Yongui?
- El idiota de hace un rato, el del asalto en el banco de niega a darnos información, y dijo que solo hablaría contigo
– Pues consigue la menera de que hable, estoy muy ocupado ahora
- Jimin lo hemos intentando y se niega a hablar con alguien más que no seas tu, véalo usted mismo y así le das una lección
Dijo y me entrego una tablet donde estaba el vídeo grabado por la cámara de seguridad de la sala de interrogación y dónde el sujeto se negaba a hablar
Sonreí ante lo que había dicho Yongui, me conocía perfectamente, y claro que le iba a dar una lección
– Ese imbécil!! Se va a arrepentir de haber asaltado ese banco
Me levanté de dónde estaba para comenzar a caminar en dirección a la sala de interrogación
No entendí como era posible que unos oficiales no pudieran sacarle información a un sospechoso que acababa de robar un banco, ahora me daba cuenta de porque el lugar estaba como estaba, y que los criminales jugaban con los oficiales como se les venía en gana, pero conmigo no iban a jugar al delincuente y al policía
Si el tal Banchag no cooperaba con ellos, conmigo si lo haría.
- Oficial!!!! Ya me estaba aburriendo aquí con sus amigos!
– Cierra la boca y no me hagas perder la poca paciencia que me queda
– Salgan!
Les dije a los oficiales que se encontraban con el