XXI

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Inhaló y exhaló de forma lenta y profunda, intentando calmarse a si mismo cuando escuchó la puerta principal abrirse, y seguido de eso observó a su hermano mayor entrar al departamento. Tenía unas ojeras bastante pronunciadas y su postura estaba encorvada, se veía cansado.

Habían pasado días desde la discusión, ninguno de los dos se molestó siquiera en hablarse. Yuta lo iba a hacer en múltiples ocasiones, pero tenía ocupaciones más importantes. Shotaro por su parte, se cansó de ser un mal hermano, estaba dispuesto a arreglar las cosas y también su relación con el único pariente cercano que tenía.

Lo observó caminar y pasar de largo, aún sabiendo que él estaba allí – Yuta – Lo llamó, en un tono que él consideró autoritario. El mencionado volteó hacia el menor y paró su andar por un momento – Ven – Ordenó.

El mayor obedeció luego de dar un suspiro, no quería, su cuerpo le dolía de forma indescriptible y su cabeza ni hablar. Más muertes y drogas, todo eso de la venganza lo estaba volviendo loco – Qué? – Se paró frente a su hermano cruzándose de brazos, mirándolo fijamente con la intención de intimidarlo – Estuve con alguien – Soltó

-Que? – Preguntó, su tono intimidante había desaparecido y el mismo fue reemplazado por uno de confusión – Esa noche, me acosté con alguien y pasé la noche en su casa – Se sentía una puta, andando por ahí entregando su cuerpo a cualquier imbécil que se le acercaba. Incluso, era menos que eso, las putas cobraban, él no.

– Con quién? – Cuestionó el mayor – Un chico – Respondió con rapidez – Quién lo hizo, Shotaro? – La voz de Yuta sonaba más grave, se estaba enojando – Un chico equis, no lo conoces – Mintió, y Yuta pudo respirar con normalidad nuevamente, no estuvo con Sungchan, gracias al cielo. – Le entregaste tu virginidad a un chico que no conocías? –

<<No exactamente>> - Sí – Su intención era empezar de nuevo, cómo una persona madura, sin mentiras, sin secretos. Pero cómo no mentirle? Si le confesaba que Sungchan fue quién lo folló seguramente lo mataría, a ambos. Y por otro lado estaba el hecho de la virginidad, Cómo podría decirle que su virginidad le fue arrebatada a los quince años, y que además no fue con su consentimiento? Cómo sería capaz de confesarle que fue abusado sexualmente durante aproximadamente dos años?

-Te desconozco Shotaro, primero Sungchan, después esto y encima me lo ocultas, es que no confías en mi? – Se acercó unos centímetros más, no para intimidarlo, sino para asegurarse de que esa conexión entre él y su hermano seguía allí – Lo hago Yuta, creeme que sí… -

-Pues no me lo demuestras, no te regañaría si me avisaras de ciertas etapas de tu vida – Respondió con sinceridad – Sí? Que me dices de Sungchan? – Shotaro fue quien se cruzó de brazos ahora y Yuta se quedó sin palabras – Es… diferente.. –

-Vamos Yuta! No hay que ser idiota para entender que tú tienes algo personal con él –

-Es el hijo de mi jefe! Mi jefe es un imbécil, y por tanto, el también lo és – Resumió, pero la reacción de Shotaro le hizo plantearse algunas cosas – Quién te lo garantiza? Para mi sólo es un chico incomprendido – Yuta ladeó su cabeza levemente y fruncio el ceño, fue entonces cuando Shotaro se dio cuenta del error que cometió al soltar ese comentario – Te dije que te alejaras de él –

-Jaemin es novio de su amigo, sólo hemos tenido poca interacción, no te preocupes – Otra vez mintiendo – Eso espero Taro – Advirtió, ésta vez en un tono más suave, sin ninguna intención de asustarlo o alejarlo otra vez – Lo siento Yuta, prometo que me comportare cómo un hombre –

Yuta soltó una risita – Eres un hombre Shotaro sólo necesitas madurar un poco – El menor asintió con emoción – Eso! Voy a madurar! – Yuta rió con más fuerza, su hermano llegaba a ser realmente adorable sin darse cuenta – Está bien pequeño puberto maduro, sólo asegúrate de usar protección en tus aventuras de una noche –

-Lo haré! Y te lo contaré todo! – Yuta le dio un pequeño golpecito en el hombro – No exageres, para eso tienes a tus amigos – Ambos rieron alto por el comentario del mayor – Taro, hoy no estaré en casa, pasaré la noche con Mark –

-Oh, olvidé decirte, los chicos me invitaron a una pijamada hoy, tampoco estaré – Yuta levantó una ceja y se cruzó de brazos – No me agrada la idea de que me lo digas a última hora – Comentó fingiendo enojo, la realidad era que le emocionaba el hecho de que su hermano tuviera una mejor vida social – Te avisare con anticipación la próxima vez –

                                         (…..)

-Quién lo diría, Shotaro se veía tan inocente – Respondió Jisung – Lo és, tiene un alma pura – Defendió Sungchan, ya estaban en casa de Jeno, habían llegado unas dos horas antes – Le harás daño, Sungchan – Advirtió el dueño de la casa, incluyéndose también en la conversación – Lo sé, pero intentaré no dañarlo demasiado –

-Lo sabe? – Preguntó, Sungchan corrió la mirada y tensó la mandíbula – No – Respondió el castaño rápidamente, le repugnaba la simple idea de imaginar que Shotaro supiera finalmente en los negocios que estaba metido – Tienes que decirle-

-Piensas que es sencillo? Porque no le dices tú a Jaemin? El tampoco lo sabe- Quién corrió la mirada ahora fue Jeno. Decirlo era fácil, lo difícil era ejecutarlo. El chico era hijo de Hyuckjae , ésta era la razón por la que los tres eran tan unidos, sus padres tenían una relación igual a la de ellos, y por tanto, estaban condenados a heredar el oficio.

-Bueno basta! Se van a pelear por una estupidez como esa? Todos aquí estamos jodidos, TODOS – Exclamó Jisung levantándose de su sofá, justo antes de que Jeno respondiera – Jisung tiene razón, se lo diremos, algún día..-

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Holaaa, cómo se encuentran?

Espero muy bieen!

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𝐋𝐢𝐤𝐞 𝐚 𝐫𝐨𝐬𝐞 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora