Nuestra Pequeña Galaxia

Capítulo 26

Finalmente las horas pasaron y la nave estaba aterrizando en Knowhere, eran aproximadamente las 6 am y todos estaban agotados.

Gamora una vez mas les agradeció por salvarla y los chicos le dedicaron una sonrisa, para su sorpresa Nebula se acercó a ella y le dio un abrazo.

-Es bueno tenerte de vuelta. Susurró su hermana.

Gamora sonrió y en eso el grito de emocion de Mantis los sorprendió, bajó corriendo las escaleras con Groot sobre su hombro y no dudó ni un segundo en abrazar a Gamora.

-Estas aqui!!!! Dijo su cuñada feliz.

-Mantis! Exclamó Gamora devolviendole el abrazo mientras sonreía.

-Yo soy Groot (Gammy!!!!!!!!) Gritó el pequeño lanzandose a los brazos de Gamora.

-Hey!! Ven aqui cariño. Dijo Gamora abrazandolo mientras dejaba un par de besos en su frente.

-Yo soy Groot? (Estas bien?) Preguntó el mientras la miraba preocupado, había notado ese golpe en su mejilla.

-Si bebé, estoy bien, solo un poco cansada.

-Amigo, por que no vamos a desayunar y dejamos que Gamora descanse un rato, necesita dormir. Dijo Rocket acercandose a ellos, Groot asintió y besó la mejilla de la chica antes de bajarse y caminar junto al mapache alejandose de ahí,  lo mismo hicieron Nebula, Kraglin y Drax  dirigiendose a sus habitaciones, realmente necesitaban descansar.

-Mantis donde esta mi bebé? Preguntó Gamora.

-Esta durmiendo, se encontraba agotada. Traté de mantenerla tranquila lo mas que pude pero ayer por la tarde comenzó a estar intranquila, se sentía triste y te necesitaba. Lo siento, lloró bastante pero no quize usar mis poderes con ella.

-Gracias por cuidarla Mantis, de verdad. Por que no vas a descansar ahora?

Mantis asintió y Peter le dio un pequeño abrazo agradeciendole por cuidar de ella y Groot.

Finalmente Peter tomó en brazos a Gamora y la subió a la habitacion, quería evitar en medida de lo posible que abriera su herida o se lastimara de nuevo, con cuidado la dejó en el suelo y entraron.

En silencio los chicos se acercaron a la cuna donde su bebé dormía pacificamente, Gamora acarició su mejilla y sonrió su pequeña estaba bien, Peter la abrazó suavemente y dejó un beso en su mejilla.

-Ella esta bien Gamm.

-Lo se, solo... siento que en cualquier momento alguien llegará y la alejará de nosotros.

-Eso no va a pasar, te lo prometo cariño. Y tampoco te volverán a alejar de mi lado. Dijo él mientras tomaba su rostro con ambas manos. Gamora suspiró y asintió mas tranquila.

-Te sientes bien? Preguntó Peter señalando su herida, ella asintió y caminó al armario, con cuidado se retiró la chaqueta, y la blusa que traía puestas, revisó que todo estuviera bien con su herida, se quitó los pantalones, el sostén y se puso una camiseta de Quill.

Peter se alejó de la cuna y buscó entre su ropa algun pantalon de pijama para dormir mas comodo y se quitó la camiseta.

-Será mejor que vallamos a dormir cariño, antes de que la Starbaby jr despierte. Dijo Peter, Gamora sonrió asintiendo y él se acercó a apagar las luces de la habitación, despues de unos minutos ambos se quedaron profundamente dormidos.

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Era pasado el medio dia cuando el llanto de su pequeña los despertó, Peter se levantó de la cama rápidamente y tomó a su bebé en brazos.

-Hola princesa, ya estamos aquí... no llores bebé, mami no querrá verte así de triste. Dijo Peter mientras la mecía en sus brazos unos segundos, poco a poco el llanto de la pequeña Irina disminuyó al ver que su padre era quien la sostenía pero aun así un tierno puchero se formó en sus labios, su pequeña princesa necesitaba a su madre, tenía 2 días sin verla.

Peter caminó a la cama mientras Gamora se incorporaba recargandose en un par de almohadas y con cuidado él dejó a su pequeña en brazos de su chica, esta la tomó suavemente y no pudo evitar sentir un par de lagrimas callendo por sus mejillas al sostenerla, Dios... como la había extrañado.

-Hola cariño, ya volví... Dijo Gamora sonriendo, su pequeña la miraba atenta y hacía sonidos adorables con su boquita como si estuviera conversando con ella. -Me extrañaste chiquita? Preguntó su madre sabiendo que su bebé obviamente no le respondería pero una tierna risa escapó de los labios de su pequeña princesa, Gamora la acercó a su pecho y la abrazó acariciando su espalda mientras se balanceaba suavemente hacia los lados, recargó un poco su cabeza sobre la de su pequeña, quien tenía su rostro escondido en el cuello de Gamora y tiernamente besó su cabecita mientras cerraba los ojos. -Por que yo si te extrañé mucho mi amor, no sabes cuanto necesité un abrazo tuyo. Ahora se sentía completa, en paz y quería estar asi siempre.

Peter miró a sus dos chicas con una sonrisa, se sentó en la cama junto a ellas y atrajo a Gamora a su pecho rodeandola con sus brazos.

-Al fin en casa amor. Dijo él.

-Al fin en casa. Respondió ella dejando un casto beso sobre sus labios.

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Despues de un rato de mimos, besos y abrazos, su pequeña comenzó a removerse inquieta, necesitaba comer, eso lo sabía Gamora puesto que había comenzado a rebuscar en su pecho con su boquita como solía hacerlo siempre que tenía hambre, Peter al mirar su acción sonrió y se levantó a prepara su biberón.

Gamora sonrió al ver a Peter caminar por la habitacion buscando las cosas de su pequeña y la alejó un poco para que dejará de succionar sobre su camiseta, no encontraría su comida ahí de todas formas. Probablemente su madre biologica la alimentaba directamente con leche materna, por eso su bebé buscaba esa fuente de alimento en ella, a veces succionaba algun boton sobre su chaqueta a la altura de su pecho pensando que ese era el lugar correcto pero al no obtener nada terminaba haciendo pucheros. Como habría adorado Gamora que esa pequeña hubiera nacido de ella, haberla llevado en su vientre, saber lo que se sentía esperar por ella todos esos meses, poder alimentarla de ella, saber lo que era estar embarazada.... en fin, sin importar que, esa niña era de ella, era su bebé y nada podría cambiar eso.

Sus deseos a veces iban en contra de sus pensamientos racionales, aun recordaba esa vez que le platicó a Peter el miedo que tenía de ser madre, de no ser capaz de llevar a un bebé dentro de ella, para suerte suya Thanos no había acabado totalmente con su humanidad, si bien le hizo muchas modificaciones, la parte reproductiva estaba intacta, él esperaba que Gamora un día fuera quien tomara su lugar, en sus planes estaba buscar un digno hombre que la ayudara a engendrar a quien sería el sucesor de ella, así el mismo Thanos podría entrenarlo. Gamora negó repetidamente y suspiró, eso estaba en el pasado, el titán no podría acercarse a ella nunca más.

En eso, Peter se acercó con el biberón y Gamlra me agradeció mientras lo acercaba a la boquita de su bebé.

Peter miraba la escena con ternura, sí, definitivamente quería eso para toda su vida, estaba decidido esa noche le pediría matrimonio y ahora se aseguraría de que nada interfiriera con ello.