Prisioneros por amor. Ibrahim Pasha y Sultana Hürrem

Hürrem es embrujada

Hürrem fue llamada a los aposentos de la Madre Sultana, fue sin hacerla esperar un sengudo.
Al entrar la reverencio.

Hürrem: Madre, me llamó.

Hafta: Hürrem, siéntate a mi lado.

Hürrem se sentó junto a ella feliz.
Pero cuando lo hizo Hafta se puso
Completamente seria.

Hürrem: ¿Qué necesita de mí?

Hafta: Qué me dijas la verdad.
Me enteré de que tienes un amorio
Con Ibrahim Pasha ¿Es verdad?

Hürrem: Es verdad, Sultana.

Hafta: ¿Engañaste a mi hijo con él?
¿Ese bebé que esperas es del Pasha?

Hürrem: No, no lo es.
Qué amo al Pasha no significa que le fui infiel al Sultán.
Sé que me matarían si lo hago.

Hafta: Nunca estuve de acuerdo con que Hatice se case con Ibrahim porque sabía que él no la amaba.

Hürrem: ¿No me matará?

Hafta: Sabía que esté matrimonio estaba condenado desde el principio, así que no te mataré por hacer peor la situación.

Hürrem: ¿Usted podrá perdonarme?

Hafta: Si, te perdonó.
Porque no tienes la culpa de nada.

Hürrem: ¿Podrá volver a confiar en mí?

Hafta: ¿Si te pido hacer algo lo harías, Hürrem?

Hürrem: Siempre estoy lista, Sultana.

Hafta: Si te pido que te quites
La vida ¿Lo harías?

Hürrem: Mi vida está en sus manos, Sultana.

Hafta: Para demostrar tu lealtad hacia mí, bebe esté veneno ahora.

La Madre Sultana se enseñó una pequeña botellita con un liquido
Transparente.
Hürrem apreciaba mucho a Hafta,
Porque  fue la única que confió en ella para darle un puesto de trabajo
Acorde a sus conocimientos y
Era la única que la quería y no
Hablaba mal a sus espaldas.

Hürrem llorando agarró la botellita
Y tomó el líquido.

Hürrem: Sultana, no se olvide
De mí. Cuide y protega a Selim, cuide bien de él por favor.
Y dígale a Ibrahim Pasha que
Lo amo con todo mi ser.

Hürrem cerró los ojos de golpe
Y se desmayó.  A la tarde ella despertó en su cama acompañada de la
Madre Sultana contenta.

Hürrem: ¿Sultana, qué pasó?
¿Cómo sigo aquí?

Hafta: Lo que tomaste no era veneno, era para que te quedes dormida un tiempo.

La pelirroja empezó a reir de la felicidad, se había asustado mucho.

Sultana, casi me muero del susto.
No me haga eso más.

Hürrem se levantó de la cama y
Se sentó en el borde.

Hürrem: ¿Entonces usted...

Hafta: ¿Crees que dejaría morir
A una de mis sirvientas más
Leales?

Hürrem: ¿Cuántas veces más tendré que demostrarle mi lealtad?

Hafta: Mientras no hagas otra locura cómo ser amante del Pasha,
Estarás bien.

Hürrem: Gracias, Sultana.