Sultana Shahrazad

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Después de una semana de felicidad para Hürrem y Ibrahim, resivieron una visita inesperada.

Sha: Hola, hermanos.

Soleiman: Sha, volviste de Maniza.
¿Cómo estás?

Hatice: ¿Por qué no nos avisaste que vendrías? ,Hubiéramos preparado tu instancia.

Sha: Era una sorpresa.

Soleiman: Mis pésames por tu marido. Qué Allah lo tenga en su gloria.

Sha: Amén.

Hatice: Amén.

Hürrem: Bienvenida Sultana.

Ibrahim: Bienvenida, Sultana.
Cuánto tiempo ha pasado.
Usted no cambió nada.

Y de seguro sigue siendo igual de molesta e insoportable que siempre.

Sha: Ibrahim Pasha.
Los años no parecen haber pasado
por ti, qué envidia.

Ibrahim: Usted sigue igul de bonita, Sultana.

Sha: ¿Y Madre?

Hatice: Debe estar en sus aposentos.

Sha: Iré a verla pero primero quiero ver a mis sobrinos.

Hürrem: Se los mostré, Sultana.

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Hürrem y Shahrazad caminaron a sus aposentos hasta de Sha se detuvo
En la puerta.

Hürrem: ¿Qué pasa, Sultana?

Sha: Hürrem, escuché muchas cosas sobre ti. No sé si son verdad o mentira.

Hürrem: La gente dice muchas cosas por aburrimiento.
Bruja, hechicera, incluso que tengo un ojo detrás de mi cabeza.

Sha: No solo eso,  también que tienes un amorio con Ibrahim Pasha.

Hürrem: Eso es verdad.

Sha: Llegaste aquí cómo una criada y diriges el harén cómo una criada y así morirás.

Hürrem: Sultana, hace mucho que la Madre Sultana me emancipo
E incluso me dio un puesto en la política.

Sha: Una Sultana no se hace,
Se nace con la ascendencia.
Y tú no tienes ninguna.

Hürrem se sorprendió por sus palabras y pudo responder.
Sha entró a los aposentos y saludo
A los niños.

¿Crees que no me di cuenta Sha?
Me humillante porque estás enamorada de mi Ibrahim.
Pero por su reacción al verte no tendrás ninguna oportunidad.

Sha después de jugar con sus sobrinos
Se retiro.

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Ibrahim estaba en la sala con Hatice
Jugando con Mehmet Bey.
Cuando entró Sha.

Sha: Qué lindo mi sobrino.

Ibrahim: ¿Viste a la Madre Sultana?

Sha: Si, se alegró mucho.

Hatice: Bueno, ya te puedes ir.

Ibrahim: Hatice...

Sha: ¿Por qué me echas?

Hatice: ¿Me crees tonta?
Vi cómo miras a mi marido.

Sha: No sé de qué hablas.

Hatice: Por él siempre estuviste distante, nunca estuviste en mis alegrías y tristezas.
Todo porque lo amas.

Sha: No creas en esa mentira.
¿Cómo puedes decirme eso?
Acaba de morir mi esposo.

Hatice: Te odio.
Y eso significa que te quiero muerta.

Ibrahim: ¡Hatice es suficiente!

Hatice: Puedes estar viuda ahora. pero Kasim pudo ser un Gran Visir y tu marido pero nunca será Ibrahim.

Ibrahim le dio Mehmet a Hatice para que se calme. Ella lo agarró y se sentó para dormirlo.

Ibrahim: ¿Sultana, es verdad lo que dice Hatice?

Sha: ¿Te estás quejando?

Ibrahim: No, solo tengo curiosidad por saber.

Sha: Los sentimientos pueden cambiar Ibrahim.
Hoy puedes querer a alguien que realmente no quieres o puedes no querer a alguien que realmente  quieres.

Ibrahim: Usted está confundida.

Sha: El único confundido aquí,
Eres tú.

Ibrahim: En una guerra las armas de los hombres son claras y
Están a la vista, Sultana.
Pero con las mujeres son sigilosas
E impresentables.
Nunca se sabe con qué lucharán
Hasta que lo hacen.

Sha: Entonces deberías alejarte
De esas mujeres.






Prisioneros por amor.  Ibrahim Pasha y Sultana HürremDonde viven las historias. Descúbrelo ahora