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Impaciencia ~ 1




Durante los días siguientes, Tul y Max establecieron una rutina regular, o al menos tan regular como podía ser cuando los individuos involucrados eran un hombre lobo asesino y un hacker humano que huía de una misteriosa amenaza. Ambos todavía estaban al límite, sin saber exactamente quién estaba tras Tul. Max se había puesto en contacto con Mae Kuang más de una vez. Fighter Panich le había asegurado que ellos estaban investigando y que lo mejor que Max y Tul podían hacer era permanecer a salvo y alejados.

Eso obviamente inquietaba a Max, ya que Tul a menudo lo veía como daba vueltas como un típico hombre lobo atrapado en una jaula. Así que, se asignó a sí mismo la tarea de distraerlo, solo para distraerse también en el proceso.

Tul nunca hubiera pensado que era posible que él se quedara durante días en una cabaña remota sin conexión a Internet, pero tenía una multitud de cosas interesantes que hacer sin acceder a la World Wide Web.

Todo se trataba de información, lo única cosa que siempre había fascinado a Tul, y Max era una fuente aparentemente interminable de aquello. Y más de algo de lo que compartía a menudo impresionaba a Tul encontrándolo increíble, aunque Max realmente no ayudaba ya que una vez le había dicho algunas cosas bastante escandalosas como parte de una broma.

No obstante, ellos habían evitado cualquier cosa sexual desde el día de su llegada, lo que había comenzado a frustrar a Tul. Y tal vez ni siquiera era la parte carnal lo que más le molestaba. Max tenía momentos en los que se sentaba al lado de Tul y se apoyaba contra él, oliendo su cabello. O se reía de las miradas de asombro de Tul —él había estado especialmente entretenido por la reacción de Tul ante la idea de un parto anal. En esos momentos, su máscara se caía y Tul pudo ver al hombre detrás del "silenciador". Pero eso nunca duraba, porque el hombre siempre se apartaba en segundos, siempre conteniéndose y entonces mantenía su distancia durante un buen par de horas.

Al principio, dolía. Tul sintió que estaba haciendo todo tipo de suposiciones, sacando conclusiones equivocadas y echándolo a perder cada vez más en el proceso. Afortunadamente, el uso del teléfono satelital no estaba restringido, por lo que Tul se encontró contactando a su amigo.

Tutor había estado avergonzado y se disculpó cuando Tul supo la verdad por primera vez, pero su amistad era más fuerte que cualquier incomodidad que pudiera haber existido entre ellos. Tor era humano pero también sabía mucho más sobre el mundo de los hombres lobo, y su perspectiva lo ayudó en gran medida.

"Creo que es muy difícil para él, el quererte pero no ser capaz de tenerte", le dijo su amigo una vez a Tul. "Los instintos de los hombres lobo son muy fuertes, y la manera en que ellos se vinculan con sus compañeros... es única. No puedo explicarlo. Tienes que sentirlo para entenderlo por completo".

"Pero él sí me tiene", protestó Tul.

"No estás escuchando. Esto no es solo sexual. Un vínculo de compañeros significa más que eso. Es el compromiso, la confianza, la esperanza de un futuro. Sé que Max se mostró reacio a unirse a nuestra manada, así que solo puedo imaginar que él no se siente merecedor de ese tipo de cosas".

Tor tenía razón, por supuesto, y Tul lo veía todos los días. Trató de ser paciente, esperando que las cosas mejoraran con el tiempo. Pero al final, después de uno de los intentos de Max por evitarlo fue que Tul finalmente estalló.

5. Su Silenciador Hombre Lobo ⁓ MaxTulDonde viven las historias. Descúbrelo ahora