Capítulo 10 |L, Aram|

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Capítulo 10

Capítulo 10

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L, ARAM.

Vuelvo la vista al camino, antes de causar un accidente y pongo mi mano libre sobre la suya. Tara al principio no la toma, pero luego gira la muñeca y entrelaza nuestros dedos.

Sin pensarlo, aún sin quitar la vista el camino, llevo su mano a mis labios y depositó un beso sobre el dorso de su mano; después, dejo caer nuestras manos sobre la tela de su vestido, sobre sus piernas.

Al llegar a casa, detengo el coche ante la caseta de seguridad a 100metros de la entrada principal.

Me giro hacia el lugar donde está Tara y esta me observa con el ceño fruncido.

—Baja conmigo —le pido amablemente.

Tara me mira con curiosidad, pero aún así me sigue. Una vez que ambos estamos frente a la caseta, mi jefe de seguridad sale y me saluda con un asentimiento.
Luego dirige su mirada a Tara, pero de inmediato vuelve su atención a mí.

—Ella es Tara Belle, si alguna vez viene y no estoy en casa, déjala entrar. También quiero que cambien la cerradura, y la contraseña del ala oeste y del parqueo. Olvidé una copia de las llaves en Italia, y no quiero inconvenientes con ya sabes quien —observo a Tara y trato de no reírme al ver su cara de sorpresa—. Ordena que preparen bocadillos para cuatro a través del Intercomunicador y pídele a Estela que despache a todos excepto a la seguridad externa.

—Sí señor —responde y luego entra nuevamente a la caseta.

Me doy la vuelta y miro a Tara a los ojos.
—Dijiste que pensara en qué tipo de relación quiero tener contigo, espero que esto sirva para demostrarte que voy con todo. Sin excepciones y... sin segundas opciones.

Bate sus pestañas varias veces y luego baja la cabeza avergonzada.
Tomó su mano hats llegar al auto y abro la puerta del vehículo para ella.

Luego voy a mi asiento y conduzco hacia mi casa.
5 minutos después, aparco el auto justo al frente de la casa, entregó las llaves a mi seguridad y después ayudo a Tara a bajar.

Tomo su mano nuevamente y observo cómo su mirada viaja por toda la casa. Antes de mirarme por debajo de sus pestañas.

Oscar ayuda a Bethany a salir, la toma de la mano y disculpándose, se adelantan.

Tara y yo nos quedamos atrás.
Tomados de la mano, observándonos el uno al otro.

Sus ojos me miran como si quisiera que le dijera o hiciera algo que no me imagino.

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