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Arqueo mi espalda un poco más cuando Jungkook introdujo su mano entre mis muslos, lo mire y él sonrió con burla, él muy descarado se está burlando de mi, a continuación sus largos dedos hicieron contacto con las bragas presionando aquel punto tan sensible. Lo veo morder su labio y él parece disfrutar de mi sufrimiento. Lo quería, lo ansiaba tanto.

Dios...perdóname.

–Esto es lo que quieres?–Su tono de voz era bajo, divertido y grave.–Dime Haydée...quieres que mis dedos se hundan dentro de ti? Hmm...eso es lo que quieres?–Su respiración causaba escalofríos en todo mi cuerpo, sus insinuaciones me hacían querer perder todo el control, si era que aún conservaba.

Podrías perdonarme?

–Si...–Mi respuesta fue corta, sin titubear, mi expresión cambio de inmediato cuando sentí cómo hacía a un lado mis bragas para por fin sentir aquel contacto por el cual rogaría.

Sus dedos se movían en círculos sobre mi sensible punto haciéndome apretar sus brazos. Jungkook se acercó mucho más a mi y sentí una lamida de su parte en mi lóbulo mientras mordisqueaba. Estaba por volverme loca.

–Mírate...tan necesitada de mi.–Gemí sintiendo la intromisión de un dedo en mi interior mientras que otro presionaba mi sensible clítoris, Jungkook suspiro en mi oído escuchando mis gemidos con placer.–Voy a dominarte en todos los sentidos.

Sentí otra intromisión de un segundo dedo mientras comenzaba a moverlos de arriba abajo acariciando mis paredes, se alejo de mi oído y comenzó a dejar besos por mi mandíbula hasta mi cuello.

–Voy a mostrarte un mundo de placer y oscuridad del cual no querrás salir.–Sus dedos penetraban mi interior sin compasión mientras me entregaba a él, gimiendo y jadeando por más.–Y cuando quieras orar por redimirte de tus pecados será bastante tarde.

Sus labios mordían y lamían mi cuello a su antojo, sentí un cosquilleo allá abajo y Jungkook sonrió acercándose hacia mis labios. Me miro con los ojos entrecerrados mientras sus movimientos con los dedos se hacían cada vez más lentos.

–Ah...no.–Entre abrí mis labios en modo de queja y él observó mis expresiones con burla. Sentí como sus dedos se retiraban de mi interior y como de manera inesperada giraba mi cuerpo mientras alzaba mis caderas y me dejaba postrada en cuatro patas sobre la cama, mi cabeza era un torbellino y mi intimidad palpitaba necesitada de más.

–Voy a joderte Haydée, lo haré sin compasión, porque podré ser bueno contigo, pero sigo siendo Satan.–Sentí un azote en mi trasero y a continuación cómo se deshacía de mis bragas llevándose consigo un gemido de sorpresa de mi parte. Mi trasero quedó al completo descubierto y la bata que aún cubría mi torso se encontraba enrollada hasta mis pechos. Jungkook relamió sus labios y tomó la parte de atrás de mi bata para jalarla y luego tomarla por cada esquina que cubría mi espalda y romperla con una brutalidad incomparable.

Mordí mi labio inferior capturándolo con fuerza entre mis labios. Mirando hacia atrás observé cómo se quitaba aquella camisa blanca, sacándola por la cabeza para dejar al descubierto aquel trabajado cuerpo. Su abdomen se contrajo cuando se inclinó hacia delante, azoto una vez más mi trasero con fuerza, pude ver la diversión en su rostro.

–Voy a mostrarte lo bueno que es satanás en la cama, incluso serás tan descarada que le suplicaras a Dios que no me detenga.

No entraré al reino de los cielos, Dios?

𝐒𝐚𝐭𝐚𝐧| ᴊᴊᴋDonde viven las historias. Descúbrelo ahora