Caminos entrelazados

6.

—¡DAGUR DAGUR HEY HEY HEY!

Narra Heather

Como siempre, mi hermano con sus entradas dramáticas, aunque esta vez fue en el mejor momento.
¡UN SEGUNDO! Se hizo un tatuaje ¡Sin mi!, me prometió que la próxima vez se haría un tatuaje combinado conmigo, no es justo.
Ya no hay hermanos, solo desconocidos desquiciados.

Buen momento para enojarte por una estupidez Heather, me di una cachetada interna.

—Llegó su Berserker favorito.

Para colmo, llegó en su dragón, a Berk, la aldea matadragones. Demasiado oportuno.

Paró justo a un lado de nosotros y me abrazó, ignorando todo el escándalo que recién hizo.

—Pensé que te había pasado algo hermanita.

—Dagur, que sorpresa tenerte aquí ¿Qué ocurre?—Estoico parecía tan sorprendido como todos en ese salón.

—¿No es obvio? estaba preocupado por mi hermanita y mi hermano.

—¿Hermano?

—Si, el es...

—Hans—dijo Hipo rápidamente.

Le di un codazo a mi hermano para que nos siga la corriente, solo queríamos salir de ese lugar lo más pronto posible.

—¿Cómo nos encontraste Dagur?—al parecer Hipo sentía lo mismo que yo.

—Cizalladura fue hacia mi, estaba lastimada de una pata.

—¡¿Qué?!

Salí corriendo inmediatamente de ese lugar, no sabía donde estaba Cizalladura así que comencé a gritar su nombre frenéticamente en la plaza de la aldea.
Sea quien sea que haya lastimado a mi dragón, no saldrá vivo.

Narra Hipo

Me acerqué a Dagur y le susurre en el oído.

—Voy por ella, no quiero que cometa una locura.

Salí corriendo de el gran salón, encontré a Heather cerca del ruedo abrazando a cizalladura, estaba llorando.
Oh por Thor, esto es malo, la última vez que vi algo parecido fue cuando casi pierde a cizalladura.
Me acerqué caminando a ella y la abracé como pude.

—Hey, Heather no llores, Cizalladura está bien, yo estoy aquí, ambos estamos bien, solo es un rasguño en su pierna, es fuerte, se recuperará.

Heather se volteó y me abrazó y le di pequeñas palmadas en su espalda.

—Shh, tranquila todo está bien—le di un beso en su frente y me acerqué a Cizalladura.

Pareciera que ella estaba llorando por una tontería pero la verdad es que ha pasado por muchas cosas,como su padre o por lo de Cizalladura, aunque esa es una historia para después.

—Mira, no es nada malo, solo un pequeño rasguño.

Luego de un rato me di cuenta que los chicos nos estaban mirando.
Patapez se acercó corriendo y miró asombrado al dragón.

—¡Oh por Thor es un látigo afilado!, sus espinas son como los libros las describían, ¡es tan atemorizante!

Patapez estaba qué se moría y yo casi no me aguantaba la risa.

—Se llama cizalladura—les dije—. ¿Quieren tocarlo?—todos me miraron asustados.

—¿Explota cosas?—preguntó Brutacio con una sonrisa.

—Supongo que si.

—¡Yo primero!

—¡No, yo voy primero!