El anhelo de nuestro amor

Capitulo 6.- Impulso

Al levantarme noté que Luke no estaba en su cama. Un escalofrío recorrió mi espalda mientras la preocupación me invadía. ¿Dónde podría estar?.

"¿Estás bien?" Escuché la voz de Luke detrás de mi. Me di la vuelta y lo encontré de pie en la puerta de su habitación, mirándome con preocupación.

"Sí, solo estaba reflexionando sobre algunas cosas", respondí, tratando de ocultar mis pensamientos turbados.

Luke se acercó y puso una mano reconfortante en mi espalda. "Si alguna vez quieres hablar sobre lo que te preocupa, estoy aquí para escucharte, ¿de acuerdo?"

Asentí con gratitud. "Gracias, Luke. Significa mucho para mí tener a alguien en quien confiar."

Luke me sonrió cálidamente. "Somos amigos, ¿verdad? Los amigos están ahí para apoyarse, pero bueno, vamos apúrate a darte un baño o llegaremos tarde al hospital"

Yo le sonreí un poco y hice lo que me dijo, cuando termine de bañarme, Luke junto conmigo y sus amigos desayunamos todos juntos, posteriormente fuimos al hospital, una vez ahí me dieron un traje que tendría que utilizar y me encargaron estar vigilando en una zona.

"Muy bien, estaré checando pacientes, espero que tengas un buen día" dijo Luke al verme ya asignado en un lugar con una sonrisa cálida.

"Gracias, pero tranquilo, lo voy hacer exelente" le sonreí con ligera arrogancia y el soltó una pequeña risita para después irse.

El día transcurrió con normalidad, por alguna razón llamaba bastante la atención, y creo que se notaba cuando me aburría porque una enfermera que recientemente había ingresado, al menos eso me dijo Luke, me hacía plática siempre que podía.

En un momento cuando me encontraba hablando con ella pude senti la mirada de Luke que observaba la escena desde la distancia, no parecía muy cómodo con la situación. Noté que fruncía el ceño. En un momento la enfermera se fue y Luke se acercó a mi.

"Ya es hora de tu descanso, hay que ir a comer juntos" dijo Luke aunque con un tono menos amable de lo normal.

"Claro", respondí con una sonrisa, y juntos nos dirigimos a las escaleras. Sin embargo, antes de salir de ahí, me detuve, queriendo confrontar la situación.

"¿Por qué no vienes?" El me miro con extrañeza al ver que me quedé parado.

"¿Que tienes?" le pregunté con una sonrisa juguetona, acercando mi rostro al suyo.

"No entiendo porque preguntas..." El evitó mi mirada mientras evadía la pregunta.

"¿Es por aquella enfermera que evitaba que muriera de aburrimiento?" Al parecer tuve razón porque Luke se quedó callado.

El ambiente se llenó de un tenso silencio mientras Luke no respondía. Decidí actuar en ese momento. Puse mi mano en la mejilla izquierda de Luke y suavemente hice que me mirara.

"¿Que estás...?" , susurró Luke, y noté cómo su rostro lentamente se volvía rojo.

La cercanía con Luke, su rostro y esos ojos brillantes, me hicieron sentir una atracción incontenible. Por un momento, nuestros labios estuvieron a punto de tocarse, y sentí una mezcla de emoción y nerviosismo.