El anhelo de nuestro amor

Capitulo 5.- Sentimientos despertados

Luke y yo continuamos riendo y charlando mientras regresábamos al departamento. Al llegar, nos sorprendió encontrar que sus amigos, Eileen y Caleb, habían preparado la cena.

"Vaya, parece que se volvieron buenos amigos", comentó Eileen con una sonrisa mientras ponía los platos en la mesa.

"Y a nosotros nos dejan solos solitos", añadió Caleb en tono juguetón, lo que provocó nuevas risas en el ambiente.

La cena transcurrió en un ambiente alegre, y Caleb propuso después jugar un juego de mesa. Aunque al principio me mostré reacio, finalmente acepté la invitación de Luke.

El tiempo pasó volando mientras jugábamos y Luke nos iba ganando, aprovechando sus habilidades estratégicas.

"¡Paga, esa es mi propiedad!" exclamó Luke con una gran sonrisa, mientras Eileen pagaba la renta del lugar y se tiraba al piso en señal de derrota.

"¡Nooo, quedé en bancarrota!" Eileen dramatizó, y todos reímos ante su actuación.

Después de pasar un tiempo divertido jugando al juego de mesa, finalmente terminamos la partida con Luke como el ganador indiscutible. Todos nos reímos por las ocurrencias y situaciones cómicas que surgieron durante el juego.

"¡Luke, eres un tramposo!" bromeó Caleb mientras recogía las piezas del juego.

"¡Solo soy un estratega muy talentoso!" respondió Luke, riendo junto a nosotros.

Después, Luke y yo nos dirigimos a su habitación. Él se sentó en la cama, mirando cómo el cielo azul se tornaba naranja con ciertos toques de rojo, indicando la llegada del anochecer.

"Sabes..." Dijo Luke mientras seguía absorto en el atardecer. Sus palabras captaron toda mi atención, y lo miré con interés, esperando escuchar lo que tenía que decir. "Cuando miro el atardecer, recuerdo la primera vez que vi tus ojos, esos dos colores tan opuestos combinados en una sola mirada, como si dos mundos se unieran", expresó con un tono reflexivo.

Sus palabras resonaron en mi interior, creando una cálida sensación en mi pecho y provocando una extraña mezcla de nerviosismo y emoción. Parecía que Luke estaba expresando algo más profundo y significativo de lo que yo esperaba.

"Creo que quedaste flechado con mi mirada", respondí en tono bromista, tratando de ocultar las emociones que sus palabras habían despertado en mí.

Sin embargo, en lugar de reír o seguir con la broma, Luke se puso nervioso y sus mejillas se colorearon con un tono rojo brillante. "¡No es lo que crees!" se apresuró a decir. "Solo que nunca había visto un color de ojos tan único..."

Nuestros ojos se encontraron en un instante, y en ese momento pude ver la sinceridad en su mirada. La conexión entre nosotros parecía intensificarse, y mi interior latía con fuerza mientras luchaba por encontrar las palabras adecuadas.

"Luke..." murmuré suavemente, sintiendo que la verdad estaba a punto de salir de mis labios.

Pero antes de que pudiera decir algo más, Luke desvió la mirada y se puso de pie. "Tal vez deberíamos ir a dar otro paseo", sugirió rápidamente, tratando de romper el momento de vulnerabilidad.

Asentí, comprendiendo que ambos necesitábamos un momento para procesar lo que estaba sucediendo entre nosotros. Salimos del departamento y caminamos en silencio por el parque, bajo la tenue luz de la luna.

La atmósfera se llenó de una tensión silenciosa, pero al mismo tiempo, sentí que nuestra conexión se fortalecía con cada paso que dábamos juntos. Había algo especial entre nosotros, algo que no podíamos negar.

El viento soplaba suavemente, mientras mis pensamientos giraban en torno a Luke y los sentimientos que había despertado en mí. Quizás era hora de enfrentar la verdad y revelar mi verdadera naturaleza a Luke, sin importar las consecuencias. Era un riesgo, pero tal vez valía la pena para poder estar más cerca de él.

Al regresar al departamento, Luke se preparó para acostarse a dormir, mientras yo me quedaba mirando el techo, perdido en un torbellino de emociones que él había despertado en mí. A pesar de que estos sentimientos eran nuevos y desconcertantes, no deseaba que simplemente desaparecieran.

Mis pensamientos me llevaron a recordar a mis padres, dos seres tan diferentes pero profundamente enamorados. Cuando era solo un pequeño híbrido, mi madre me explicó una sensación similar a lo que yo estaba experimentando: 'amor'. Aunque había oído hablar de ese sentimiento, no lo había sentido antes, ya que los seres divinos rara vez lo experimentaban. Era algo más común en los humanos debido a su vida corta pero intensa.

Pero allí estaba yo, un ser híbrido atrapado entre dos mundos, sintiendo algo que nunca pensé que experimentaría. ¿Era posible que alguien como yo, con mi naturaleza divina y demoníaca, pudiera enamorarse? La idea misma parecía imposible y, sin embargo, no podía negar lo que estaba sintiendo en mi.

Mientras continuaba reflexionando, una parte de mí deseaba confiar en Luke y contarle la verdad sobre mi verdadera identidad. Pero también tenía miedo, miedo de que al hacerlo, lo pusiera en peligro o que él no pudiera aceptar lo que era.

...

"¡No quiero ir, mamá! ¡Los niños ángeles me caen mal!" exclamó un muy joven Dayron, resistiéndose a la idea de ir a aprender sobre su labor como ángel.

"Dayron..." su madre se agachó a la altura del pequeño y le sonrió de forma cálida. "Lo sé, pero al menos hay que intentarlo", le arregló el cabello, ocultando los pequeños cuernos de demonio de Dayron. "Luces como un ángel."

"No es cierto..." Dayron le mostró su ojo color carmesí y desplegó sus alas, con plumas negras filosas en los extremos y pequeños cuernos en ellas donde el ala se doblaba.

"Pero eso es fácil de arreglar, cariño." Su madre puso su mano en el ojo de Dayron, haciéndolo temporalmente azul, al igual que sus alas, haciéndolas parecer de ángel.

Finalmente, Dayron accedió a ir, pero antes de irse dijo: "Tengo un mal presentimiento". Ese día transcurrió con normalidad, y en un momento, Dayron se encontraba jugando con otros niños ángeles cuando uno de ellos notó algo inusual.

"Ey, tienes algo en el cabello", el niño trató de quitarlo, y Dayron no reaccionó a tiempo. "¿Qué es esto?" Descubrió los pequeños cuernos de Dayron. "¡Un demonio!" Gritó el niño con desprecio y temor en su voz, retrocediendo rápidamente.

Dayron huyó lo más rápido que pudo, advirtió a su madre, y ambos escaparon al infierno, donde el padre de Dayron los estaba esperando. La seguridad que les brindo su padre les proporcionó consuelo, pero Dayron sabía que no podría escapar de su naturaleza híbrida por mucho tiempo.

...

Poco a poco me fui despertando pensando en el sueño que había tenido de un suceso que hace mucho tiempo paso.

"¿Acaso se me volverá costumbre dormir?" Suspiré y me quedé reflexionando por un momento. ¿Y si Luke reaccionara de manera similar cuando descubra que soy un ser divino y, además, un híbrido? La incertidumbre y el temor se entrelazaban en mi mente, mientras una pregunta persistente me acosaba: ¿Podría Luke aceptarme tal como soy?

Me levanté de la cama con esos pensamientos todavía rondando mi mente. Me sentí un poco inquieto ante la idea de revelar mi verdadera naturaleza a Luke. Aunque la conexión que había surgido entre nosotros era especial, aún me encontraba lleno de incertidumbre y temor.

Al levantarme noté que Luke no estaba en su cama. Un escalofrío recorrió mi espalda mientras la preocupación me invadía. ¿Dónde podría estar?.