Felix despertó poco tiempo después con un delicioso sentimiento de calidez y seguridad. Levantó la cabeza y se dio cuenta de que todavía era un lobo y que él y Chan se habían quedado dormidos en el centro del claro.
Chan era grande para un lobo. Felix sabía, sin embargo, que el tamaño de tu lobo no siempre se comparaba con el tamaño como hombre. Él era un buen ejemplo. Felix estaba debajo de la altura promedio de un hombre, pero como un lobo, estaba casi a la par con el promedio de la manada. Había sido lo mismo en su anterior manada. Felix se preguntaba si su tamaño tuvo algo que ver con el hecho de que el destino sabía que iba a ser el compañero de un Alfa.
Chan era un lobo magnífico, Felix pensó mientras corría sus ojos sobre el cuerpo dormido. Era grande, con una capa gruesa, de color marrón oscuro que mantendría a Felix caliente en las noches de invierno cuando se quedaran dormidos juntos, como esta noche.
Felix se inclinó y comenzó a lamer el hocico de Chan. No pasó mucho tiempo para que esos profundos ojos de color chocolate se abrieran y le miraran. Dio un paso atrás para permitirle levantarse. A pesar de que no podían comunicarse por el momento entre sí en esta forma, Chan parecía entender que Felix pensaba que era hora de irse a casa.
La pareja de lobos hicieron su camino de vuelta al vehículo solitario en el aparcamiento. Felix se sentó en cuclillas y observó como el magnífico animal frente a él volvía a ser el hombre más sexy que había visto nunca.
Pensando en su forma humana, Felix comenzó el cambio. Al estar de pie desnudo sintió el frío que no percibió como lobo. Chan le tendió la ropa, sin preocuparse por sí mismo.
—Vamos, cariño. Nos vestimos y luego nos vamos a casa.
—Me parece bien, aunque no me gusta que cubras ese sexy cuerpo tuyo.
Felix sonrió a Chan cuando él tomó su ropa y comenzó a vestirse.
Sonriendo Chan le dijo, —Puedes desvestirme tan pronto como lleguemos a casa.
—¿Lo prometes?— Felix aún no estaba seguro de si podía seguir adelante con todo, pero sabía que quería probar esta noche un poco más.
—Sí, cariño, te lo prometo. Vamos a seguir adelante.
Después de vestirse, Felix se puso su chaqueta de cuero. Todavía no podía creer que Chan la había comprado para él. Tirando del cuello hacia arriba, Felix respiró profundamente, el olor del cuero suave que lo rodeaba le llenaba sus pulmones.
Abriendo los ojos que no se había dado cuenta que los había cerrado, notando que Chan ya se había sentado en la moto y le esperaba con una sonrisa indulgente en su rostro.
Su rostro se llenó de rubor al ser capturado, Felix rápidamente cerró la chaqueta y se aseguró el casco antes de unirse a Chan en la parte trasera de la moto, acurrucándose y envolviendo sus brazos alrededor de su cintura.
El viaje a casa fue más rápido de lo que a Felix le hubiera gustado. Ya estaba duro y adolorido cuando Chan entró en el garaje. Molía su polla contra el culo de Chan, gimiendo y moviendo las manos por el cuerpo de Chan.
—Por mucho que queramos hacer el amor en mi motocicleta, me gustaría que esta primera vez pudiéramos ir dentro, donde estemos más cómodos, ¿Qué piensas?—
Felix bajó la cabeza contra la parte posterior de Chan, respirando profundamente a través del casco abierto, tratando de recuperar el control de su cuerpo, asintió con la cabeza antes de tirar hacia atrás para quitarse el casco y la chaqueta. Cuando se bajaron de la moto envolvió los brazos alrededor del cuello de Chan y buscó un beso.
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Compañero Determinado - CHANLIX
Fiksi PenggemarLibro Nº 02 Felix Lee pasó un infierno. Después de haber sido drogado y violado, ser repudiado por sus padres y su manada fue sólo la guinda del pastel. Todo lo que quería era ver a su mejor amigo de nuevo y encontrar un lugar donde podía curar sus...