Un spiderman diferente

Capítulo 12: Héroe

Luego de recoger sus cosas Richard reviso su teléfono dándose cuenta de que tenía un mensaje de su madre.

"Tenemos visitas, espero que llegues bien vestido" 

El joven no tardó en darse cuenta de lo que le quería decir, por lo que ésta vez, en lugar de entrar por la ventana de su habitación como de costumbre se quitaría el traje y entraría por la puerta principal. Realmente no sabía que haría sin ella, a él aún se le escapaban ese tipo de detalles. Una vez listo decidió entrar preguntándose quienes eran dichas visitas.

—Qué bueno que llegaste Richard—comentó Jolyne intentando sonar lo más casual posible—Te buscan—el castaño notó que se trataban de la Señora Simers y su hija.

—Hola querido, ¿como has estado?—preguntó una mujer algo mayor qué su madre, de cabello rojizo—Lamento molestarte pero tengo otro pequeño trabajo para ti—agregó señalando una laptop colocada en la mesa.

—Ya le dije que debería conseguirse una nueva—comentó la joven.

—No hay problema, puedo revisarla, quizá no sea algo muy complicado—respondió Richard mientras tomaba el aparato.

—Catlin, ve con el, quizás así aprendas a arreglarlo tu cuando me vuelva a fallar—la mencionada puso los ojos en blanco unos segundos y obedeció.

—En mi defensa, se me da mejor programar que reparar—comento la chica en cuanto bajaron al sótano.

—Es lógico, tiene más salida laboral—contestó el castaño intentando aliviar la tensión pues era la primera vez que interactuaban más allá de un saludo.

—Si.....bueno, según mi madre, tu eres bueno en ambas cosas—bromeó la pelirroja—en serio, creo que si tú madre se descuida va a adoptarte.

—Se llevarían una decepción, soy más torpe de lo que parezco—respondió el castaño riendo mientras dejaba la computadora sobre la mesa y tomaba su destornillador para abrirla—bien, veamos que tenemos aquí —murmuró observando el interior del portátil—algunos de estos componentes ya sobrepasaron periodo de vida útil.

—¿Tendré que convencerla para que cambie por fin ese pedazo del basura?

—Probablemente, aunque puedo cambiar algunos de ellos con lo que tengo por aquí—respondió Richard buscando entre sus cosas lo que necesitaba—no será una solución definitiva pero le dará tiempo hasta que junte el dinero para comprarse una nueva.

—Lo más seguro es que se haga con una de segunda mano, pero al menos será mejor que este fósil—el castaño dejó los nuevos componentes en la mesa junto a unas pinzas y una pequeña pistola soldadora. 

—Disculpa ¿ves esos anteojos de allí?—dijo señalandolos sobre una estantería—¿podrías sostenerlos frente a mi? Necesito presicion para esto—la  chica asintió, colocándolos entre Richard y la computadora como si fuera un lente mientras el castaño, con suma delicadeza, retiraba los componentes obsoletos y los reemplazaba por unos funcionales—Bien, eso es lo que puedo hacer por esta chica de aquí—comentó mientras se la entregaba.

Ambos volvieron a subir encontrándose con sus respectivas madres hablando de un asunto en el que claramente no estaban de acuerdo.

—¿Qué sucede?—preguntó Catlin.

—Nada, solo que Jolyne sigue siendo demasiado optimista a veces—respondió la señora Simers.

—O quizá tu eres demasiado pesimista Edna—replicó la mujer con una leve risa a lo que la mencionada rodó los ojos.

—Vamos, es un hecho de que los últimos verdaderos  héroes fueron los de nuestra generación—contestó la señora Simers llamando la atención de Richard quien ya podía suponer de que hablaba.