EL TERCER SALVATORE

HAZ TÚ MOVIMIENTO.

—Si que has estado ocupado —comento mientras veo el pizarrón que Damon tiene en la habitación de Stefan —.¿Qué es todo esto? —cruzo los brazos.

—Todo lo que he podido averiguar sobre la carrera criminal de Stefan con Klaus —responde Damon.

—Lo has estado rastreando muy bien, te felicito Damon. No eres tan bruto.

—¿No tienes nada qué hacer?

—No, ahora que lo dices no tengo nada que hacer —le contesto muy tranquilo.

—Eres un...

Escucho unos pasos a mis espaldas.

Doy vuelta y veo entrar a una rubia a la habitación.

—¿Qué estás haciendo aquí Barbie? —le pregunta mi medio hermano.

—Mi madre quiere que le hables —le dice.

—¿Hay una nueva pista?

—Un ataque animal en Menphis —responde la muchacha de cabello dorado —. Es el tercero en está semana en el estado de Tennessee.

—Muy bien, le haré una llamada.

La chica voltea hacia mi.

—Oh, hola —se me acerca y se coloca delante de mi —. Tú debes de ser el hermano secreto de Damon y Stefan. Elena ya nos ha puesto al tanto sobre tú llegada tan inesperada.

—Hola, soy Ezra.

—Caroline Forbes, soy vampiro también.

—Es un placer conocerte Caroline —le digo —. Y con lo que dijiste hace un momento del ataque animal ¿Están seguros de qué puede ser Klaus?

—No estamos seguros, pero eso no quiere decir que no sea él —responde ella —. No lo podemos dejar al azar.

—Ezra —Damon me llama y yo volteo hacia él —. Ya que no tienes nada que hacer ¿Por qué no le ayudas a la Barbie aquí presente con la fiesta qué se hará está noche aquí? —camina hacia la salida —Así no me estorbas.

—Damon yo...

Él se va de la habitación sin más.

—Demonios —gruño —. Idiota.

—Y veo que lo de la mala relación era cierto.

—¿También te lo contó Elena?

—Un poco —dice Caroline Forbes.

—Damon es...—aprieto mis puños con fuerza —.¡Carajo!

—Creo que necesitas un poco de aire. Ven conmigo —me dice.

Me toma de la mano derecha, me jala y juntos vamos hacia la salida de la habitación.

Abandonamos el cuarto de Stefan y caminamos directamente hacia las escaleras.

—¿De qué fiesta estaba hablando Damon?

—De la de Elena.

—¿Es su cumpleaños?

—Si, hoy cumple dieciocho años —responde la rubia —. Elena ha tratado de evitar su cumpleaños desdé lo de Klaus y Stefan. Pero no podemos dejar pasar su cumpleaños cómo si no fuera nada importante. Solo se cumple dieciocho una vez en la vida y se tiene que festejar ¿No lo crees?

—Si, estoy de acuerdo señorita Forbes. Un festejo cómo el cumpleaños número dieciocho no se puede dejar pasar cómo algo que no tiene importancia.

Llegamos a las escaleras y las comenzamos a bajar.

—Ahora tengo que ir al Mystic Grill, tengo que ir a recojer unas cosas y después regresaré para decorar la casa ¿Quieres venir conmigo?