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Séptimo mes.

La reciente noticia del género de los bebes me trajo a la familia completa felicidad. La reunión familiar no se hizo esperar, prepararon una gran barbacoa repleta de diferentes cortes de carne y vegetales asados para que el Omega pudiera comer sin problemas.

Los mayores fueron quienes se encargaron de organizar todo y ellos junto a ambas familias pasaron el día repleto de alegría y emisiones. Jimin aún sentía unas inmensas ganas de llorar por sus cachorros, no podía creer que su predicción se cumpliera y Jungkook ni que hablar de él. El Alfa se había pasado desde que llegaron a casa festejando y planeando que les enseñaría a los cachorros ni bien comenzaran a caminar.

Lo mejor de la tarde fue el postre que la señora Park preparó para ambas familias y del cual no quedó ni las migas en el bandeja. Sin duda alguna aquella reunión trajo alegría y felicidad a la pareja y también a quienes los acompañaban.

El patio de casa fue adornado por muchos globos de diferentes tonos y la mesa en la que se llevó a cabo el almuerzo fue decorado por la última imagen de la ecografía que Jimin se había realizado el día anterior. Simplemente no tuvo palabras para agradecer lo generoso que fueron todos con el, sus cachorros y su alfa.

Regresando a la actualidad, Jimin se encontraba ordenando un poco su oficina. Tenía mucho trabajo que realizar y su mañana comenzó desde muy temprano pues no quería tardar en terminar con sus pendientes. El Alfa aún permanencia dormido en la habitación, no quería despertarlo pues aún era temprano para su ingreso, además la noche anterior se quedó despierto hasta tarde por lo cual dormir un rato más no le vendría mal.

Echó un suspiro tras terminar de ordenar algunos folders que su jefe le había enviado unos días atrás. Bebió de su taza de té y llevó a su boca unas galletitas de agua que su madre le regaló para que no consumiera muchos azucares en su desayuno. Desde que las probó se volvieron sus preferidas.

Pasó un buen rato tecleando el informe que presentarían en unos días para cerrar un contrato. Se sentía pleno de poder continuar con su trabajo desde casa, le hacía sentir menos inútil pues no podía hacer más nada que descansar, comer y dormir, estando en casa.

El ruido de pasos le hizo quitar la mirada del computador, sonrió en cuánto vió a su lindo alfa bostezar y desordenar su cabello mientras se acercaba para rodearlo con sus brazos. Arrodillado delante de él comenzó a acariciar su abultado vientre mientras el jugueteaba con su cabello ya un poco ondulado por el largo de este.

-Hola cariño, desperté y no te encontré en la cama-Dice el pelinegro besando castamente sus labios -Es temprano para estar sentado aqui-Susurra sobre sus labios -¿No sientes frío?.

El Omega niega picoteando una vez más los labios del alfa.

-Quiero terminar con los pendientes, odia tener trabajo acumulado.-Dice tras separarse del pelinegro -¿Quieres que prepare tu desayuno? Tomaré un descanso mientras te duchas.

-Gracias, podré disfrutarte un rato y a los cachorros antes de irme.

-Anda ve, se te hará tarde y no podrás desayunar con nosotros.-Señala el Omega saliendo de la habitación seguido del alfa quien le propina una leve nalgada que le hace deter sus pasos y brindarle una filosa mirada, acción que hace reír al contrario quien se dirige sin más hacia el baño.

Jimin se dirige por el contrario hacia la cocina pues quiere aprovechar que su alfa está en casa para prepararle un buen desayuno y pasar tiempo con él antes de que vaya a trabajar. Decide prepararle un delicioso café negro con tostadas y huevos revueltos, además de trozos de frutas frescas picadas para que no fuera tan pesado.

[Trillizos Jeon]_KOOKMIN_Donde viven las historias. Descúbrelo ahora