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Narrador omnisciente

¡Bájame Han! Esto no es gracioso. Yo no quiero esto - amenazó intentando llorar nuevamente.

Lo sentimos Minho pero es la única manera en la que podemos ayudarte. Además te cuidaremos muy bien y serás nuestro pequeño consentido. - sentenció mientras le tocaba las mejillas.

¡Yo no quiero esto Chan-hyung! - Dijo de manera brusca alejándose de su toque.

Bueno pues entonces deberás de poner de tu parte, Minho. Solo lo hacemos para ayudarte. No nos estamos burlando de ti. - Terminó la conversación Changbing.

Llegaron al comedor y se sentaron en sus respectivos lugares. A minho lo colocaron a regañadientes en la pequeña silla alta que habían comprado anteriormente. Está claro que estuvieron forzejeando para sentarlo allí.

¡Ya basta Minho! Siéntate aquí. - Habló Han mientras intentaba sentarlo en la silla.

¡Noo! ¡No quiero esta fea silla! Yo ya soy mayor y me puedo sentar en las sillas grandes. - Quejumbroso se quejó el Castaño, intentando escapar.

Basta hyung. No haga el trabajo más difícil. Solo siéntate aquí y ya todos comeremos - Se quejó el maknae. Estaba hambriento, de echo todos lo estaban no habían comido nada debido a que estuvieron ocupados con la habitación del little.

Cómo respuesta obtuvo un fuerte y severo: "NO", por parte del segundo mayor.

¡Bueno me cansaste! Te vas a sentar aquí - Dijo Changbing utilizando más fuerza de lo normal - y vas a comer todo lo que te demos, ¿oíste? - no recibió respuesta, pero logró sentar a minho en su silla.

Te he preguntado algo, Minho. - Dijo con tono de advertencia el pelinegro de fuertes brazos.

Si~ Changbing - esto último casi ni se escuchó, pero fue lo suficientemente fuerte para que el pelinegro lo escuchase.








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Pasó aproximadamente, 1 hora desde qué terminaron de comer. Ya todos habían ordenado la mesa y lavaron y secaron muy bien los platos.

En este momento se encontraban Han e Hyunjin en el sillón sentados junto con un muy enojado Minho sobre el regazo del primer mencionado.

Porqué tienes esa cara bebé? - preguntó Hyunjin, pero no obtuvo respuesta.

Oh vamos. ¿Te has enojado con nosotros bebé? - está vez habló el rubio, que comenzó a peinar los cabellos del nuevo bebé - así que es así. ¿Te enojaste con nosotros por sentarte en esa silla, mhnm?

¡No quiero hablar con ustedes! Estoy muy molesto. A nuestro Manager no le va a gustar nada lo que están haciendo. Además en pocas semanas tendremos que presentar nuestro nuevo comeback. - Está vez sonrió triunfante pensado que el manager está vez lo apoyaría a él. Y tal vez convenza a los chicos, que lo que estaban haciendo era una ridícula idea.

Oh, claro que no bebé. Yo personalmente hablé con nuestro Manager sobre tú situación y está totalmente de acuerdo - Sentenció el líder mientras caminaba hacia ellos y veía como el bebé borraba la sonrisa de su rostro. - Y por el nuevo comeback, no te preocupes tendremos vacaciones por largos meses. Así que no hay problema que te relajes y nos dejes cuidarte - sonrió triunfante.

Minho abrió los ojos al escuchar lo que había dicho el líder. Estaba perdido. No quería ser un bebé y la última oportunidad se le fué por picada sobre un cañón. Ahora no sabía que hacer para intentar safar de las locas ideas que pasaban por la mente de sus miembros.

Escucha bebé, hoy no te bañaremos porque ya es muy tarde. Asi que, subiremos a tu nueva habitación para que la puedas ver y te cambiaremos. - Dijo mientras se levantaba y colocaba a Minho sobre sus caderas.

Ya verás que te va a encantar tu nueva habitación. - le siguió el de cabellera rosa.

Al llegar, abrieron la puerta y Minho vió lo que habían hecho con su antigua habitación.

¿Y? ¿Te gusta bebé? Todos ayudaron a decorarla. Nos llevó toda la tarde. - se adentro a la habitación el rubio.

Al ver que no obtenían respuesta, miraron al castaño. Tenían miedo de que no le haya gustado.

Si me gusta, está muy linda - respondió por lo bajo.

Que bueno que te haya gustado bebé. Ahora te cambiaremos y luego te acostaremos. - confesó el rubio.

Yo iré rápidamente a hacer un biberón, enseguida vuelvo - sentenció el líder para luego salir de aquella habitación.

Han acostó a Minho sobre el cambiador y cuando estaba apunto de sacarle el conjunto, el castaño se quejó.

¡No! Yo me puedo cambiar solo. No hagas esto por favor.

Escucha Minho, no tienes porque avergonzarte. Te cambiaremos todos los días además. Estamos para apoyarte y ayudarte - Respondió sereno el de mejillas.

No quiero Han. Por favor, esto es muy vergonzoso para mí. Déjame que me cambie yo solo. - suplicó mientras alejaba las manos del rubio de su cuerpo.

No bebé lo siento pero no puedo hacer eso. Ahora eres un bebé y a los bebés los cambian. Así que no hagas berrinches y deja que te cambie, prometo que será rápido.

Al decir esto, Han abrió la parte baja del conjunto y comenzó a sacar las piernas del castaño.
Pero este no se quedaba quieto y a Jisung ya se le estaba yendo la paciencia. Minho no colaboraba para nada, es más hacía el trabajo más difícil.

¡Ya basta LEE MINHO! - gritó Jisung en un intento de parar con los bruscos movimientos que el castaño hacía. - quédate quieto.

¡No quiero esto! ¿En qué idioma debo decírtelo? - enojado comenzando a patalear más fuerte.

¡BUENO BASTA! has colmado mi paciencia - dijo mientras volteaba al castaño, para dejar caer sobre su trasero dos nalgadas fuertes. - no quisiste por las buenas, será por las malas.

Jisung agarró las manos de Minho y las ató en la cabecera del cambiador. Luego agarró ambas piernas y de igual forma las ató. Ahora ya nada impediría cambiarlo.

Minho luego de esas nalgadas, solo se quedó en silencio mientras soltaba pequeñas lágrimas. Estaba muy cansado. Había sido un día muy agotador, por lo que cuando Han le ató sus extremidades ya no hizo nada para safarze de su agarre.

Le saco el pijama y colocó talco y crema antirosaduras, después agarró un pequeño pañal de animales y se lo puso. Se dirigió hacia el ropero donde sacó un tierno pijama de conejitos. Se veía muy adorable.

¡Listo bebé! Ya estás. Ahora solo hace falta que Chan hyung venga con tu biberón para que descanses mejor.

Ya estoy aquí. Toma Jisung, me daré una ducha. Que descanses, buenas noches bebé - le entregó el biberón al rubio y luego de eso se fue.

Tomó la botella, desato al bebé para luego tomarlo en brazos, para dirigirse hacia la silla mecedora. Al llegar se recostó suavemente, colocando a Minho sobre su regazo.

¡Toma bebé! Bebélo rápido así vamos a dormir. - dijo acercando el biberon a sus labios.

¡No quiero esa fea leche!

Debes tomarla. - dijo mientras forcejeaba con el menor.

Luego de un tiempo el castaño se rindió y abrió los labios para beber de la tibia leche.
Cerró sus ojos disfrutando del sabor. No sabía para nada mal.

Luego de algunos minutos ya se encontraba profundamente dormido sobre su regazo. Han lo levantó con cuidado y lo dejó sobre la gran cuna.

Buenas noches bebé, que descanses - le dió un beso en la frente y sigilosamente salió de la habitación.






Perdón por no actualizar esta historia. Pero como dice el dicho mejor tarde que nunca.

Espero que les haya gustado, cualquier cosa me consultan.



Aventuras en pañales ° Minho - Skz-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora