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Bueno chicos es hora de comer. -  Llamó el líder mientras dejaba la olla de comida en la mesa.

Todos los chicos se acercaron y se sentaron en sus respectivos lugares. Leeknow estaba a punto de sentarse en la silla cuando Hyunjin lo toma en brazos y lo alza para sentarlo en su sillita. Esto no le gustó a Minho así que comenzó a moverse.

¡No quiero aquí! - expresó con el ceño fruncido. Estiró sus manos hacia Hyunjin para que lo saque de allí.

Oh, no bebé. Tu debes quedarte en la silla. - Luego de decir esto se dirigió hasta su asiento.

El berrinche que Minho estaba pensando hacer quedó en el olvido cuando sintió su pancita sonar. Tenía mucha hambre, demasiada.

Bueno chicos, ya pueden comer. - Anunció el líder destapando la olla. Seungmin quién estaba sentado al lado del castaño le sirvió en su plato el kimchi y algunas verduras. El contrario comenzó a comer, tenía mucha hambre.






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¿Recuerdas nuestra promesa? - el pequeño asintió mientras veía su plato.

Pero a mí no me gusta el brócoli. - Confesó haciendo un puchero.

Ya todos habían terminado de comer, los menores juntaron los platos de los demás y comenzaron a lavarlos, mientras que el castaño estaba haciendo un puchero al ver que se tenía que comer el feo brócoli ese.

¿Lo has probado? - preguntó Félix obtuviendo una negación. - entonces cómo sabrás si te gusta, si nunca lo has probado.

Pruébalo cariño, si no te gusta lo puedes dejar de lado, pero has un esfuerzo. - le siguió Hyunjin.

Minho lo miró y luego dirigió su mirada hacia el plato, con la cuchara tomó un trozo del brócoli y se lo llevó a la boca. Rápidamente el sabor inundó sus papilas gustativas, le había encantado.

Comenzó a comer rápidamente bajo la atenta mirada de todos, quienes lo veían con una sonrisa.

Come más despacio, nadie te quitará la comida. - regañó cariñosamente Han  mientras lo miraba, el bebé asintió y siguió comiendo está vez más despacio.

Luego de terminar la cena todos estaban más que cansados. Jeongin apoyó sus brazos sobre la mesa quedándose dormido al instante, mientras que a todos los demás se les iban cerrando los ojos. El bebé ya estaba cabeceando con sus ojitos cerrados mientras aún masticaba de la comida.
Al ver que la mayoría estaba cerrando sus ojos se levantaron de la mesa y se fueron a sus habitaciones.

Jisung tomó a Minho y lo llevo a su cuarto. Al llegar lo dejó sobre el cambiador, esta vez no tuvo problema en cambiarlo porque el castaño ya se encontraba dormido, así que fue mucho más fácil.

Le puso un nuevo pañal y tomó un mameluco manga corta color azul, luego le colocó el chupete, viendo cómo Minho comenzó a succionarlo con rapidez.
Lo tomó en brazos y caminó hasta la cuna donde lo dejó allí luego de darle un beso de buenas noches.

Descansa cariño. - susurró para que el bebé no se despierte.










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Eres tan absurdo que ni siquiera puedes hacer bien este paso. - Le dijo Bangchan al castaño. Todos se encontraban ensayando para su nueva coreografía y a Minho por alguna razón era al que más le costaba.

Minho comenzó a removerse incómodo en la cuna, se movía de un lado a otro y pequeñas gotas de sudor comenzaban a caer por su cara. No le agradaba el sueño que estaba teniendo.

¿Sabes que? Porque no mejor te largas de este grupo. - Escupió con furia Jisung. El contrario enmudeció al escuchar ese comentario, estaba asombrado.

¡P-pero hyung! - Chilló desesperado

Pero hyung nada, hicimos muchas cosas por ti y así es como nos pagas. - Bangchan no estaba para juegos y el castaño ya lo estaba sacando de quicio.

¡YA BASTA! - Gritó mientras se sentaba en la cama.

¡Hey! ¿qué ocurre pequeño? - Han entro corriendo a la habitación cuando empezó a escuchar los gritos del bebé.

Minho al verlo estiró sus manitas hacia el, Han asombrado por el comportamiento del menor lo tomó en brazos.

Sueño Feo -  habló por lo bajo recostando su cabeza sobre el hombro de su cuidador.

Jisung se sorprendió cuando lo escuchó, su voz sonaba más aniñada y no había hecho ningún berrinche por tener el pañal puesto. Rápidamente se emocionó pues se había dado cuenta que el castaño ya había entrado en little space, no sabía cómo lo hizo, pero eso no importaba.

No pasa nada cariño, solo fue una pesadilla. - Susurró mientras comenzaba a caminar por toda la habitación, mientras que al mismo tiempo le acariciaba la espalda para tranquilizarlo.

Han decidió dejarlo en el pequeño corral que tenían en la habitación, donde estaban casi todos los juguetes del bebé. Le iba a preparar el biberón con leche tibia para que lo tranquilize y lo ayude a dormir.

Honnie al ver que su mayor lo había dejado en ese lugar solito comenzó a gimotear mientras lo miraba alejarse.

Minho se porta bien, no dejes a minho. - Chilló desesperado llorando.

No voy a dejarte bebé, vamos abajo. - lo tomó nuevamente en brazos y bajó a la planta baja.

Al llegar notó como Hyunjin y Félix estaban sobre el sillón mientras hablaban y se tomaban lo que parecía ser ¿Un té?

¿Qué paso? - Le dijo el pecoso mientras veía al rubio bajar las escaleras.

¿Qué hacen ustedes dos a las... - Miró su reloj en su muñeca- ¿¡4 de la mañana!?

No podíamos dormir y vinimos a hacernos un té de tilo. - Respondió con simpleza el pecoso.

¿Ya acepto por fin el little space? - Preguntó ilusionado Hyunjin.

No tengo idea de lo que pasó. Solo fuí a su cuarto porque había tenido una pesadilla y no sé cómo entró en little space. - Ambos chicos asintieron con la cabeza y siguieron hablando mientras terminaban su té.

Jisung paso de largo y caminó hasta la cocina donde, con mucha dificultad, preparó el biberón del castaño. Cuando lo tuvo listo se dirigió hacia la habitación del bebé.

Bueno bebé, toma. - Se sentó en la silla mecedora y dirigió el objeto hacia la boca de Leeknow, quién acepto gustoso la leche.

Una vez que terminó de beber, sus ojos comenzaron a cerrarse por el sueño. Han al notarlo lo dejó sobre la cuna.

Aquí - pidió con su vocecita algo baja cuando lo acostaron en su cuna.

No creo que entremos los dos cariño. - Minho puchereo sintiendo como, nuevamente, sus ojos se llenaban de lágrimas. El mayor al verlo lo tomó  en brazos y caminó hasta su habitación.

Ambos jóvenes se acostaron, el pequeño bebé al sentir el calor que desprendía el cuerpo de Jisung se pegó más a él, mientras en su manito tenía a su peluche favorito.

Aventuras en pañales ° Minho - Skz-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora