Me levanté a las siete de la mañana. Estaba cansada, ayer me quedé hasta tarde estudiando para el examen de hoy.Me cambié, me puse unos jeans con una camisa blanca, y como hoy había frío, me coloqué un cárdigan de color beige, y unos zapatos deportivos del mismo color.
Como ya les mencioné, hoy tengo examen: de Historia, Lenguaje e Inglés. Bueno... Espero que me vaya bien, estudié mucho para esto.
A las tres tengo que ir al mismo edificio de ayer, creo que para hacernos una prueba de si estábamos listos para una misión o algo así.
Ya sonó el timbre para ir a los salones, y con todos los ánimos del mundo fui al mío. Me toca Historia a primera hora, y nos entregaron el examen. Lo hice, y luego se lo entregué al profe.
Cuando sonó el timbre del receso fui a la cafetería, y me pedí una ensalada de frutas.
Cuando ya estaba yendo a una mesa, me tropecé con un chico. Esperen, su cara se me hace conocida. Y su cabello color cobrizo lo he visto en algún lado.
Pues claro, si es Eric Walter, uno de los chicos seleccionados para el equipo de los cazadores de fantasmas; no sabía que estudiaba aquí. Cuando salí de mis pensamientos, él me estaba ayudando a levantarme del suelo. ¡Mi pobre ensalada está en el suelo como yo!
-Dios mío, cómo lo siento -fue lo primero que dijo.
Me termino de sacudir los pantalones, y me quito una fresa en mi hombro.
-Me debes una ensalada de frutas -fue lo primero que dije.
-Oh, sí, claro, acompáñame -lo seguí de nuevo al mismo lugar en el que yo estaba hace dos minutos.
-Una ensalada de frutas -dijo, luego sacó su billetera y pagó la ensalada- Toma.
-Gracias -sonrío -. Oye, ¿tú eres uno de los chicos seleccionados para los cazadores de fantasmas? ¿Eric... Walter?
-Sí, y tú eres... ¿Abril Miller?
-Emm, no. Yo soy April Miller.
-Pues, casi igual -todos dicen lo mismo. Ya veo por qué el jefe se confundió. No me sorprende.
Eric me acompañó a la mesa, hablamos, y me pareció una persona encantadora, hasta se ofreció en buscarme y llevarme al edificio de ayer. Claro que le dije que sí, así no pago pasaje.
Cuando ya volví a mi salón me tocó Lenguaje y al final Inglés. Terminaron las clases a las dos de la tarde, luego partí para mi casita.
Llegué, me bañé, me vestí, y me puse unos jeans, una camisa negra de Taylor Swift, y unas vans negras de zapatillas.
Esperé a que llegara Eric, llegó a las dos y cuarenta y cinco en su carro Lamborghini color negro.
Me saludó y yo a él, entré al carro, y si era hermoso por fuera, por dentro era más que eso. Estaba sonriendo como boba, porque era la primera vez que me subía a este tipo de carro. Pero la sonrisa se me borró cuando Eric arrancó y mi cara chocó con el vidrio de al frente.
-Dios mío, cómo lo siento -dijo Eric tratando de ver como estaba. Está pasando lo mismo que en la cafetería. Genial.
-Me debes una cara -murmuro con tono divertido.
-Lamentablemente no puedo traerte una que sea tan hermosa como la tuya.
Vaaale. Lo admito, me sonrojé al instante.
-¿Estás coqueteando conmigo, Ericsito? -entrecierro los ojos.
-¿Ericsito? -frunce el ceño -. Si te estuviera coqueteando, cosa que es cierto, ¿cuál es el problema?
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El Fantasma del Cuadro © |✔️
RomanceÉl ya no quiere nada con ella, o eso es lo que dice. Por más decepcionado que esté; él la sigue amando. ¿Cómo se cura un amor que no llegó a ser del todo cierto? ¿Cómo se olvida a la única persona que estuvo contigo en los mejores momentos de tu vi...