Después de nuestra conversación, Cheryl me dejó descansar y salió de la habitación. Aunque sus palabras me habían tranquilizado un poco, pronto me enfrentaría a otro desafío: "el aburrimiento".
-¿Y ahora qué hago? Bueno, ni modo. No queda otra opción más que ver la televisión. ¡Madres, no hay ninguna televisión aquí! ¡Esto va a ser una pesadilla! -
Miré alrededor de la habitación del hospital, que parecía más un cubículo funcional que un lugar para recuperarse. Las paredes eran de un color blanco puro, y la luz de la mañana entraba por una gran ventana a la derecha, iluminando la austera decoración. Me pregunté quién había diseñado estas habitaciones sin televisores. ¡Una actualización debería estar en su lista de prioridades!
-¿Cómo puede alguien soportar esto? -, murmuré mientras miraba la pared blanca frente a mí.
Decidí que necesitaba una distracción, así que me puse a examinar la habitación en busca de cualquier cosa que pudiera usar para entretenerme.
El mobiliario era básico: una cama, una mesa con una silla, y una ventana que ofrecía una vista al jardín del hospital, pero para mi suerte con ambas piernas fracturadas no podía solo acercarme y ya, tenia que subirme a la silla de ruedas, sin embargo la ventana quedaba muy alta y me tapaba por completo.
Me resigne a quedarme en la cama, entonces miré la mesa junto a la ventana, donde había una revista vieja y un cuaderno.
-¡Eso es! - exclamé al darme cuenta de que la revista podría ser mi salvación.
Lo tomé con entusiasmo y comencé a hojearlo, esperando encontrar algo interesante. Para mi sorpresa, la revista estaba llena de anuncios y artículos aburridos, pero el cuaderno estaba en blanco.
-Perfecto, un lienzo digno para mis dotes de artista - me dije a mí mismo. Si no podía escapar de la habitación, al menos podría crear algo dentro de ella. Busqué en el cajón de la mesa y encontré un par de bolígrafos. Sin pensarlo dos veces, empecé a garabatear pero al cabo de unos minutos de nuevo estaba aburrido.
Sin nada que hacer, solo me puse a dar vueltas en la silla dentro de la habitación cuando escuché a alguien entrando.
-Ya vine, Nate -, dijo Cheryl al entrar con una expresión de alivio en el rostro.
-¡Cheryl, qué alivio que llegas! -, exclamé con entusiasmo. -¿Podrías considerar ¡sacarme de aquí, por favor!?
-¿Por qué? -, respondió Cheryl con un tono que parecía una mezcla de curiosidad y burla.
-¡Como que porqué, Cheryl, no hay televisión! ¿Qué se supone que haga mientras esté aquí? -, le expliqué, tratando de mantener la frustración fuera de mi voz.
-Lo siento, pero tendrás que quedarte en el hospital una o dos semanas, según lo que diga el doctor -, dijo Cheryl con una sonrisa comprensiva.
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Por Azares Del Destino Trajiste Color A Mi Vida
Teen Fiction"¿Qué harías si te encontraras a una misteriosa chica en circunstancias algo delicadas? En una mañana aparentemente ordinaria, la vida de Nate, nuestro protagonista, da un vuelco inesperado cuando se cruza con una hermosa chica inconsciente mientras...