Venus. 10° Versión (Más es mejor)

🔥CAPITULO 12🔥

SIN EDITAR.

🧨<<{Adel}>>🧨

Amira: Imposible, tu no puedes ser la dueña.

Venus se ríe a mi lado antes de que una sonrisa maliciosa se planté en su rostro.

Venus: Es posible cuando eres una D'Angelo.

Comemos luego de eso, el ambiente es tenso por parte de Amira que se la pasa mirando más a Venus y parece que mi hermano tendrá muchos gritos al llegar a la casa.

¿Por qué? Por qué la mimada no tiene lo mismo que Venus.

Nunca lo tendrá.

Volvemos a la casa, Amira llevó a Matheus a su habitación seguramente para amenazarlo con lo que tiene que darle.

Mi hermano y Mael se llevaron las cajas de ropa, calzado y demás cosas que llegaron, Venus y yo estamos solos en la sala.

Adel: ¿Harás algo?

Venus: Sí, estoy considerando ir al gimnasio.

Adel: ¿Puedo ir contigo?

No quiero separarme de ella, no después de sentirme tan cerca todo el día.

Tanto que hasta tuve mis dedos en su coño.

Venus: Me cambiare, te veo allí.

Se va a cambiar y yo me pongo de pie acomodando el bulto de mi pantalón.

Carajo.

¿Por qué tuve que pensar en mis dedos dentro de su coño?

Tan caliente, húmedo y estrecho.

Mierda.

Nathaniel: Carajo primo, ¿andas viendo porno en la sala o por que el paquete?

Señala mi entrepierna.

Adel: Cállate estúpido, estaba viendo a Venus.

Nathaniel: Hubieras empezado por ahí idiota, así cualquiera espera un paquete.

Se pone a mi lado mirando a la misma dirección que yo, misma por dónde desapareció Venus.

Adel: Me besó, varias veces.

Nathaniel: Puto suertudo.

Adel: Y la toque.

Me mira con los ojos y la boca abierta, asombrado por lo que le dije, pero yo sigo mirando al frente acomodando el bulto para que deje de doler.

Nathaniel: Me estoy perdiendo cosas, puta madre.

Adel: Pues me tocará a mí perderme algunas cuando sea mi turno de buscar las copias.

Me saco el buzo y la remera quedando solo en jogging.

Nathaniel: ¿Qué haces? A mí no me interesa tu cuerpo.

Adel: Iré a entrenar con Venus.

Nathaniel: Quizás me pase a verlos.

Adel: No me arruines el momento o a tí si te mato.

Me voy hacia el gimnasio sin escucharlo, cuando entro hay varios hombres a los que claramente les digo que se vayan y que nadie puede entrar, no verán a Venus transpirada y apetecible.

Mientras golpeó el saco la puerta vuelve a abrirse y estoy por insultar a la persona que haya desobedecido mi orden, hasta que veo a Venus.

Viene caminando hacia mí con un top deportivo del que parece que sus pechos escaparan en cualquier momento, unos leggings que marcan sus perfectas curvas y una coleta que me hace imaginarla de rodillas mientras tiro de ella.

O en cuatro tirando para que su cabeza se vaya hacia atrás.

Joder.

Venus: Llegué.

Cómo si no lo hubiera notado, o mi polla.

Adel: Te puedo ver.

Venus: No me digas y yo creía que traía la capa de invisibilidad de Harry Potter —se encoge de hombros— lastima, por qué me muero de ganas de pasar mi lengua por todo tu torso en este momento, pero ya me viste, ya no tiene gracia.

Joder.

Puta madre.

¿Puede mi polla estar más dura?

Adel: Quizás no te veo.

Venus: Tu dime —se acerca a mi y pasa su lengua por mis pectorales— ¿Me ves?

Adel: No.

Mi respiración se vuelve agitada cuando su lengua baja hasta el inicio de mi bóxer.

Venus: ¿Sigues sin verme?

Adel: No veo nada.

En lo absoluto.

Siseo cuando su mano se introduce a mi pantalón sacando mi polla, no pierde mucho tiempo y pasa la lengua por toda la longitud y rodea la punta con sus labios.

Venus: ¿Sigues sin verme?

Susurra con mi polla tocándole los labios.

Adel: Sigo sin verte.

Venus: Genial.

Dice y procede a pasar varias veces su lengua por toda mi polla cubriendola de su saliva.

Se pone de pie y se saca la ropa mientras está atenta a cada movimiento mío.

¿Si la agarro y le arrancó la ropa se irá?

¿Sí digo que la veo y que me encanta lo que veo se irá?

Salta sobre mí haciendo que la levanté para enredar sus piernas en mis caderas, su coño queda justo encima de mi polla y puedo sentir el calor que mis dedos sintieron hoy.

Venus: Opino que la ducha es una mejor opción a qué nos miren desde las puertas de vidrio.

Cierto.

Camino hacia las duchas mientras beso su cuello y pecho escuchando sus leves gemidos y jadeos.

Entró en uno de los cubículos que claramente no tiene puerta, abro la ducha porque me encantaría ver las gotas cayendo de su cuerpo.

Ambos nos mojamos y no me importa todavía tenés las zapatillas o la ropa hasta mis rodillas.

Me meto en ella haciendo que su cabeza se vaya hacia atrás y yo pego ni boca a su cuello mientras la embisto.

Venus: Ah...

La penetró al mismo tiempo que ella sube y baja, pero un ruido de algo cayendo nos interrumpe.

Adel: Mierda.

Lo mataré.

Ella gira su rostro a mirar al estúpido que acaba de tirar una botella que se ve traía en la mano, proque está vestido para entrenar.

En serio el estúpido quería interrumpir mi momento.

Venus: ¿Bonito?

No la dejo seguir prestándole atención mientras sigo embistiendo, él nos sigue mirando como estupIdo y a mi no podría importarme menos, estoy follando con Venus.

Y no pienso parar por él.