Venus. 10° Versión (Más es mejor)

🔥FINAL🔥

💣<<{Akos}>>💣

Tiempo después…

No todo en la vida salió como lo quería, hubo cosas que pasaron que no me gustaron, pero después de haber pasado tanto tiempo me siento feliz y tranquilo de haber ayudado a mi familia a superarlos.

Impulsandolos a siempre dar un paso hacia adelante.

Yo ayudé.

Ya sé imbécil estás dentro mío.

Malik: Gracias.

¿A este que le picó? ¿Nos dijo gracias?

Estoy tan sorprendido como tú.

Akos: ¿Por qué?

Malik: Ayudarla, por estar con ella cuando lo necesita.

Akos: No hay que agradecerme, es lo que tengo que hacer por mi mujer.

Intentó no reírme por el gruñido que me dio.

Malik: Sabes antes te odiaba por robarme a la mocosa, todavía lo hago, quería matarte, también todavía lo hago, el punto es que, en el fondo, muy, muy, muy, en el fondo Desmon y yo estamos felices de que ella te tenga.

Akos: No me digas que tus nietos te ablandaron, puedo darte más, le dedicamos mucho tiempo a la práctica para que en cuatro meses tengas dos más.

Sonrió.

Malik: ¡No! ¡No! ¿¡Qué hicieron!? Los niños tienen ocho jodidos meses, ¡Mocosa ven aquí! ¡Y ustedes corran!

Akos: Te alegrará saber que son niñas, gemelas.

Malik: ¡No eso lo hace todavía peor, habrá más mocositas que idiotas como ustedes robaran!

Un momento, ¿No dijimos que las haríamos monjas?

Eso haremos, ni muerto dejaré que unos estúpidos se lleven a mis princesas.

Malik: ¡Mi ángel! ¡Dile algo a tus hermanos ya que no me dejas matarlos! ¡Me la volvieron a embarazar!

Todos se están riendo de la escena de mi cuñado/suegro y felicitando a mi mujer, hermanos y demás.

Arlene: Ya vete niño, ve a felicitar a tu mocosa y a envolverla en papel burbuja como quisiste hacerlo con el primer embarazo.

Malik: ¿Si se podía hacer eso? Aimar me dijo que no.

Akos: Si se puede, ponle doble capa.

Él se va y mi abuela se sienta a mi lado mientras observamos a toda la familia.

Akos: ¿Qué es eso que te está carcomiendo por dentro?

Raro en ella, que no le molesta matar, insultar o ofender a nadie, es extraño que algo le esté pegando duro.

¿Se estará por morir?

Que avise y la mató, para que va a sufrir.

Arlene: Me enteré de algo que nadie sabía y creo que decirlo abrirá muchas heridas.

Akos: ¿Tienes sentimientos?

Arlene: Tú tienes por qué yo no.

Akos: No los demuestras.

Arlene: Tenemos distintas formas de demostrarlos, tu acompañas hasta el último respiro, yo apoyo, cubro sus espaldas, los consiento, soy su jodido ángel guardián.

Ángel guardián, ¡Ja! Más diablo que otra cosa.

Akos: ¿Me contarás que es lo que te enteraste o para que te sientas conmigo?

Arlene: Eres el único igual de retorcido que yo.

Akos: No sé de qué hablas.

Arlene: Se los cadáveres que escondes niño, se que fueron por proteger a los demás, se todo de tí.

Akos: Punto valido, cuenta el secreto o vete, yo tampoco tengo paciencia con todo el mundo y la vista me sienta mejor solo.

Mi abuela se ríe.

Arlene: Me alegra saber que saliste igual de mierda que yo.

Akos: Me ofendes.

Arlene: No digas mentiras, te gusta ser mierda, porque entonces ella —señala a mi calma— ella puede ver las diferencias en sus tratos, la amas tan profundamente que te duele el pecho cada vez que la miras.

Así es, pero no lo admitiré.

Akos: ¿Te estás reflejando?

Señaló con mi cabeza a sus esposos, mis abuelos.

Arlene: Puede ser.

Akos: ¿Tan pesado es el secreto que te pone sentimental?

Arlene: Lo es, ¿Me prometes no decirlo?

Asiento con mi cabeza.

Arlene: La abuela Addy tenía cáncer.

El shock me hace mirarla, sé de quién habla, nos hablan siempre de ella, pero ninguna de las cosas que me dijeron refleja esa enfermedad.

Akos: ¿Qué?

Arlene: Descubrí que la abuela tenía cáncer y fue la razón por la que se mató.

No puedo creer lo que me está contando.

Akos: ¿Cómo te enteraste?

Arlene: Curioseando.

Akos: Fuiste a su ala y revolviste sus cosas.

Arlene: Puede ser…

Akos: Carajo abuela, nunca debimos enterarnos de esto.

Arlene: Ni me digas, me llevo arrepintiendo desde ese día y no por enterarme, sino por no poder decirles.

Akos: No creo que la abuela Atenea estaría bien si supiera que pudo atender a su madre y no lo hizo.

Arlene: Nadie estaría feliz de enterarse de eso, por eso me siento mal, lo oculto por su bien, pero a mí no me gusta ocultarle cosas a mi familia.

Akos: ¿Y me lo encajaste para aliviar tu carga, verdad? Que gran abuela eres.

Arlene: No serías un buen nieto si no me ayudabas en esto y confío en ti para no contarlo, ella no lo quería hacer no seremos nosotros los que fallemos a sus deseos.

Akos: ¿Piensas hacer lo mismo que ella?

Veo a mi mujer venir hacia nosotros con una sonrisa.

Arlene: No, me moriré al lado tuyo para cuando sea fantasma jalarte de las patas.

Akos: Hazlo con Benjamin, lloraría y suplicaria.

Ambos nos reímos.

Venus: ¿De qué hablan?

Akos: De la hermosa familia que tenemos y de la mujer espectacular que conseguí.

Arlene: Tu no lo hiciste niño, ella te busco o por qué crees que Mía te dió su ubicación.

Se va riéndose.

Akos: ¿Tú le dijiste que me la de?

Venus: Eres mío amor, lo fuiste desde que mis ojos se posaron en tí.

Fin.